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El Retiro permanecerá cerrado y se plantea restringir su uso tras la muerte de un niño
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El Retiro permanecerá cerrado y se plantea restringir su uso tras la muerte de un niño

El árbol que cayó el pasado sábado sobre un niño de cuatro años, causándole la muerte, se encontraba en "buen estado fitosanitario y no tenía evidencia de riesgo", según el ayuntamiento

Foto: Precinto policial en el parque del Retiro de Madrid el pasado sábado. (EFE)
Precinto policial en el parque del Retiro de Madrid el pasado sábado. (EFE)

El Retiro permanecerá cerrado hasta nuevo aviso para revisar la situación del arbolado y retirar los 13 árboles que cayeron durante el fin de semana, uno de ellos con consecuencias mortales para un niño de cuatro años a quien se le cayó un pino encima cuando paseaba con su padre el pasado sábado a mediodía. "No se podía haber hecho más", según ha resaltado este lunes la edil de Medio Ambiente, Inés Sabanés, tras explicar las actuaciones de prevención y auditoría de todos los ejemplares del parque realizadas durante los días previos y la decisión de cerrar el parque, a pesar de que el protocolo no lo contemplaba en la situación meteorológica del momento, más allá del balizado de zonas de riesgo. De hecho, se estaba desalojando el parque, un proceso que en circunstancias normales suele extenderse durante una hora, cuando la caída de un árbol acabó con la muerte del menor, natural de Colmenar Viejo. La noche previa, con el parque cerrado, ya habían caído otros dos árboles.

La edil se ha mostrado dispuesta a revisar el plan director sobre arbolado, aprobado en 2016, y según el cual cuando se produjo el luctuoso suceso no se alcanzaba la alerta roja que obliga al cierre del parque. Sabanés también ha dejado la puerta abierta a intensificar las restricciones de uso, como los maratones, que gradualmente se irán limitando para que no se inicien ni finalicen en el Retiro, junto al desarrollo de otras medidas para el cuidado del parque.

Las inclemencias meteorológicas sufridas durante el presente mes de marzo han afectado de forma importante al arbolado de las calles y zonas verdes de la ciudad. El agua acumulada ha reblandecido el suelo, lo que unido a las fuertes rachas de viento ha producido la caída y vuelco de árboles por toda la ciudad, afectando especialmente a las coníferas, y más concretamente al pino piñonero, el árbol que cayó el pasado sábado provocando la muerte del menor, según han informado desde el Ayuntamiento de Madrid. Desde el viernes por la noche se han producido 357 incidencias, causando la caída o el tronchado de 290 árboles y 67 ramas. En parques históricos, singulares y forestales, los árboles caídos fueron 38 (13 en el Retiro y 25 en el resto de parques), cinco árboles fracturados y 17 ramas grandes caídas. En el resto de la ciudad (calles y zonas verdes), el balance es de 247 árboles y 50 ramas caídas, además de varios árboles torcidos e inclinados.

El pino caído había sido revisado

El árbol caído era un pino de 53 años y 15 metros plantado en zona terriza, no en pradera, en la zona denominada El Reservado, y cayó en el vial principal de entrada desde la calle Ibiza a la plaza del General Martínez Campos, una zona que se mantiene abierta durante los desalojos por ser uno de los ejes de evacuación. El pino había sido inspeccionado con anterioridad, como han asegurado desde la Dirección General de Aguas y Zonas Verdes, presentando "buen estado fitosanitario y no tenía evidencia de riesgo". El accidente se produjo, según concluyen estas mismas fuentes, "a consecuencia del viento y de la tierra mojada", por lo que el árbol se descompensó por el peso y cayó.

Desde el viernes por la noche se han producido 357 incidencias, causando la caída o el tronchado de 290 árboles y 67 ramas


La primera evaluación de riesgo de este ejemplar se realizó en 2014, se comprobó que estaba sano y "se establecieron revisiones periódicas, además de podas que se realizaron en 2014 y 2017 para rebajar el peso de la copa y evitar así el riesgo que presentan los pinos". También se realizaron, según añaden, "revisiones dentro del Plan Extraordinario de Arbolado del Retiro en 2016 y 2017, y la semana pasada durante los dos días que estuvo cerrado el Retiro para estudiar la afección del arbolado". En esta última revisión no se encontraron indicios de movimiento ni en las ramas ni en la base del árbol.

El ayuntamiento también ha informado que creará un nuevo servicio de actuaciones no programadas e inmediatas en materia de zonas verdes y arbolado municipal, con los Bomberos y Emergencias Madrid, así como la revisión de las zonas que por incidentes necesiten más atención en coordinación de los técnicos municipales.

El Retiro permanecerá cerrado hasta nuevo aviso para revisar la situación del arbolado y retirar los 13 árboles que cayeron durante el fin de semana, uno de ellos con consecuencias mortales para un niño de cuatro años a quien se le cayó un pino encima cuando paseaba con su padre el pasado sábado a mediodía. "No se podía haber hecho más", según ha resaltado este lunes la edil de Medio Ambiente, Inés Sabanés, tras explicar las actuaciones de prevención y auditoría de todos los ejemplares del parque realizadas durante los días previos y la decisión de cerrar el parque, a pesar de que el protocolo no lo contemplaba en la situación meteorológica del momento, más allá del balizado de zonas de riesgo. De hecho, se estaba desalojando el parque, un proceso que en circunstancias normales suele extenderse durante una hora, cuando la caída de un árbol acabó con la muerte del menor, natural de Colmenar Viejo. La noche previa, con el parque cerrado, ya habían caído otros dos árboles.

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