El Síndic de Greuges avala la suspensión de las elecciones catalanas por el coronavirus

El Síndic de Greuges ha avalado hoy que las elecciones catalanas fijadas para el 14-F se suspendan alegando fuerza mayor a causa del coronavirus, ya que las propias elecciones facilitarían “una mayor difusión de la enfermedad” y porque podría haber hasta 216.000 catalanes, en el escenario considerado como más grave, que no podrían votar al estar o contagiados por el coronavirus o podrían haber estado en contacto con un contagiado. Rafael Ribó, el síndic, ha dado una rueda de prensa para presentar los resultados de sus trabajos. El informe se ha trasladado al Parlament y a la Generalitat.

El jurista Luis López Guerra ha reconocido que el aplazamiento se trata de una “medida grave”, que ha de estar suficientemente justificada. “Los ejemplos del caso gallego y del caso vasco son ilustrativos”, según este especialista legal. Según López Guerra, “la decisión de la suspensión cuenta con suficiente justificación”, pero lo ha calificado de “posibilidad no excluible”.

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Ribó ha asegurado que el Síndic recomienda "un pacto entre la Generalitat y el conjunto de candidaturas que concurren en estas elecciones". "Tiene que haber un firme pacto político y la renuncia de instrumentalizar esta decisión”, ha sentenciado

En opinión del Síndic de Greuges, “hay que garantizar tanto el derecho a voto como el derecho a la salud, y todas las personas con derecho de sufragio activo han de poder votar y no han de poner en riesgo la salud pública”.

“Una medida imprescindible sería ampliar el plazo para el voto postal y un aplazamiento de las elecciones requiere justificarlo con una causa de fuerza mayor”, ha defendido hoy Rafael Ribó.

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La doctora Magda Campins ha reconocido que en julio u octubre “también habría miles de personas que no podrían votar”, pero en palabras de Ribó “se trata de conjugar las dos curvas, para conjugar una situación de descenso epidemiológica con el desarrollo de todas las medidas electorales que ensanchen el campo del voto no presencial”.

La epidemióloga Magda Campins ha argumentado que los dos escenarios más plausibles son que "haya 190.000 personas que no podrían votar de manera presencial o un escenario más grave en el que el impacto de esta tercera oleada sería superior, con afectación superior: un 10% de casos". En este caso, el número es de más de 216.000 personas. Estos son los dos escenarios que consideramos más probable. Ribó no ha querido pronunciarse sobre si había que esperar a que hubiese inmunidad de rebaño para votar en las elecciones catalanas.

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Hay otros dos escenarios con una afectación inferior, por si estuviésemos en una fase de descenso moderado, pero se cree que estos no son los más probables. Para Magda Campins, “se trata de garantizar el derecho universal al voto”.

Con este informe, todo apunta a que la Generalitat propondrá a los grupos parlamentarios este viernes que se suspendan las elecciones. Pero los partidos catalanes están divididos.