Peugeot desvela el aspecto final del 9X8 para correr en Le Mans... y no tiene alerón trasero

El Peugeot 9X8 Hybrid nace a partir de la nueva normativa Hypercar (LMH) exigida por el Automobile Club de l'Ouest, entidad organizadora de las 24 Horas de Le Mans, y la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), y aunque su estreno en competición se producirá en un momento aún no determinado de la presente temporada, su principal objetivo queda un poco más lejos, pues la firma del león espera ganar con él la carrera de resistencia más legendaria del mundo en 2023, cuando Peugeot retorne a Le Mans para tratar de repetir una victoria como las logradas en 1992 y 1993 con el 905 Evo 1 (motor V10 de gasolina), o en 2009 con su 908 HDi-FAP (motor V12 diésel) pilotado por David Brabham, Alexander Wurz y el español Marc Gené.

Para este cuarto asalto al triunfo en las 24 Horas de Le Mans la tecnología será radicalmente diferente, empezando por el conjunto propulsor, donde la electrificación tiene enorme protagonismo. Porque el Peugeot 9X8 Hybrid Hypercar dispone de mecánica híbrida y tracción a las cuatro ruedas, aplicando en cierto modo una tecnología de la que ya disfrutan algunos de sus modelos de serie, como el 3008 Hybrid4 o el 508 PSE; aunque con un rendimiento a otro nivel, digno de la mejor carrera del mundo. Porque combina un motor de gasolina V6 Biturbo de 2,6 litros, que rinde 500 kW (680 CV de potencia) y va situado en la parte trasera, con un motor/generador eléctrico de 200 kW (270 CV) ubicado en la zona delantera. Para Olivier Jansonnie, director técnico del proyecto, "con el 9X8, Peugeot inicia un nuevo capítulo entre los superdeportivos híbridos, ya que las prestaciones cada vez son más eléctricas y aportan mayor ventaja sin sacrificar nada en términos de competitividad".

La marca francesa ya había mostrado hace meses los rasgos generales del 9X8 cuando anunció que volvía a la competición de primer nivel con un Hypercar, y aunque el primer prototipo exhibido carecía de alerón posterior, algunos daban por hecho que finalmente la aerodinámica mandaría y el coche definitivo se plegaría a los convencionalismos. Error. Porque no solo los primeros ensayos dinámicos en el circuito de Motorland Aragón se han desarrollado sin alerón, sino que ahora Peugeot confirma oficialmente que el 9X8 prescindirá de ese elemento en su formato definitivo.

Alerón, indispensable desde 1971

La propia Peugeot recuerda que el alerón posterior apareció por vez primera en la carrera de Le Mans en 1967, y que desde entonces se ha convertido en un aditamento habitual. De hecho, desde 1971 ningún coche ha ganado en la mítica prueba francesa sin alerón trasero, una pieza clave de la que ahora han decidido prescindir los diseñadores e ingenieros de la marca, que esperan lograr un efecto aerodinámico similar con la exclusiva definición exterior del 9X8: zaga muy corta, un habitáculo ligeramente puntiagudo y las ruedas posteriores rodeadas de manera muy particular por las formas de la carrocería.

Además, el objetivo de los diseñadores, que trabajaron en estrecha colaboración con Peugeot Sport en todo momento, es que el 9X8 fuera diferente a cualquier otro modelo y pudiera ser fácilmente identificado tanto de día como de noche por los aficionados, ya fuese en directo desde una grada en Le Mans o a través de la televisión. La clave está en los componentes luminosos distribuidos sobre su silueta, con la ya clásica firma de las tres garras presente en todos los coches de serie actuales de Peugeot. El equipo de Matthias Hossann, director de Estilo de Peugeot, no encontró muchos problemas, al parecer, para situarlas en la parte delantera del nuevo Hypercar, pero emplazarlas en la parte posterior sí requirió mucho trabajo, y acabaron integrando las tres garras iluminadas sobre componentes compuestos separados, creando unos espacios intermedios a través de los cuales se extrae el aire.