Cuatrecasas aprueba una revolución: nueva estructura interna y 81 nombramientos

Revolución en Cuatrecasas. Según ha podido saber El Confidencial y confirman desde el bufete, el despacho ha aprobado una importante reestructuración interna que conlleva un nuevo modelo de organización de la firma en torno a grupos de especialidad y que ha requerido hasta 81 nombramientos. Adoptar esta nueva forma de operar es uno de los ejes del plan estratégico 2024-2026. La remodelación, de la que se informó a los socios en la junta general celebrada a finales del año pasado, fue concretada y aprobada definitivamente el lunes por el consejo de administración y comunicada esa misma tarde a los 250 integrantes que componen el partnership.

La nueva estructura de Cuatrecasas abandona las oficinas como unidad de referencia organizativa y también se aparta de las áreas jurídicas clásicas como pauta de clasificación de los letrados y el trabajo. En su lugar, la firma crea una suerte de matriz en torno a la cual se organizarán los abogados, conformada por dos grandes ejes. El primero son los grupos de especialidad, divididos a su vez en subgrupos que dan un paso más allá en la concreción de la materia. El segundo, que atraviesa horizontalmente el anterior, son los sectores e industrias. Todos los profesionales estarán ubicados en uno o varios ámbitos de ambos ejes.

En total, se crean 12 grupos de especialidad: Litigación, Corporate, Finance, Fiscal, Penal, Público, Arbitraje, Competencia, IP (Propiedad Intelectual e Industrial), Laboral, Litigación Tributaria y Restructuring. Los seis primeros tienen un número variable de subgrupos. Así, por ejemplo, Corporate se fragmenta en 10 divisiones: Corporate Compliance, Fund Fundation, MEVA y Corporate Governance, M&A Infraestructuras y Energía, M&A Inmobiliario, Private Equity, Private M&A, Servicios Financieros y Seguros, Societario/Contratación y Venture Capital. Por su parte, Litigación se subdivide en seis: Casación, DDHH y Empresa, Litigación Comercial y Societaria, Litigación de Daños y Acciones Colectivas y Consumo, Litigación de Finance-Seguros y Litigation Funding.

Esta clasificación en grupos y subgrupos, detallan desde Cuatrecasas, será dinámica. Es decir, si el mercado evidencia que se requiere otra especialidad, esta podrá ser creada. También al revés, cabrá que eliminen alguna de ellas si comprueban que ya no son necesarias o no se adecúan a lo que demandan los clientes. De momento, esta estructuración en especialidades se aplica a todas las oficinas en España, involucrando también a Portugal en alguna de ellas. La idea es que, en el futuro, implique a todas las sedes del bufete, incluyendo las de Latinoamérica.

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Cada grupo y subgrupo contará con un coordinador con autoridad a nivel nacional —con independencia de en qué oficina se encuentre—, cuyo cargo tendrá una vigencia de tres años. Esto potenciará una rotación en estas posiciones con la que el bufete pretende que los socios que asuman dichas responsabilidades, aunque asuman labores de gestión, no se desconecten de la práctica y los clientes. Además de a los coordinadores, la firma también ha designado ya a sus sucesores —una suerte de número dos que tendrá la categoría de adjunto— para garantizar su preparación para el cargo y una transición ordenada en la dirección de las especialidades.

Hay un total de 95 posiciones en el nuevo organigrama que, para ser cubiertas, han requerido 81 nombramientos. De este modo, apuntan desde Cuatrecasas, se eleva de forma notable el número de socios involucrados en la gestión y la estrategia del despacho. Organizativamente, los coordinadores de los subgrupos rinden cuentas ante los de los grupos y estos últimos, 12 en total, reportarán a la dirección general.

El eje horizontal, el de los sectores e industrias, cuenta con una estructura de 16 unidades. Se trata de Arbitraje Internacional; Automoción; Compliance e Investigaciones; Cultura, Deporte y Entretenimiento; Empresa Familiar; Energía e Infraestructura; Sector Financiero, Fund Fundation; Inmobiliario; Retail; Salud; Sectores Estratégicos: Aeroespacial y Defensa; Seguros; Sostenibilidad; TMT, y Turismo y Hotelero. En la organización por sectores, al contrario que la de grupos y subgrupos, ya está involucrado todo el despacho, incluyendo los profesionales de las oficinas de fuera de España.

Los directores de oficina no desaparecen, pero ostentarán un papel más institucional, de representación y generación de negocio

Con esta nueva estructuración, en la que la ubicación geográfica de los profesionales pasa a ser secundaria, cambian las funciones de los directores de oficina, aunque estos cargos no desaparecen. Así, pasarán a ostentar un papel más institucional, de representación y generación de negocio, así como de conocimiento y conexión con el mercado local, relegando las funciones más organizativas y de gestión. Con este cambio, inciden desde Cuatrecasas, dan un importante paso adelante para constituirse y funcionar como una única firma, siendo capaz de atender las necesidades de cualquier cliente en cualquier jurisdicción con los mejores especialistas en una materia o sector, lo que profundiza en su estrategia de enfocarse al trabajo y de mayor valor añadido, uno de los objetivos estratégicos del bufete. Con esta organización, subrayan, se pone definitivamente al cliente en el centro.

A nivel micro, cada abogado estará ubicado en un máximo de tres grupos o subgrupos de especialidad, clasificación que combinarán con la de aquellos sectores en los que tenga un mayor conocimiento. Para decidir en qué equipos se les situaban, Cuatrecasas ha realizado un profundo análisis de los asuntos y clientes con los que cada profesional ha trabajado en los últimos tres años, y así determinar cuáles son sus ámbitos de máximo expertise.

Elimina asimetrías entre oficinas

Junto con la mejor respuesta a los clientes, detallan desde la firma, esta nueva organización también plantea dos importantes beneficios internos. En primer lugar, permite ofrecer un mejor y más transparente plan de carrera a los profesionales, con la posibilidad de agregar experiencias internacionales y una mayor especialización. En segundo término, elimina las asimetrías que pueden existir entre las oficinas con las que cuenta el despacho en España. Para la elaboración de esta reestructuración, Cuatrecasas se ha basado en la experiencia de algunos bufetes norteamericanos y de la Europa continental, que ya han implementado revisiones internas en esta dirección.

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En la entrevista que concedió el pasado mes de julio en El Confidencial, Javier Fontcuberta, director general de Cuatrecasas, ya avanzó las líneas maestras de esta reestructuración. "No queremos un despacho que esté estrictamente pensado para sus profesionales, sino que su foco sean los clientes. Y eso nos va a suponer llevar a cabo una auténtica revolución en nuestras estructuras internas, pues queremos superar la territorialidad y, apoyándonos en la tecnología, seamos capaces de identificar dónde reside, en una organización de 2.000 personas, el mejor profesional para dar la mejor respuesta a los proyectos concretos en los que nuestros clientes están inmersos. Estamos convencidos en que eso solo se puede lograr elevándonos de una concepción territorial del despacho y adoptando un modelo de organización totalmente diferente".

Algunos de los nombres que se decidieron el pasado lunes y que componen la nueva estructura de Cuatrecasas son Javier Villasante, como coordinador de Corporate, o Antonio Carreño, en Litigación; Luis Pérez de Ayala, que coordinará Público con Félix Plasencia como adjunto; o Alfonso Iglesia, número uno del grupo de Arbitraje, con Alberto Fortún, adjunto. El grupo de Fiscal, por su parte, tendrá al frente a Ignacio Costa, con Fernando Remón de número dos, mientras que en Competencia se sitúa Pedro Marques, de la oficina de Portugal. El equipo de Financiero estará coordinado por Íñigo Rubio, mientras que Beatriz Causapé liderará el subgrupo con el mismo nombre.

Esta remodelación evidencia la apuesta de Fontcuberta por mantener las mejoras en materia de gestión impulsadas por Jorge Badía

Otros de los cargos elegidos el lunes fue el de Alejandro Payá, que liderará el subgrupo de Private Equity, con Javier Martí-Fluxá de adjunto. José Ramón Berecíbar asume la coordinación del MEVA y Corporate Governance, acompañado de Juan Aguayo como número dos. El subgrupo de Venture Capital tendrá al frente a Diana Rivera. Las oficinas de Madrid, Barcelona y Bilbao, por su parte, estarán dirigidas por Javier Martí-Fluxá, Héctor Bros y José Ramón Berecíbar.

Apuesta por socios venidos de otros despachos

Además de apostar por perfiles históricos, el despacho también ha decidido dar peso a socios llegados de otros bufetes en el corto plazo. Este es el caso de Javier Martí-Fluxa, socio más joven del despacho, a cargo desde ahora de la oficina de Madrid, que llegó a Cuatrecasas desde Latham & Watkins hace poco más de tres años. También viene de fuera José Ramón Berecibar, nuevo responsable de la oficina de País Vasco. Fichó por la firma en 2020 tras once años en Uría Menéndez y otros proyectos. Por su parte, Félix Plasencia asume galones en el organigrama tras recalar en Cuatrecasas en 2021 procedente de EY.

El propio Fontcuberta también hizo carrera fuera del despacho que hoy dirige. Pasó años en PwC. "Mi elección muestra que somos un bufete abierto y nada endogámico" señaló en una entrevista a El Confidencial en julio de 2023.

Con estas decisiones, Cuatrecasas, conocido por ser el bufete nacional más evolucionado en materia de gestión, da un paso más en su estrategia de maximizar la eficiencia en relación con su estructura y organización del trabajo. Una línea de trabajo a la que su ex-CEO Jorge Badía dio un fuerte impulso mientras estuvo al frente de la firma —antes de fallecer de forma inesperada en el verano de 2022—, y que Rafael Fontana y Javier Fontcuberta han apostado por mantener desde la dirección del bufete.