El descenso de demanda en países emergentes amenaza la producción de coches

Los fabricantes de automóviles, que preveían mantener los volúmenes de producción a pesar de la crisis económica mundial, tendrán que modificar sus cuentas, después de que en los mercados emergentes, que se habían convertido en un previsible salvador del sector, se vaya a recortar la demanda.

En un estudio de la gestora de fondos Dexia, figura que en algunos de los países emergentes, como China, India o Indonesia, se han reducido los subsidios de los carburantes, desencadenando posibles subidas en el precio de hasta un 50 por ciento, una circunstancia que "afectará seriamente a la demanda de coches".

A pesar de la escalada de los precios del petróleo, los países en desarrollo registrarán crecimientos exponenciales cada año de su parque automovilístico, como es el caso de Brasil donde la fabricación de vehículos crece aproximadamente el 43%.

Los fabricantes de coches para sortear con el menor daño posible la crisis económica han apostado por la deslocalización de sus plantas junto al desarrollo tecnológico, una estrategia encaminada a la reducción de costes de producción.

No obstante, el efecto de estas operaciones se ve contrarrestado a consecuencia del incremento del precio de las materia primas necesarias en la producción de automóviles.

En principio, las subidas, que en el acero podrán ser de entre un 30 y un 60% en 2009, no afectarán a los fabricantes hasta finales de 2008, cuando se produzcan las negociaciones con los proveedores para renovar los contratos a largo plazo de suministro.

El impacto de este escenario no será asumido en la misma medida en el sector, toda vez que las cadenas de lujo disponen de mayores márgenes de beneficio que las generalistas.

En este sentido, Dexia prevé que se pueden registrar descensos en el margen del Ebitda de las empresas de entre un 5 y un 30%, en el peor de los casos.

Los mercados europeos tampoco ayudan a los resultados de los fabricantes, debido a la caída en la demanda de vehículos nuevos, que en España alcanza el 17,6% en el primer semestre.