El motor que marca un antes y un después en la resurgida Moto Guzzi

Echando un rápido vistazo a la Moto Guzzi V85 TT, enseguida compruebas que es fiel al concepto que desde hace cincuenta años ha marcado el diseño de la marca de Mandello del Lario: motor bicilíndrico transversal en V a 90º y transmisión por cardán. Una Guzzi más, como la V9, o la Stelvio, o la California, o cualquiera de las motos que bajo el paraguas de Piaggio se han diseñado en los últimos años.

Pero no es así. No. La Moto Guzzi V85 TT marca un antes y un después en la historia del fabricante italiano. Su nuevo motor, moderno y avanzado tecnológicamente, es el eje en torno al cual se desarrollará en el futuro la nueva gama de Moto Guzzi. Y, si los próximos diseños se muestran tan acertados como el de la V85 TT, podremos celebrar el regreso de una marca histórica al mercado con productos verdaderamente atractivos.

Hemos tenido la oportunidad de probar la Moto Guzzi V85 TT recientemente, en medio de la ola de frío que nos ha azotado tras la Semana Santa, y a pesar de las difíciles condiciones climatológicas la sensación que nos ha dejado esta moto ha sido realmente positiva. Con lluvia, viento y nieve la disfrutamos plenamente. Así que no me puedo ni imaginar lo grato que será poder rodar tranquilamente un día luminoso a pleno sol. Una delicia.

Nuevo motor

La esencia de la Moto Guzzi V85 TT es su nuevo motor, que supone un hito en la marca. Sigue fiel a los cánones de Guzzi: bicilíndrico transversal en V a 90º, con dos válvulas por cilindro, refrigeración por aire, inyección electrónica y transmisión secundaria directa por cardán. Parte de la misma plataforma que el motor V9, pero en este caso se ha procedido a un aligerado general, y se ha aumentado el diámetro de las válvulas. El sistema de lubricación es un cárter semiseco tan efectivo que han prescindido de radiador de aceite, y el cigüeñal se ha aligerado en más de un kilo, reduciendo además las vibraciones.

El bastidor de doble cuna en tubo de acero también se ha aligerado al máximo, reduciendo en 2,5 kilos su peso con respecto a la gama V7 y V9. Este trabajo permite disfrutar de un conjunto que pesa 229 kilos, pero su bajo centro de gravedad y un acertado reparto de pesos permite tener una sensación de ligereza extraordinaria.

El motor ofrece 80 CV de potencia, lo que supone un notable paso adelante con respecto a la base del propulsor V9. Empuja con suavidad desde bajo régimen, ofreciendo mucho par en todo momento. De hecho, ofrece 78 Nm desde las 3.500 rpm, y estira hasta las 7.500 rpm aproximadamente. La moto corre más que suficiente, mucho más de lo que te puedas imaginar.

La transmisión secundaria es su otra seña de identidad. El cardán, de toma directa, funciona de forma impecable, es muy suave y no tiene nada que ver con los viejos sistemas del pasado. La moto no se retuerce cada vez que engranas una marcha, ni vibra.

La tecnología es otra de las grandes bazas de la V85 TT. Dispone de acelerador electrónico 'ride-by-wire' —con una electrónica heredada de la Aprilia RSV4, la superdeportiva de SBK—, inyección electrónica Marelli, y un sistema de gestión de motor que ofrece tres modos de conducción (Road, Rain, Off-Road), y control de tracción. Los tres modos siempre dan la máxima potencia, 80 CV, pero en modo Rain (lluvia) ofrece una respuesta más suave al acelerador –por mucho que enrosques, la centralita interpretará que en ese modo tiene que entregar con mayor suavidad la potencia—, y en modo Off-Road además de suavizar la respuesta, aumenta el freno motor.

Tiene control de crucero y ABS desarrollado por Continental, y en cuanto a los frenos, dispone de pinzas de anclaje radial de cuatro pistones, con discos de 320 mm de diámetro delante, y 260 mm detrás. La iluminación es de LED en todas las ópticas, y dispone de una amplia pantalla TFT de fácil y cómoda lectura. Además, es una moto totalmente conectada a través de la plataforma Moto Guzzi MIA, que permite la conexión de la moto con el teléfono: reproduce música, recibe llamadas, y transforma la pantalla en un navegador.

Lista para viajar

Hay que destacar su acertada ergonomía. Cuenta con una pequeña cúpula que cumple sobradamente su función de protección, y se puede circular a buen crucero erguido, sin necesidad de esconderse del viento, y los paramanos son otro aliciente, además de contar en opción con puños calefactables. La posición de conducción es excelente, los cilindros del motor no molestan. Es más, son una protección aerodinámica adicional, y la baja altura del cómodo asiento (835 mm) permite llegar al suelo con seguridad. El asiento del pasajero es un verdadero sofá, amplio y cómodo, con un mullido acertado: no se ablanda ni es duro como una tabla.

Además, el reglaje de las suspensiones, que a pesar de su sencillez son muy eficaces, es excelente. Circulamos por todo tipo de vías: carreteras de buen firme donde rodar rápido, otras muy rotas, y algunas especialmente bacheadas que pusieron a prueba a la parte ciclo, y la respuesta fue estupenda. Y en pistas de tierra, en este caso con barro y charcos por culpa de la lluvia, el modo de conducción Off-Road, que desconecta el ABS de la rueda trasera y modifica la entrega de par, el comportamiento es estupendo. Lógicamente, mejor con los nuevos Michelin Anakee Adventure, que tienen más dibujo para morder la tierra, que los Metzeler Tourance Next, de clara orientación asfáltica. Pero por lo negro los dos funcionan de manera impecable.

Otra de las bazas de la V85 TT es su generoso depósito, que tiene nada menos que 23 litros de capacidad, lo que permite alcanzar una autonomía próxima a los 400 kilómetros, según Moto Guzzi.

El equipamiento de serie es básico, pero se puede completar con una amplia gama de accesorios. Aunque ya decimos que la protección de la cúpula es bastante buena, se puede mejorar con una pantalla más amplia, además de instalar puños calefactables, maletas y baúl, y otra serie de extras a gusto del consumidor que realzará su carácter turístico, porque esta moto se presenta como una excelente opción para viajar.

Moto Guzzi engloba a su V85TT dentro de un nuevo segmento, al que denomina Classic Enduro. De momento no hay modelos de otros fabricantes que se puedan catalogar así. No cabe duda que su imagen clásica encaja con la denominación, aunque no cabe duda que sus aspiraciones sobre la tierra, a pesar de su buen comportamiento, son limitadas. Pero al menos ofrecen a sus clientes la posibilidad de adentrarse en un camino con unas mínimas garantías, si alguien tiene esa necesidad. Y no es una exageración: si un día quieres rodar con ella por pistas y caminos, podrás hacerlo sin miedo.

Su PVP es de 10.990 euros, un precio de salida muy competitivo que la convierte en una moto más que interesante, y sobre todo muy original.

Ficha técnica

• Motor: dos cilindros transversales en V a 90º, cuatro válvulas, refrigeradopor aire.
• Potencia máxima: 80 CV a 7.000 rpm.
• Par máximo: 78 Nm a 5.000 rpm.
• Cilindrada: 853 cc.
• Dimensiones: ND.
• Distancia entre ejes: 1.530 mm.
• Neumáticos: 110/80-19 delante y 150/70-17 detrás.
• Depósito de combustible: 23 litros.