Griñán recompone el PSOE andaluz tras la abrupta dimisión de Velasco

La dimisión de Rafael Velasco como número 2 del PSOE andaluz plantea un escenario inédito para José Antonio Griñán. El presidente de la Junta de Andalucía tiene la obligación de recomponer el mapa orgánico de su partido, la franquicia socialista más poderosa de España. Según distintas fuentes socialistas consultadas por El Confidencial, Griñán llamó ayer por la tarde a los ocho secretarios generales provinciales del PSOE-A. “¿Cómo ves el escenario?”, preguntó el líder andaluz a sus subordinados. El jefe del Gobierno andaluz intenta agrupar posturas y consensuar criterios ante la Ejecutiva regional del próximo viernes.

 

El presidente de la Junta de Andalucía admite el “momento complicado” socialista y bajara dos opciones: 1) Eliminar el cargo orgánico de la vicesecretaría general que capitaneaba Velasco.  2) Contemplar el regreso de algún destacado miembro de la vieja guardia. El primer escenario es el oficial y fue el que ayer resaltó la secretaria de organización, Susana Díaz.

La segunda posibilidad es una opción a lo Marcelino Iglesias, la operación diseñada por  Zapatero para comandar Ferraz. Se trataría de nombrar a un veterano socialista que lograra un consenso de toda la Ejecutiva y de los afiliados. Griñán baraja varios nombres (se descarta el regreso de Luis Pizarro, el ex vicesecretario general defenestrado en el congreso del pasado mes de marzo), pero por ahora no se plantea sustituir a Velasco. Eso sí, ¿quién se encargará de las funciones del ya ex político cordobés, el capitán de los treintañeros socialistas, junto a Díaz y el killer Mario Jiménez?

El PSOE andaluz fue ayer un hervidero de llamadas telefónicas, intercambio de SMS y reuniones oficiosas. Nadie preveía que Velasco, de 37 años, forjado siempre a la sombra de Griñán (fue el diputado más joven en el Congreso de los Diputados), abandonara la política de modo tan repentino. “No nos esperábamos una cosa así”, admiten en el PSOE.

La causa de su dimisión, las informaciones de El Mundo respecto a los 730.000 euros en subvenciones en cuatro años otorgados a la empresa de su mujer, Antonia Montilla, fue un mazazo familiar tan agudo que, según ha permitido el propio Velasco que se conociera, ha afectado al embarazo de su mujer. “Rafa”, apuntan fuentes socialistas andaluzas, “está viviendo una situación muy dura y complicada”. Al cierre de esta edición, Velasco emitió un comunicado en el que explicaba que renunciaba a su cargo "por dignidad; por dignidad política, por dignidad personal y por dignidad familiar". "Jamás he influido ni intervenido en las gestiones de dicho centro ante la Administración andaluza y siempre he permanecido al margen de la actividad profesional de mi mujer", afirmó, antes de negar "cualquier trato de favor o ejercicio de influencia política".

 

Su última mañana en San Vicente

Velasco se presentó ayer por la mañana en la calle San Vicente, la sede regional del PSOE andaluz, dejando muy claro que viviría sus últimas horas como lugarteniente de Griñán en el partido. El presidente de la Junta logró el martes por la tarde que sólo dimitiera como diputado autonómico, pero ya no pudo frenar, los deseos “irrevocables” de dimisión de su hombre de confianza.

¿Y el futuro de Rafael Velasco? Político no será, desde luego. A Velasco, que tiene estudios de Filología Inglesa, no se le conoce un empleo al margen del PSOE. “Es cierto que no ha trabajado fuera del partido, pero su experiencia profesional debería ser valorada; en otros países sí se tiene muy en cuenta. No sé porqué en España no”, aseguran fuentes de la Junta de Andalucía, que curiosamente siguen descartando una crisis en el socialismo andaluz. “Sólo ha sido una sorpresa”, rematan.