Air France vuelve a incendiar los cielos con su 'profit warning' y tumba un 7% a IAG

La pista, de aterrizaje más que de despegue, la dio hace un mes Lufthansa con un recorte en sus estimaciones de beneficio para este y los próximos ejercicios. Era el germen de lo que podía estar por venir: un recorte generalizado por parte de las principales aerolíneas europeas que evidencia que el pulso del sector no atraviesa por sus mejores momentos. Días más tarde Aer Lingus dio un nuevo paso y ahora la evidencia se hace dolorosamente insoportable tras admitir Air France-KLM que las cuentas previstas para este año no salen.

El grupo franco holandés. ha reducido sus previsiones económicas para 2014 por consecuencia de la sobrecapacidad de algunas líneas de larga distancia, la deuda del Gobierno de Venezuela con las compañías aéreas y la caída del transporte de mercancías. ¿En qué se traduce esto? En un recorte desde los 2.500 millones de euros previstos inicialmente como beneficio bruto de explotación (ebitda) a una cuantía situada entre los 2.200 y 2.300 millones de euros.

La reacción no ha tardado en hacerse palpable en los principales referentes del sector aéreo. IAG se desploma un 7,12% en bolsa hasta los 4,22 euros por título. En el resto del sector, la propia Air France KLM se deja un casi un 9%, Ryanair un 2,8%, Easyjet un 5,8% y Lufthansa casi un 4%.

El pesimismo de la compañía prevalece, mientras los expertos tienen muy presente la caída del tráfico aéreo en el área del Atlántico norte. Así las cosas, de poco sirve el aumento del tráfico de pasajeros en un 2,5% en el primer semestre del año y del 2,9% en el mes de junio. Entre enero y junio, el grupo transportó a 37,86 millones de pasajeros, pero vio el transporte de mercancías caer un 4,3 %.

Parte del problema de la compañía aérea está vinculado a Venezuela pues la Air France KLM mantiene un litigio con el Gobierno de Caracas, que le adeuda unos 290 millones de dólares, según la aerolínea. Desde 2003, las compañías aéreas están obligadas a vender sus billetes en ese país en la moneda local, el bolívar, que el Estado les cambia después en dólares. Sin embargo, ante la caída de las reservas de divisa extranjera de Caracas, el Estado dificulta los pagos e intenta negociar descuentos. El grupo publicará sus cuentas semestrales el próximo 25 de julio.