Malestar en el PP de Madrid por el fichaje de Toni Cantó: "¿Qué aporta?"

El fichaje de Toni Cantó para la candidatura de Isabel Díaz Ayuso, confirmado por la dirección nacional del PP y a la espera de conocer el puesto asignado en la lista, ha levantado ampollas en el partido madrileño, muchos de sus cargos y alcaldes de distintos municipios, que dudan los réditos electorales que traerá la operación. “Lo que funciona es Ayuso. No sabemos qué nos va a aportar”, coinciden algunos ediles consultados por este diario.

Cuando el miércoles se conoció la negociación entre el PP y el exdiputado de Ciudadanos en la Comunidad Valenciana, pasaban las siete de la tarde. Mientras en la dirección nacional decían que las conversaciones avanzaban, en el equipo de Ayuso se limitaban a especificar que la presidenta no había mantenido ninguna reunión con Cantó “ni en la sede del Gobierno regional ni en ningún sitio”. Evitaron confirmar la noticia y ya unas horas después, el PP madrileño le daba la bienvenida en un tuit y agradecía “el paso que daba” para defender “la libertad frente al socialismo”. La presidenta, sin embargo, solo se hizo eco del mensaje publicado por el exdirigente naranja en su red social.

“Nadie en el partido entiende bien este movimiento”, insisten regidores de municipios de la zona norte de la comunidad. “Ya sabemos que incorporar a gente de fuera casi siempre no es un éxito y menos cuando nuestro aval en estas elecciones es nuestra candidata en sí y el discurso que mantiene. Es lo que funciona”, insisten también en el PP de Madrid. A eso suman su trayectoria política en pocos años (un partido local, UPYD y Ciudadanos) y los fuertes ataques que durante la etapa naranja lanzó contra el propio PP, en especial las acusaciones de partido corrupto que tanto impulsó desde el Congreso de los Diputados. “Lo de la hemeroteca nos va a hacer polvo”, comentan.

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El malestar en los alcaldes se extendió en vista de cómo se había gestionado todo. La mayoría coincide en que se trata de “hacer daño a Ciudadanos aunque no obtengan ningún rédito electoral” y señalan a Teodoro García Egea, secretario general del partido, como el artífice de todo. Es el número dos de Casado el que pilota desde hace semanas la opa hostil a Ciudadanos con la ayuda del exsecretario de Organización de Albert Rivera, Fran Hervías.

En este caso, García Egea tenía interlocución directa con Cantó. De hecho, los contactos comenzaron a raíz de la moción de censura de Murcia, cuando el número dos de Casado quiso cerciorarse de que las relaciones entre su partido y Ciudadanos estaban a salvo en la Diputación de Alicante. Ahí empezó una relación que se ha ido consolidando. El exdirigente naranja explicó en varias entrevistas que el equipo de Miguel Ángel Rodríguez, todopoderoso jefe de gabinete de Ayuso, solicitó una reunión para sondear la posibilidad de materializar una colaboración. Se produjeron contactos con Ayuso y Casado. Pero, al final, todo lo cerró Génova.

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Que había un malestar latente en la Puerta del Sol quedó claro a lo largo de la tarde del miércoles ante el silencio que rodeaba a la presidenta. La cuestión es que el malestar se ha convertido en desconfianza dentro del PP madrileño y de muchos de sus representantes en las instituciones, que insisten en que el principal valor de Ayuso en estas elecciones es ella misma y que interferencias de este tipo desde Génova o fichajes estrella podrían perjudicarla.

Entre las idas y venidas queda por resolver el puesto en el que irá Cantó. Fuentes de su entorno aseguraron a este diario que en la negociación inicial contaba con ir en uno de los primeros números. Pero el mismo miércoles por la mañana, en lo que cuadros del PP de Madrid ven ahora como un “marcaje de terreno”, Ayuso se anticipó asegurando que ella quería estar acompañada en los primeros puestos por sus consejeros, la secretaria general del PP madrileño, Ana Camins, y el director de su campaña y portavoz del grupo parlamentario, Alfonso Serrano. “Lo que funciona no hace falta cambiarlo”, llegó a decir. Este viernes Sol confirmó que el número dos será Enrique Ruiz Escudero, responsable de Sanidad.

Ese recado, en todo caso, suponía echar para atrás a Cantó en la lista. Está por ver cómo queda la candidatura final. Ayuso tiene ahora siete consejeros (Eugenia Carballedo, Paloma Martín, Enrique López, Javier Fernández-Lasquetty, David Pérez, Escudero y Enrique Ossorio).

A pesar del riesgo que siempre encarna una convocatoria electoral, los cuadros del PP madrileños asumen con cierta tranquilidad el adelanto electoral de Ayuso, convencidos de que la presidenta regional se ha consolidado y tiene muchas posibilidades de sacar un resultado muy significativo. Como publicó este diario, existen distintas opiniones sobre si podrán frenar a Vox y su pretensión de entrar al futuro Gobierno y, por eso, los populares están inmersos en obtener una mayoría clarísima que no les permita siquiera plantearlo.

Más allá de eso, el principal temor es descarrilar en algún momento durante la campaña, como ha sucedido en ocasiones recientes. Distintos alcaldes de la comunidad consideran que debe ser la Puerta del Sol quien gestione la planificación de las próximas semanas y que Ayuso tenga todo el protagonismo posible con el discurso mantenido hasta ahora en la pandemia. No ven con buenos ojos la “incursión” de Génova y consideran arriesgadas algunas operaciones en el marco de la reunificación del centro derecha y la absorción de Ciudadanos. Son partidarios de no hacer movimientos en falso y, sobre todo, no dejar que influyan en la carrera electoral.