Cuentas remuneradas: obtener rentabilidad por sus ahorros cada vez es más complicado

Es el producto que ha quedado de lado en los últimos meses por parte de los bancos. Una cuenta remunerada sin más pretensión que la de albergar el dinero del cliente de turno interesa cada vez menos a la mayoría de entidades bancarias. El objetivo principal es atraer a clientes que vinculen sus ingresos recurrentes y contraten una cuenta nómina. Es el primer paso para establecer una relación que más adelante derivará en el interés por otros productos como los fondos de inversión o los planes de pensiones en los que los bancos obtienen mayores comisiones.

Frente al bombardeo constante de ofertas de las cuentas nómina, las cuentas a la vista -las que no exigen domiciliación alguna- ofrecen unos rendimientos muy limitados a la hora de contratarlas. Los grandes bancos como La Caixa, BBVA o Banco Sabadell ni siquiera remuneran al cliente por contratar uno de estos productos.

Entre los que sí lo hacen, sigue teniendo un papel destacado en el sector la Cuenta COINC de Bankinter, que ofrece una rentabilidad del 1,4% TAE, un producto que en el año ha rebajado su interés desde el 1,75% que ofrecía en enero. En este aspecto, EVO Banco también ofrece un 1,5% TAE en su Cuenta Inteligente (frente al 2% al que comenzó el año) y Openbank e ING Direct ofrecen un 2% a tres meses y Banco Mediolanum un 2% a seis meses.

Todo ello con permiso de Banco Santander, que en diciembre volvió a calentar la oferta comercial al ofrecer una cuenta remunerada sólo en Cataluña con una remuneración del 1,75%. El movimiento, que no dejó indiferente a nadie, no deja de resultar significativo, ya que en los últimos años el banco cántabro se había sumado a la política de las grandes entidades de no remunerar las cuentas a la vista de sus clientes.