La afición deportiva de Zaragoza revive con las chicas del baloncesto

Hacía 19 años de ese 2004 en el que los zaragozanos se echaron por última vez a la calle para celebrar un triunfo deportivo: la Supercopa de fútbol. Este domingo, con el Real Zaragoza en segunda desde hace más de una década, la rúa la protagonizaban las chicas del baloncesto tras ganar la Copa de la Reina ante 11.000 aficionados, el máximo aforo alcanzado en un partido femenino de este juego. Y es que este Casademont es un fenómeno que igual llena el Pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza, como en los mejores tiempos del CAI de básquet de la ACB o los conciertos de despedida de Serrat, que dispara las audiencias de la tele autonómica hasta el 26%, esa misma tarde de domingo.

Ahora, tras ser agasajadas por las primeras autoridades y que el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza las haya designado pregoneras de las próximas fiestas del Pilar, las jugadoras están viviendo intensamente este momento. Y, en especial, el acompañamiento de la afición. “Esta copa es de todos. Nos hemos sentido muy apoyadas, cuidadas y respaldadas. Solo sentimos alegría -decía Vega Gimeno, la capitana-. Pero esto no es casualidad, sino la consecuencia del trabajo que venimos realizando toda la temporada; es fruto del empeño, del esfuerzo y de la ilusión con la que trabajamos todos los días”.

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Es el momento de disfrutar después de una competición de alto voltaje celebrada en cuatro días en Zaragoza. En el primer partido, jugado el jueves frente al Araski, las zaragozanas fueron claramente superiores. En las semifinales del sábado, el Casademont tenía el reto de vencer a las líderes de la liga, el Valencia Basket, lo que logró tras venirse arriba en el último cuarto. Y ante la final, la expectación era máxima: enfrente tenían al Perfumerías Salamanca, favoritas de la competición. El partido estaba muy igualado hasta que, en la segunda parte, el árbitro expulsó a la capitana del equipo aragonés y entró a jugar la afición, que rugió y aupó al equipo como en sus mejores tiempos.

Ese triunfo las ha llevado dos días por las calles y las instituciones de Zaragoza. La noche del domingo, incluso compartiendo calzada en el Paseo de la Independencia con las procesiones de Semana Santa.

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Es un éxito que se ha fraguado en apenas tres temporadas hasta llegar este febrero a los cuartos de la Eurocopa y ganar ahora la Copa de la Reina, lo que da derecho a jugar de nuevo en la Euroliga y en los playoff de la española.

La gran afición de Zaragoza al baloncesto

Zaragoza siempre ha tenido una gran afición al baloncesto y un equipo del femenino en buenos niveles. Cuando era Banco Zaragozano, hace más de tres décadas, ganó una Copa de la Reina. Más tarde, como Mann Filter, quedó finalista ante el Valencia. Pero en los últimos tiempos, el equipo que jugaba en mayor nivel, el Mann Filter Casablanca, estaba a punto de desaparecer.

Ante esa coyuntura respondió Reynaldo Benito, antiguo jugador de baloncesto y presidente del Casademont masculino, tras haber creado la fundación Basket Zaragoza 2002 para que siempre haya equipos de primera en la ciudad. En su hoja de ruta estaba construir un equipo femenino; la crisis del Mann Filter Casablanca precipitó la decisión. Adquirieron la ficha en 2019 y jugaron una primera liga con un equipo casi improvisado. El segundo año, se incorporaron jugadoras como Vega Gimeno; trabajaron duro y ya se clasificaron para la Copa de la Reina y la competición europea. Y este año, además de los éxitos señalados, algunas jornadas han liderado la liga. “Tenemos un gran equipo y un gran entrenador, que se han volcado", dijo Reynaldo Benito. "Para nosotros ha sido un gran éxito que lograran pronto los tres objetivos de estar en la Copa de la Reina, en Europa y en los playoff, y que ahora hayan ganado la Copa. Nos ha hecho a todos muy felices hacer feliz a tanta gente”, añadió.

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Benito explica que tratan igual al equipo masculino que al femenino, que hay gran complicidad entre ellos y que es pilar fundamental de la fundación trabajar la cantera y las escuelas. “Tenemos jugadores en la NBA, la ACB o la Euroliga, y visten la camiseta roja en 15 colegios de Zaragoza. ¿Los presupuestos? Pues muy justos; los vamos salvando con ampliaciones; procuramos ser sostenibles y lograr la mayor: que siga el baloncesto de primer nivel en Zaragoza. Éxitos como este refuerzan nuestra apuesta”.

La implicación de jugadoras o técnicos con la afición y las bases es máxima. Van a los colegios y, cada día de partido, les cuesta salir de la cancha más de media hora, porque les encanta atender a los niños.

Una alegría que la gran afición deportiva de la ciudad no encuentra en el fútbol, atrancado en Segunda y con la reforma del campo en continuos entredichos.

La apuesta de Aragón Televisión

En el devenir del Casademont femenino ha sido clave el acompañamiento de Aragón TV, que desde hace dos temporadas emite los partidos en abierto y hace seguimiento del equipo por delante del fútbol. Por un lado, ha contribuido a impulsar la afición, pasando de 400 a 4.000 espectadores en la cancha (el Príncipe Felipe es de los pocos estadios con tanta afluencia de público para un partido femenino), y por otro, ganando audiencias.

Quienes tienen ese gancho son un grupo de jugadoras, especialmente compacto y luchador que está teniendo gran visibilidad

María de Miguel, directora de Medios de la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión, explica que el seguimiento del Casademont femenino fue una apuesta que incluyó la compra de los derechos de la liga Endesa para emitirlos regularmente; en su caso, los domingos por la mañana. Fue un empeño en el se involucró especialmente la directora de contenidos y programas, Sara Martín. Y junto a esa decisión, la de incorporar en la agenda de la redacción de deportes los entrenamientos, viajes y partidos de las jugadoras al mismo nivel que los miembros de los equipos masculinos de fútbol y baloncesto.

Así, el informativo ha abierto a menudo la sección de deportes con el baloncesto femenino y sus jugadoras han adquirido gran notoriedad. La evolución de las audiencias es elocuente: Los ochos encuentros ofrecidos en 2021 promediaron un 6,4% y en 2023, una media del 15%, para alcanzar en la final de la Copa del último domingo un 26%, lo más visto del día y la retrasmisión de baloncesto con más telespectadores de la historia de la cadena.

Un equipo forjado en tres años

Quienes tienen ese gancho son un grupo de jugadoras, especialmente compacto y luchador que está teniendo gran visibilidad y une al éxito deportivo el reconocimiento social, explican desde el club. Es un grupo que ha ido evolucionando.

En la primera temporada, la plantilla contó con jugadoras como Julie Vanloo, Aina Ayuso, Laura Nicholls, Taylor Wurtz, Haley Gorecki o Markeisha Gatling, además de la zaragozana Zoe Hernández. Todas ellas estuvieron dirigidas por Carlos Iglesias y el equipo logró mantener la plaza en Liga Femenina en su primer año de trayectoria. Antes de finalizar el curso también llegó Anna Cruz.

Markeisha Gatling terminaría siendo fundamental para conquistar la Copa de la Reina en su segunda participación

La siguiente temporada 2021-2022 asumió la dirección del equipo Carlos Cantero; venía de Lugo y trajo a Vega Gimeno y Merritt Hempe. La plantilla se renovó por completo: sólo Aminata Sangaré, Anna Cruz y Zoe Hernández continuaban de la campaña anterior. A ellas se unía Lara González (desde el IDK Euskotren), y las portuguesas María Bettencourt y María Kostourkova, junto a Sierra Calhoun y Ani Calvo. La temporada ya fue espectacular para ser la segunda: cuartos de final de la Copa de la Reina, playoff por el título de liga y plaza en la Eurocup Women.

Y esta temporada 2022-2023 ha sido la consolidación. La plantilla conservaba el núcleo fuerte con Cantero, Vega, Lara y Merritt, a las que se unía un bloque de jugadoras nacionales: Mariona Ortiz, Carmen Grande, Helena Oma, Gracia Alonso de Armiño o la apuesta por Davinia Ángel. Además de la llegada de Serena-Lynn Geldof. Hubo que sustituir a Merritt Hempe; llegaron Zelnyte y Aishah Sutherland tras la lesión de Vega. Y al final, regresó Markeisha Gatling que terminaría siendo fundamental para conquistar la Copa de la Reina en su segunda participación y tercer año de existencia, además de una notabilísima trayectoria en la Eurocup Women, alcanzando los cuartos de final y quedándose a solo siete puntos de llegar a semifinales.

"Se lo dedico a toda Zaragoza", proclamó Carlos Cantero tras ganar la Copa, agradeciendo el apoyo recibido en los últimos días. "La Copa es histórica, una de las mejores que yo recuerdo", sentenció, instantes de enumerar los hitos más icónicos: "El Príncipe Felipe parecía Belgrado, el pabellón ha estado increíble y con los pelos de punta, a veces sordo en el banquillo, pero es tremendo el ambiente que ha habido". Reconoció así que, aunque "faltaba por celebrar títulos en Zaragoza muchos años", este ya lo es para "toda la ciudad".