La UE apuesta por el ESP y será obligatorio desde 2011

La pasada semana la Unión Europea aprobó una directiva que hace obligatorio el montaje del control de estabilidad, más conocido por ESP, a partir del mes de noviembre de 2011 en todos los vehículos nuevos. Además, los vehículos de nueva matriculación deberán tener este sistema instalado antes de 2014.

Esta directiva, todavía pendiente de aprobación por el Consejo de Ministros de la UE, afecta igualmente a los vehículos industriales. En este caso, la aplicación para los vehículos de transporte de más de 3,5 toneladas de peso máximo autorizado o para los de transporte de personas con capacidad para más de ocho viajeros, la fecha de aplicación será el mes de noviembre de 2013 para vehículos nuevos. Habrá una moratoria de dos años más para los de nueva matriculación.

Esta normativa irá asociada a otras con el objetivo de reducir la siniestralidad en las carreteras de la Unión Europea. Así, también deberán incluir un sistema de ayuda a la frenada de emergencia y otro de alerta por cambio de carril involuntario.

Lo que se busca es reducir los accidentes de tráfico de forma importante en los próximos años. En 2001 se produjeron 50.000 víctimas mortales en las carreteras europeas y el objetivo es que en 2010 esa cifra se reduzca a la mitad. Pero los planes son mantener una línea constante de reducción en los años siguientes.

Si la obligatoriedad del ESP en Europa será a partir de 2011, en el caso de Estados Unidos el organismo NHTSA encargado de la seguridad en las carreteras ha fijado el año 2012 como fecha límite para que todos los coches nuevos lo lleven.  

En este sentido, la obligatoriedad de montar el ESP es una garantía de reducciónd e los accidentes. Este control de estabilidad es como un ángel de la guarda que va escondido en el interior del vehículo y que sale cuando se presenta una situación comprometida. El ESP fue desarrollado en el año 1995 por la compañía alemana Bosch y se ha ido instalando paulatinamente en todos los nuevos vehículos. Según los datos del primer semestre de 2008, en España un 62% de los vehículos matriculados lo incorporaban en su equipamiento, posicionándose por encima de la media europea que se sitúa en el 53%.    

Diferentes estudios realizados por los  institutos de investigación de accidentes han demostrado que el derrape es la causa principal de los accidentes con víctimas mortales. “El ESP® puede evitar hasta el 80 por ciento de los accidentes por pérdida de control del vehículo”, según Werner Struth, director de la División Chassis Systems Control de Bosch. Struth añade que “después del cinturón de seguridad, este sistema es la tecnología de seguridad más importante en el vehículo”.