Sánchez aviva la candidatura de Ribera a las europeas: "Puede ser todo lo que se proponga"

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, manda ya señales muy claras sobre la posible candidatura de la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, como cabeza de cartel de las elecciones europeas. Su mejor baza, como ha contado este diario, después de haber intentado, sin éxito, convencer a Josep Borrell, Alto Representante de la Unión para Política Exterior y de Seguridad, de que repitiera como número uno, aunque no vaya a continuar como jefe de la diplomacia europea.

Al frente o no de la lista, la vicepresidenta siempre ha sido la persona en quien Sánchez ha pensado para dar el relevo a Borrell en el colegio de comisarios, posiblemente como vicepresidenta del Clima o al frente del área de Energía. Sánchez lo ha dejado muy claro, en la rueda de prensa que ha protagonizado este viernes en Dublín, con el primer ministro irlandés, Simon Harris. Teresa Ribera subrayó, "puede ser todo lo que ella se proponga".

El jefe del Ejecutivo no se ha ahorrado un solo halago sobre una de las personas en las que más confía de su Ejecutivo. Destacó que en estos últimos cinco años "todas las propuestas que ha hecho tanto a nivel nacional como a nivel europeo han salido adelante y han sido buenas para el conjunto de los ciudadanos", en referencia a asuntos tan trascendentales como la reforma del mercado eléctrico, la denominada solución ibérica.

Apuntó también, en un momento en que se prevé un crecimiento de los partidos de ultraderecha tras las elecciones del 9 de junio, la importancia de que la vicepresidenta sea una "referencia a nivel nacional e internacional", en una cartera como el cambio climático. Por ello, insistió, en que "es una mujer que tiene las capacidades para poder lograr todo lo que ella se proponga".

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Esta misma mañana la propia ministra, que siempre ha estado a disposición de poder encabezar la lista y convertirse en comisaria, pendiente de la decisión final del presidente, aseguró sobre las elecciones europeas que "en esa campaña me veo como un activo importante de mi gobierno y de mi partido". E incluso ha abierto la puerta a ser comisaria. Es necesario, dijo, "consolidar" la agenda verde iniciada durante el mandato de Ursula von der Leyen. Se ha "avanzado mucho en la dirección correcta", pero estos temas "no se resuelve en cuatro años, en cinco años, ni en diez años".

Es la primera vez que Ribera, una dirigente política muy cauta, habla tan abiertamente de la posibilidad de liderar la lista europea y de formar parte del colegio de comisarios. Para ser la próxima representante española en la Comisión Europea, siempre ha sido la mejor posicionada, al margen de que encabezara o no la candidatura electoral.

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Si finalmente Sánchez decide que la vicepresidenta va de número uno, podría seguir como ministra hasta casi finales de 2024, siguiendo el mismo esquema que Borrell hace cinco años. El catalán encabezó la candidatura, pero renunció al acta de eurodiputado para mantenerse como ministro de Exteriores, a la espera de formar parte del colegio de comisarios.

Llegó a prometer como parlamentario europeo ante la Junta Electoral Central (JEC) y menos de una semana después se echó a atrás para permanecer en el Gobierno hasta que se aclarara el reparto de altos cargos. El mismo procedimiento podría seguir Ribera. Eso daría a Sánchez meses de margen, hasta bien entrado el otoño, para buscar un sustituto al frente del Ministerio de Transición Ecológica.