El Salón de Barcelona, por el buen camino

Fue el 10 de octubre pasado cuando Citroën hizo pública su postura de no asistir al Salón de Barcelona. Y tras el anuncio de Citroën fueron muchas otras las marcas que avisaron que no asistirían. Hasta el punto de que la propia ANFAC, la asociación que engloba a los fabricantes de automóviles instalados en España, hizo pública su postura de no participar en la 90 edición del Salón.

Ese mismo día comenzaron las presiones de todo tipo para tratar de salvar una muestra que estaba, o al menos lo parecía, tocada de muerte. Con una situación de crisis como la que vive el sector de automoción, con una caída de ventas ya próxima al 50%, muchos fabricantes se negaron a pagar las fuertes inversiones que suponen la asistencia a la muestra catalana.

Citroën, con su cambio de actitud, da un vuelco a la situación el salón. Las causas esgrimidas por el fabricante instalado en Vigo son básicamente el esfuerzo –importantísimo según indica la propia marca- por parte de los organizadores de la exposición catalana para reducir los costes de participación de una forma drástica. Además, la propia Citroën presentará allí un concept que se corresponde en un 95% con lo que será el nuevo Citroën DS3.  

Esto ha sido posible gracias a la participación de empresas patrocinadoras entre las que figuran La Caixa y Agbar que con su patrocinio reducen de una manera considerable el coste de la participación en dicha salón. Y la postura de Citroën, que en su momento contagió a otras marcas para no asistir, ha servido en este caso para convencer a otros fabricantes para volver a pensarse muy seriamente su asistencia.  

Así, en la Junta Directiva de ANFAC celebrada el pasado viernes, la mayoría de las empresas que la componen han decidido asistir a la Edición del 90 Aniversario del Salón Internacional del Automóvil de Barcelona, esperando que esto sirva para enviar un mensaje positivo al mercado.

En una nota hecha pública por dicha asociación se indica que “ANFAC quiere agradecer a los organizadores de la FIRA de Barcelona, a su equipo directivo, al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y, en especial, a las Autoridades Catalanas, los grandes esfuerzos que han hecho para que esto sea posible, en un momento tan difícil para la industria”.

Si a esto sumamos la postura de Aniacam, la asociación de importadores que aunque en su última reunión no hizo una postura oficial sino que dejó la mano libre a cada una de sus empresas asociadas para tomar las decisiones oportunas. Sin embargo, la mayor parte de estas marcas ya han anunciado que asistirán.

O lo que es lo mismo, que a falta de algo más de dos meses para su celebración, el Salón de Barcelona vuelve a ser una realidad que servirá para afianzar el mercado del automóvil.