El violador de Málaga, pendiente de cumplir el tercer grado por su "intachable conducta"
El profesor de gimnasia fue condenado a 271 años de prisión por 24 violaciones e intentos de agresión sexual a alumnas, cometidos entre 1997 y 2002
Juan Carlos G. R., el profesor de gimnasia que fue condenado en Málaga a 271 años de prisión por cometer 24 delitos sexuales contra mujeres (13 violaciones y 11 intentos de agresión sexual) está pendiente de que se le designe centro de destino desde el que cumplir el tercer grado que le ha sido concedido, lo que podría ocurrir en los próximos días. Así lo ha decidido el titular del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 5 de Andalucía, con sede en Granada —donde permanece encarcelado— en dos autos remitidos en los que ha justificado por qué deberían conceder el régimen de semilibertad al condenado, en contra de la resolución de Instituciones Penitenciarias que el pasado mes de mayo acordó su continuidad en segundo grado.
El conocido como 'violador múltiple' de Málaga, que continúa de momento interno en la cárcel de Albolote (Granada) tras haber cumplido 17 años de condena, disfrutará del régimen de tercer grado en un Centro de Inserción Social pendiente de designar.
A través de un auto, al que ha tenido acceso Efe, el juzgado revoca esa resolución y acuerda la progresión de Juan Carlos G.R. a tercer grado de tratamiento, en la modalidad que estime oportuna la junta de tratamiento y teniendo en cuenta las circunstancias personales, familiares y laborales del penado, con los beneficios que ello comporta.
Para tomar esta decisión, el juzgado valora la trayectoria penitenciaria del interno y entiende que "nada se opone por ahora" a la pretendida progresión a tercer grado, teniendo en cuenta que ha "extinguido sobradamente" las tres cuartas partes de su condena y su "intachable conducta" con participación en numerosas actividades de "manera destacada y con calificación de excelente".
El auto recoge que el penado cuenta con apoyo familiar, ha hecho "buen uso" de numerosos permisos de salida, carece de adicciones conocidas con significación criminológica, presenta estabilidad y madurez personal y una actitud favorable al cambio.
También añade que ha hecho de forma correcta el programa establecido para la prevención y control de la agresión sexual, en el cual ha obtenido una favorable calificación, asume plenamente su responsabilidad delictiva, y muestra arrepentimiento y empatía con la víctimas.
El tercer grado penitenciario supone la capacitación de los internos, por sus circunstancias personales y penitenciarias, para llevar a cabo "un régimen de vida en semilibertad".
Juan Carlos G. R., el profesor de gimnasia que fue condenado en Málaga a 271 años de prisión por cometer 24 delitos sexuales contra mujeres (13 violaciones y 11 intentos de agresión sexual) está pendiente de que se le designe centro de destino desde el que cumplir el tercer grado que le ha sido concedido, lo que podría ocurrir en los próximos días. Así lo ha decidido el titular del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 5 de Andalucía, con sede en Granada —donde permanece encarcelado— en dos autos remitidos en los que ha justificado por qué deberían conceder el régimen de semilibertad al condenado, en contra de la resolución de Instituciones Penitenciarias que el pasado mes de mayo acordó su continuidad en segundo grado.