Madrid desentierra el conflicto con el Gobierno por la estación de esquí que se niega a morir

Navacerrada, la estación de esquí por excelencia de los madrileños, se niega a morir. Hace dos años, todo apuntaba a que, tras el intento del Ministerio de Transición Ecológica de inhabilitar tres pistas de la estación, este enclave de nieve y ocio estaba destinado a echar el cierre. La concesión caducó después de 25 años de uso y el Gobierno central anunció que no la renovaría. La intención era evitar el uso desmesurado de estas tres pendientes segovianas –Telégrafo, Bosque y Escaparate–, ubicadas en un entorno natural como es la Sierra de Guadarrama. Al tratarse de un Parque Nacional, el gabinete de Teresa Ribera tomó la decisión de la discordia a través del Organismo Autónomo de Parques Nacionales (OAPN).

De aquella han pasado casi tres inviernos, y a falta de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) que acredite de quién es competencia, todo sigue como antes de la polémica. La disputa está entre el Ministerio y la Junta de Castilla y León, aunque gran parte de la estación se ubica, también, dentro de las fronteras de la región madrileña. La última puntilla sobre el tema la protagonizó el consejero de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, en una entrevista este lunes a Europa Press.

El consejero defendió abiertamente el uso y disfrute de la estación argumentando que, en su día, "fue la cuna del esquí olímpico". Esta tesis la defienden, también, fuentes de la consejería a este medio: "Desde un punto de vista deportivo, fue pionera en la práctica de los deportes de nieve en España, y en ella se forjaron los campeones olímpicos Paquito y Blanca Fernández Ochoa. Es histórica para el deporte madrileño". Novillo, además, aprovechó para lanzar una la pulla a la ministra Teresa Ribera: "A ver si rectifica".

Rectifique o no, la realidad es que todo apunta a que la estación abrirá sus puertas en las próximas semanas. A menos que los tribunales se pronuncien. "Hemos aprobado en el pleno que salga a concurso una nueva concesión", señala Pablo Jorge Herrero, alcalde de Navacerrada, a este diario. La alcaldía estaba en manos del PSOE hasta que los populares les arrebataran el Consistorio en las pasadas elecciones del 28-M. Esto supuso una piedra en el zapato para Ribera y un alivio para quienes querían mantener la estación.

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El primer edil del Partido Popular, en línea con el argumentario de los azules en la Comunidad de Madrid, mantiene su defensa a la puesta en marcha de la estación "como atractivo turístico" de la zona. Apostando, también, por mejorar las infraestructuras y arreglando los edificios en malas condiciones o vandalizados. "Queremos poner el Puerto en valor", continúa. El Gobierno autonómico hace hincapié en el factor económico, asegurando que en temporada de esquí se generan entre 300 y 500 puestos de trabajo en multitud de municipios de la sierra.

Fuentes de la consejería relatan a este diario que no se han mantenido conversaciones al respecto con el Ministerio de Transición Ecológica. Pero, ¿existe un estudio de impacto medioambiental que ampare la continuación de la estación? Desde el Ejecutivo autonómico aseguran que "están en fase previa".

Ahora que los consistorios involucrados -Navacerrada y Cercedilla- han aprobado volver a solicitar el uso de las pistas, queda establecer "las condiciones adecuadas" para culminar el proceso. Para cumplir con la normativa, la consejería asegura haber establecido una serie de condicionantes medioambientales. Si el año pasado todavía existía la duda de si sería el último para la estación de esquí, la experiencia hace presagiar que a pesar de los cambios en el clima, el handicap de la sequía y el jaleo de competencias, al final el enclave volverá a ponerse en funcionamiento.

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Nada de esto estaba ni en los planes de Teresa Ribera ni en el de los ecologistas. María Ángeles Nieto, portavoz de Ecologistas en Acción, considera que las últimas declaraciones de Novillo son "inaceptables" porque era inevitable que la concesión terminase; no es posible revertir la caducidad. "Es algo automático", explica, matizando también el mal aspecto de las infraestructuras. "Ni Segovia, ni Madrid, ni la Sierra de Guadarrama se merece tener la estación en esas condiciones".

Defiende, por otro lado, que las instalaciones no deberían estar funcionando porque están ocupando "un monte público". En mitad de la lucha jurídica, el Ministerio solicitó la paralización cautelar de la estación hasta que existiese una sentencia firme sobre las competencias, algo que les fue rechazado.

Desde la propia estación explican que todavía no se ha inaugurado la temporada por falta de nieve. Cabe recordar que debido a las condiciones climáticas, el período de esquí del invierno pasado fue el más corto de la historia de Navacerrada: apenas se pudo disfrutar durante 64 días.

Además, para fabricarla artificialmente, se tienen que producir un mínimo de precipitaciones para poner las máquinas en funcionamiento. Esto sí se dio en Sierra Nevada la pasada semana, cuando en mitad de la crisis por la sequía, la Junta de Andalucía optó por esta alternativa para no renunciar a la estación de esquí granaína. Pero, lejos de tratarse de una apuesta novedosa, la estación de Navacerrada es la que más nieve artificial fabrica.