El PSOE pasa ahora de puntillas sobre las revelaciones de Correa y Gürtel

No hacía ni media hora que Francisco Correa había admitido ante el juez del caso Gürtel que Génova era "como su casa", pero al portavoz de la gestora del PSOE, Mario Jiménez, le tocó ser extremadamente prudente y casi pasar de puntillas sobre el juicio y las revelaciones del cabecilla de la trama. Casi no se le reconocía. Fue especialmente llamativo en el caso de Jiménez, el más duro azote del PP en el Parlamento andaluz, al que se le han podido oír durísimas e implacables acusaciones contra los populares por sus casos de corrupción. El también portavoz parlamentario pidió semanas atrás, como insinuó también la propia Susana Díaz, un paso atrás de Mariano Rajoy para que se pudiera hablar de abstención en las filas socialistas. Ahora, el registro es totalmente diferente.

"Todos hemos hecho pronunciamientos a lo largo de estos meses con respecto a lo que debería ocurrir", admitió Jiménez, conocedor de que la hemeroteca delata cuál ha sido su posición hasta ahora. "Defendimos la necesidad de un Gobierno de cambio. Hicimos lo imposible. Hubo opción real de cambiar y no se habrían repetido las elecciones. Hoy, en esta situación el partido tiene que tomar una decisión. Corresponde al comité federal y tendrá que evaluar todas las circunstancias", concluyó. Minutos antes, Íñigo Errejón o Alberto Garzón ya habían dejado claro en sus cuentas de Twitter que el PSOE no debería bajo ningún concepto dar paso al PP en estas circunstancias.

El portavoz socialista, en el núcleo duro de Susana Díaz, no quiso aclarar si las revelaciones sobre Gürtel y el hecho de que este juicio cerque aún más al PP por su presunta trama de financiación ilegal complican el papel del PSOE. De nuevo se remitió a que la decisión deberá adoptarse en un próximo comité federal, que se prevé el 23 de octubre, y aseguró que esa posición deberá fijarse "teniendo en cuenta todos los elementos". "Hay quien piensa que hay que mantener una posición del no, que se traduciría en terceras elecciones, con todo el coste que eso puede tener para la nación y para el propio PSOE. Y quien piensa que hay que desbloquear la situación y debería aprovecharse el juego de mayorías que hay ahora mismo para poner en marcha una agenda política que reconciliara los intereses de la nación con los de la ciudadanía. Eso son los dos debates. Terceras elecciones o mayoría diferente", dibujó, obviando la supuesta corrupción que acorrala al PP.

Las declaraciones de Correa "vienen a confirmar" las sospechas de que "había una estructura en el seno del PP para delinquir", sostuvo el número dos de la gestora. "Que vaya adquiriendo la condición de que es verdad, porque lo dicen los principales actores, me preocupa como ciudadano", fue lo máximo que dijo Jiménez. "La posición del PSOE es muy clara. Queremos que se esclarezca. Hemos planteando que haya rendición de cuentas por parte del PP y del presidente del Gobierno, y pedimos que se asuman responsabilidades. Eso es conocido por parte del conjunto de la ciudadanía", agregó. No fue posible que concretara en qué consiste esa petición de responsabilidades y por supuesto eludió repetir la condición de que el actual presidente del Gobierno en funciones se retire.

Otro de los momentos más destacados en la comparecencia de Mario Jiménez estuvo referido al PSC y la contundencia con que el portavoz socialista dejó claro a sus compañeros catalanes que deberán de acatar y respetar la decisión que adopte el comité federal. Tanto Miquel Iceta como Núria Parlón, que en estos momentos se disputan en primarias el liderazgo del PSC, han dejado claro que no piensan moverse de su no a Rajoy. También la presidenta de Baleares, Francina Armengol, fue muy clara frente a Javier Fernández en la fiesta del 12 de octubre. El socialista asturiano llegó a lamentar que se le entienda más fuera del partido que dentro.

"Cuando haya un pronunciamiento del comité federal, esa será la posición del PSOE; cuando legítimamente se conforma una voluntad, se acepta por todo el mundo. Esa es la esencia de la democracia. Todos los diputados y todas las estructuras del partido tendrán que actuar según la decisión del máximo órgano del partido", dijo con rotundidad Jiménez. En sus declaraciones, también deslizó que el PSOE y su grupo parlamentario deberán de posicionarse con una única voz, despreciando otras fórmulas posibles para dar paso al PP, como la llamada abstención técnica, que necesitaría solo de 11 diputados socialistas que deberían abstenerse o ausentarse de la Cámara. Los socialistas andaluces prefieren, por "coherencia", que se retrate todo el grupo, pese a las advertencias de que esa votación puede arrojar la foto de una fractura interna muy grave que debería evitarse y que sería fácil de sortear si se elige solo a un grupo pequeño de diputados para que pulsen el botón de la abstención.

Todos los diputados y todas las estructuras del partido tendrán que actuar según la decisión del máximo órgano del partido

Para rebatir las críticas de Podemos, que se ceban contra los socialistas retratándolos como subalternos del PP y de Rajoy, Jiménez inició su comparecencia insistiendo en que en Andalucía se pueden ver "el maridaje" y "la mancomunidad de intereses" entre el PP y Podemos, que votan unidos, subrayó, en los momentos clave. "Mantienen su pinza por intereses espúreos, solo para hacer daño al Gobierno del PSOE, aunque tengan que votar lo inexplicable", recalcó.