Te presto mi nombre y me das tu sueldo: la red que estafaba dos veces a los 'sin papeles'

Imagine que va a trabajar todos los días, pero a fin de mes otra persona se lleva su sueldo. Eso es justo lo que hacía una red criminal, desarticulada por la Policía, que entregaba a migrantes llegados en patera una tarjeta de identidad falsificada con los datos de los cabecillas de la organización, que sí tenían los papeles en regla en España y que, como contraprestación, exigían el cobro de la nómina.

El modus operandi era siempre el mismo: la red clonaba el documento de identidad de los líderes, todos ellos subsaharianos, y se lo remitía con la foto cambiada a los sin papeles que llegaban en patera al sur peninsular. De esta manera, y sin levantar sospechas, los migrantes podían firmar contratos de trabajo, mientras los cabecillas de la trama se lucraban sin apenas esfuerzo y obtenían, además, las prestaciones propias de tener un contrato de trabajo, como pueden ser una hipotética prestación por desempleo o la cotización por jubilación.

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EFE

Según detallan fuentes policiales a El Confidencial, los líderes de la red eran las 7 personas que operaban desde Madrid y que vivían de explotar a otros 10 sin papeles, ya que no tenían ningún otro trabajo. Percibían prácticamente todo su sueldo y únicamente les dejaban una pequeña parte del mismo para que pudieran subsistir.

Bajo el radar

La actividad criminal del grupo era prácticamente indetectable. Pese a que con una misma identidad podría haber varias personas trabajando al mismo tiempo en distintos puntos de España, los sistemas antifraude de la Seguridad Social no fueron capaces de detectar el fraude y los agentes se percataron de la situación mientras realizaban otras pesquisas también relacionadas con mafias que explotan a migrantes.

Con una misma identidad podían trabajar varias personas al mismo tiempo en distintos puntos de España sin que la Administración lo detectase

En la operación, que ha liderado la Unidad Central de Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Policía Nacional desde Madrid, hay 17 detenidos: los 7 cabecillas y las 10 personas que utilizaron las identidades falsas y que fueron localizadas en las provincias de Murcia y Alicante. Todos fueron arrestados como presuntos responsables de los delitos de usurpación de estado civil, favorecimiento de la inmigración irregular y fraude a la Seguridad Social y pasaron a disposición judicial.

Como si fueran 'fantasmas'

Las mafias que explotan a los migrantes que llegan de manera irregular suelen ofrecer una especie de pack para entrar en España. A cambio de un pago importante, especialmente teniendo en cuenta la precariedad que padecen estas personas en sus países de origen, les prometen entrar en el pasaje de una patera y un trabajo una vez desembarquen en territorio nacional.

En la inmensa mayoría de los casos, los migrantes aceptan el trato y acaban cayendo en manos de las redes de explotación que, como en este caso, se aprovechan de ellos por partida doble. La red, además de quedarse con su sueldo, les convirtió en una especie de fantasmas a ojos de la Administración, ya que al trabajar con el nombre de otra persona tampoco podían acceder a prestaciones tan básicas como puede ser una visita médica en caso de enfermedad y, mucho menos, generar derechos que pudieran favorecer la regularización de su situación. Los investigadores no descartan que la trama pueda tener más ramificaciones.