Moreno exige por carta a Sánchez que "cese el acoso" contra el sector de la fresa de Huelva

Juanma Moreno eleva el tono en el conflicto de la fresa y reclama a Pedro Sánchez y su Gobierno que "cese el acoso" al sector de los frutos rojos de Huelva. El presidente andaluz ha remitido una carta al jefe del Ejecutivo en la que acusa al propio Sánchez y a la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, de ser "cómplices" de la campaña de boicot contra el sector que ha puesto en marcha una ONG en Alemania. La misiva oficializa una crítica habitual del malagueño, que el martes, en un acto del PP, avanzó que será beligerante con el Gobierno central: "No le voy a pasar ni una".

Según Moreno, la actitud de Sánchez y Ribera ha provocado "una considerable indignación y una sensación de indefensión" en la comunidad ante quienes persiguen "la ruina de nuestros agricultores". Esa es la tesis del Gobierno andaluz, que hace una defensa a ultranza del sector primario andaluz. En la carta, Moreno recuerda que el 98% de la producción de fresa del país sale de la provincia onubense, que, además, aporta el 30% de la producción europea. También alude a los 160.000 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, que arroja este sector, que suma exportaciones por valor de más de 1.300 millones de euros y supone el 11,35% del PIB onubense.

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"Los agricultores onubenses han conseguido enormes avances en la transformación de sus explotaciones en cultivos sostenibles, con el consiguiente ahorro de agua", apunta el presidente andaluz en el escrito, que admite la preocupación de cualquier campaña de boicot contra el sector. Y echa en falta la colaboración del Gobierno central como "aliado para poner freno a los bulos y devolver a nuestros productos el prestigio que legítimamente se han ganado". "Ninguna campaña electoral puede justificar que el Gobierno dé amparo y difusión a una sucesión de falsedades", zanja el jefe del Ejecutivo andaluz.

Moreno insiste, en el cierre de la misiva, en abrir un "proceso de colaboración" para hacer compatible la actividad económica del sector de la fresa con la conservación de Doñana "en cuya preservación estamos firmemente comprometidos". El presidente de la Junta no hace mención alguna al origen de toda esta polémica, la proposición de ley de reordenación de los cultivos del entorno del parque natural que impulsan PP y Vox en el Parlamento. Esa norma es una revisión del Plan de Ordenación de la Corona Norte Forestal o Plan de la Fresa, que en 2014 regularizó 9.400 hectáreas. La nueva ley abre la puerta a recalificar, con condiciones, hasta 750 hectáreas que hoy por hoy no tienen derechos de riego, aunque hay que tener en cuenta que la concesión de esos derechos depende de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica.

Moreno no alude en su carta a la ley de regadíos del entorno de Doñana, que es el origen de la polémica

La carta de Moreno llega a la Moncloa el mismo día que Yolanda Díaz desembarca en Doñana con su nuevo portavoz, el eurodiputado ecologista Ernest Urtasun. Allí visitará el Centro Ornitológico Francisco Bernis, en la aldea de El Rocío. Después se reunirá con Ecologistas en Acción, WWF y SEO Birdlife, así como con "asociaciones de agricultores afectados por la proposición de ley de regadíos" del entorno de Doñana. Hay que tener en cuenta que hay disparidad entre los regantes, ya que los de Almonte están en contra de la norma, pero hay otras entidades que prácticamente han participado en la tramitación de la ley.

Es precisamente esa norma la que ha generado la polémica. Ya en la anterior legislatura, la Comisión Europea alertó por los efectos negativos que esta ley tendría sobre el cumplimiento de la sentencia del TJUE que condenó a España por la gestión del agua en Doñana. Entonces, grandes supermercados alemanes llegaron a pedir al Gobierno andaluz que retirasen el texto, un punto al que no han llegado en esta ocasión. Lo que sí ha ocurrido es que una ONG ha puesto en marcha una recogida de firmas para que los distribuidores alemanes dejen de comprar fresa en Huelva. La respuesta de Aldi, por ejemplo, consistió en dejar claro que las fresas que importa desde Huelva son sostenibles.

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Para evitar este tipo de campañas, la consejera de Agricultura de la Junta, Carmen Crespo, ha iniciado conversaciones con "plataformas logísticas y de distribución" alemanas para dejarles claro que el uso del agua que hacen los freseros de Huelva es "racional", y el impacto económico de un boicot sería muy negativo. "Intentaremos con todas nuestras armas frenar esta campaña de descrédito para que puedan seguir siendo el porvenir de tantas familias", ha dicho este miércoles el portavoz de la Junta y consejero de Sostenibilidad, Ramón Fernández-Pacheco.

Lo que queda claro después de la carta de Moreno y la visita de Yolanda Díaz es que la polémica sobre los regadíos de Doñana alimentará la campaña de las elecciones generales del próximo 23 de julio. "El problema es que el Gobierno de España ha entendido que el campo andaluz debe ser su principal campo de batalla", ha añadido Fernández Pacheco. Vox, por su parte, ha propuesto la reprobación por parte del Parlamento andaluz del propio Sánchez y la ministra Teresa Ribera. "No es normal que parlamentarios extranjeros vengan a fiscalizar a los agricultores andaluces", ha dicho Manuel Gavira, portavoz del partido en la Cámara regional.