Abogados suplentes por 95 euros: cobrar por ir a juicio como sustituto

"¿Necesitas a un abogado sustituto? Contrata a uno en menos de cinco minutos por 95 euros". Este es el reclamo que lanza Legal Pigeon, una plataforma que busca poner solución a uno de los grandes problemas de los letrados que ejercen ante los tribunales: los desplazamientos continuos. "Cuando eres litigante, no es raro que un día tengas que estar Zaragoza y al siguiente en Cádiz, por ejemplo. A veces tienes que hacer cientos de kilómetros para una vista de 15 minutos", relata Oriol Miralbell, abogado de profesión y creador de la 'app'. En estos casos, lo habitual es asumir el viaje con el coste de tiempo y económico que ello supone. El objetivo de Legal Pigeon, por tanto, es conectar a profesionales de diferentes partes de España para que puedan encontrar compañeros que les reemplacen en esas vistas que, por carga de trabajo o por lejanía, ellos no pueden cubrir.

El precio del servicio está fijado por la plataforma, y es de 95 euros más IVA. De esa cifra, Legal Pigeon recibe una parte en concepto de comisión. El coste no varía en ningún caso, ni siquiera si el asunto es especialmente complejo. La única excepción es si el encargo se hace menos de 24 horas de antelación, en cuyo caso la tarifa asciende a 125 euros. "El hecho de que el pago sea automático y la cuantía sea cerrada relaja mucho. Antes había que hacer llamadas, negociar un precio... con esto hay más tranquilidad", asegura Miralbell.

Aunque está pensado para asuntos sencillos (audiencias previas o meros trámites presenciales), el fundador confiesa que los abogados ya acuden a esta solución para vistas de mayor complejidad. "Cada vez se encargan casos más difíciles porque nuestros usuarios saben que detrás hay buenos profesionales". Asimismo, la aplicación permite contratar varias sustituciones de vistas al mes y cerrar un precio acorde. "De este modo evitas tener que abonar vista tras vista cada vez que vayas a contratarlas", celebra la plataforma. Actualmente, la 'app' aglutina a más de 1.000 abogados registrados que atienden cerca de 150 vistas al día.

Suplentes en cinco minutos

El funcionamiento de la página es relativamente sencillo. El abogado que busca un suplente se registra, introduce los datos de la vista —es decir, el partido judicial, la fecha y el asunto—. La plataforma selecciona al letrado que considere más adecuado entre todos los que hay inscritos, atendiendo a la tipología del caso y la especialidad, y le informa del encargo al momento. En caso de que lo rechace, la plataforma se encarga de buscar a otro compañero entre la base de datos. En caso de aceptar, el pago se ejecuta y el sustituto recibe la información sobre el asunto, así como los datos de contacto del letrado al que está reemplazando.

Según indican en la web, no es necesario que el letrado comparta la documentación sobre la vista en el mismo momento en el que se solicita el encargo, sino que puede hacerlo en los días previos. Una vez haya atendido la vista encargada, el suplente tendrá que elaborar un informe en el que explique cómo se ha desarrollado, para que el usuario pueda saber cómo ha ido y llevar un seguimiento del procedimiento.

En el momento de inscribirse, por su parte, los letrados deben especificar los partidos judiciales que pueden cubrir y su ámbito de especialidad. Tras ello, desde Legal Pigeon realizan un proceso de validación que consiste en una entrevista tras la cual el abogado ya pasa a ser colaborador. Al comenzar con las vistas, Miralbell cuenta que la plataforma funciona con un sistema de valoración por el que el cliente puntúa al profesional. A mejor puntuación, mayor posibilidad de recibir encargos posteriores.

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Irene Cortés

De autónomos a grandes firmas

Sobre el tipo de clientes, el fundador de Legal Pigeon indica que el grueso son abogados autónomos que acuden a esta solución de manera puntual. No obstante, cada vez hay más presencia de despachos, tanto pequeños como medianos y grandes, 'big four' e, incluso, asesorías jurídicas de empresa. "Muchas compañías acuden a nosotros de forma recurrente para encontrar profesionales de confianza. Hay organizaciones de todos los sectores: inmobiliarias, energía, financiero, seguros...", enumera. En un principio, utilizaban este servicio para llegar a zonas que no podían atender, pero Miralbell cuenta que eso ha cambiado y acuden a este servicio para regiones donde sí tiene presencia. Una tendencia que, en su opinión, tiene una explicación puramente económica. "Es un servicio que les resulta muy barato", razona.

Frente a las acusaciones de algunos profesionales sobre el bajo coste del servicio y la precarización que puede generar este modelo en la profesión, Miralbell se muestra sorprendido. "Es lo contrario a lo que queremos conseguir. Es cierto que puede haber vistas más complejas y el precio acabe siendo bajo, pero hay abogados que en una mañana hacen cinco vistas y están obteniendo ingresos interesantes cada mes. Al final te da cierta estabilidad", subraya. En esta línea, asegura no haber recibido ninguna queja hasta ahora por parte de los colaboradores y subraya que su objetivo es promover la abogacía colaborativa.