Rajoy presume de la experiencia del PP frente a las ocurrencias de C's y Podemos

Los barones y lideresas del PP han cumplido con la ceremonia de la foto de la unidad junto a Mariano Rajoy en el primer acto conjunto de precampaña ante los comicios autonómicos y locales de mayo. Con matices de discurso y vídeos de propaganda dispersos (José Antonio Monago con su rap), todos han dejado entrever sus miedos a los nuevos partidos mientas el presidente del Gobierno les instaba a dar la batalla y no olvidarse de que detrás de “los demagogos y los populistas” (Ciudadanos y Podemos) hay “seres humanos normales, honrados, trabajadores”. En resumen, que recuperen a sus votantes.

Rajoy ha dado su primer mitin de precampaña sin moverse un ápice del guión oficial con el que aspira a que su partido salve los muebles (el grueso del poder autonómico y municipal) en las elecciones del mes que viene: el de la recuperación económica y la creación de empleo para todos en los próximos cuatro años. Sólo se ha salido de ese discurso para recordar los principios y valores tradicionales del PP (España, nación y libertad) que esgrimen los veteranos como Esperanza Aguirre, Luisa Fernanda Rudi, Pedro Sanz o Juan Vicente Herrera.

El jefe del Ejecutivo ha inscrito su llamamiento a la defensa de la unidad de España, de la Constitución y de la idea de nación como conjunto de ciudadanos libres e iguales dentro de su argumentario general sobre la recuperación económica. Para Rajoy son realidades como la de que nuestro país es “una gran nación” y tiene una democracia avanzada que contrastra con el afán por el pesimismo de todo tipo que cultivan sus adversarios.

Por lo demás, el presidente del PP ha vuelto a insistir en que las instituciones regionales y locales deben estar para el mismo objetivo que el Ejecutivo central (consolidar la salida de la crisis y crear empleo) y que los candidatos populares deben evitar que caigan en manos de las nuevas formaciones emergentes porque supondría un paso atrás en la recuperación. “Gobernar no es cosa de ocurrencias o de tertulianos”, ha dicho en una de sus referencias más celebradas a los políticos “aficionados” o de propuestas “frívolas” como la de suprimir medios de transporte (por la idea de Albert Rivera de parar el desarrollo del AVE).

Después de que todos los presidentes autonómicos o aspirantes a serlo por primera vez que concurren a los comicios presumieran de principios, de partido y de experiencia para ganar en tiempos difíciles, Rajoy les ha recordado que “todos juntos deben ir en la misma dirección” para garantizar la prosperidad y la esperanza en el futuro que los españoles empiezan a recuperar.

En el clásico recurso al voto del miedo, el presidente del Gobierno ha reiterado que el PP tiene que presentarse ante los ciudadanos como referente de estabilidad política y económica, de seguridad e impulsor de la creación de empleo (medio millón de empleos cada año hasta 2019). Frente a esa oferta, Rajoy sólo ve la amenaza de volver a las políticas socialistas que llevaron a España al borde de la quiebra en la anterior legislatura o los “experimentos” o “aventuras” que esbozan los movimientos emergentes.

Para el jefe del Ejecutivo el avance de Podemos o Ciudadanos es un peligro letal para la recuperación económica. Pero a sus candidatos les recordó que sus votantes actuales o potenciales no deben ser despreciados (en parte son indignados con el PP) porque detrás de los “demagogos y populistas de todo signo” hay “gente honrada y trabajadora” que no lo es, que quiere a España y lo mismo que los “seres humanos normales”: trabajo y estabilidad.