Es noticia
PP y Vox pugnan por capitalizar el descontento juvenil con el nacionalismo en Cataluña
  1. España
LOS JÓVENES, LOS MÁS ALEJADOS DEL PROCÉS

PP y Vox pugnan por capitalizar el descontento juvenil con el nacionalismo en Cataluña

Las dos fuerzas de la derecha sacan la artillería para competir por el voto joven el 12-M, canalizado por la asociación S'ha Acabat. Vox se adelantó fichando a la expresidenta de la organización para su lista

Foto: Una joven con una bandera de España en una concentración organizada por S'ha Acabat y otras asociaciones en Madrid. (Europa Press/Alejandro Martínez Vélez)
Una joven con una bandera de España en una concentración organizada por S'ha Acabat y otras asociaciones en Madrid. (Europa Press/Alejandro Martínez Vélez)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Los jóvenes catalanes se alejan del procés en mayor medida que el resto de generaciones. Y ese dato, avalado por varios estudios del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat, obliga a los partidos situados a la derecha del tablero a echar el resto para evitar que una parte importante de ese pastel electoral en el que ya no cala la independencia termine fagocitado, bien por el PSC o bien por la abstención. PP y Vox han entrado en una batalla soterrada para atraer al electorado más joven y opuesto al separatismo, que en Cataluña canaliza de forma mayoritaria la asociación juvenil S'ha Acabat, fundada en 2018 como una suerte de antídoto al activismo soberanista.

El primer golpe lo dio Vox con el fichaje de Júlia Calvet, exlíder del sindicato estudiantil. El partido de Santiago Abascal, que se hizo fuerte desde sus inicios entre las capas de los electores más jóvenes, demuestra de este modo su apuesta en Cataluña por atraer al electorado que acude por primera o segunda vez a las urnas y que defiende los principios constitucionales y "patrióticos", una idea que también enarbola S'ha Acabat.

Como publicó El Confidencial, y más allá de explotar grandes banderas como la de la inmigración, Vox diseñará una campaña en Cataluña centrada en seducir al votante más joven. El secretario general de Vox y candidato del partido para el 12-M, Ignacio Garriga, prevé, por ejemplo, organizar diversos actos en la plaza de Artós de Barcelona, un lugar simbólico en el que cientos de jóvenes salieron a la calle en 2017 para protestar contra la declaración de independencia.

De los 5,7 millones de electores llamados a votar a las próximas elecciones catalanas, un total de 243.000 podrán participar por primera vez en unas elecciones al Parlament. La cifra es lo suficientemente abultada como para que el PP tampoco quiera dejar de abonar ese campo. El partido de Alberto Núñez Feijóo también se ha acercado en los últimos meses a la organización estudiantil, participando, por ejemplo, en las diversas manifestaciones contra la amnistía convocadas por las distintas asociaciones civiles.

Foto: (I-D): La eurodiputada Dolors Montserrat, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, el candidato del PP a la Generalitat, Alejandro Fernández, y la vicesecretaria de Organización del PP, Carmen Fúnez. (Europa Press/David Zorrakino)

El líder del PP afrontó hace unas semanas un importante test de estrés por la elección in extremis de su candidato en Cataluña tras el sorpresivo adelanto electoral. Pese a sus diferencias con Alejandro Fernández, un barón crítico con la estrategia de Génova con el nacionalismo y portador del discurso más duro del PP en Cataluña, Feijóo decidió ratificarle como número uno de la candidatura. Las presiones, internas y externas, jugaron un importante papel. Importantes asociaciones civiles ya habían dado su apoyo a Fernández. Una de ellas era S'ha Acabat.

La nueva presidenta de la organización, Andrea Llopart, miembro de las Nuevas Generaciones del PP, fue una de las voces que reivindicó la figura del dirigente popular antes incluso de que Feijóo tomase una decisión. "Aquel que decide quedarse en Cataluña antes que irse a Madrid demuestra compromiso con su tierra y sus votantes. No es fácil tener voz propia en un partido, pero Alejandro Fernández es el claro ejemplo de defensor de la libertad", escribió en redes.

El pasado jueves, el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, se reunió con Llopart y varios miembros de la directiva juvenil para trasladar el apoyo del partido a su labor. "Sois un ejemplo para todos los que defendemos la igualdad, la democracia y la libertad", reconoció el dirigente popular tras una cita a la que también acudieron varios cargos del PP de Cataluña, como el secretario general, Santi Rodríguez, o el diputado por Barcelona, Nacho Martín. Pero no fueron los únicos con los que S'ha Acabat organizó un vis a vis en Madrid. Ese mismo día, Llopart se vio también con la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán; y su número dos en sede parlamentaria, José María Figaredo.

La delegación juvenil se trasladó a Madrid para presentar un documental sobre su labor en Cataluña en los últimos años y los numerosos episodios de acoso que vivieron en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) por parte del nacionalismo más radical. Hasta la presentación se acercaron diversos cargos de Vox y PP, como Jorge Buxadé, Hermann Tertsch o Javier Ortega Smith de parte de los ultraconservadores; y Alfonso Serrano, Noelia Núñez o Paloma Martín en representación de los populares.

Como publicó este medio, el PP aspira a multiplicar hasta por cinco sus resultados en Cataluña. Pero el objetivo no sólo pasa por crecer a costa de absorber el espacio restante de Ciudadanos y atraer al electorado descontento con el PSC, sino también neutralizar a Vox, que en las autonómicas de 2021 se hizo con el bastón de mando de la derecha en Cataluña. Garriga logró 11 diputados en el Parlament frente a los tres que cosechó el PP. Alejandro Fernández peleará por adelantar a los de Santiago Abascal y atenuar la caída del partido ultraconservador tanto en el ámbito nacional como territorial. Y el voto joven puede ser decisivo en esa partida.

El nacionalismo pierde fuelle entre los jóvenes

Casi siete años después del 1-O, el interés por el proceso de independencia de Cataluña pierde fuelle especialmente entre las capas más jóvenes de la sociedad catalana. Esta tendencia se vio con claridad en un estudio publicado por el CEO catalán el pasado mes de octubre, en el que el 29% de la Generación Z —entre 16 y 27 años— y el 26% de los Millenials (entre 28 y 42 años) mostraban su preferencia por una Cataluña como autonomía dentro de España frente al 26% y 23%, respectivamente, que apostaban por la independencia.

La Encuesta sobre generaciones y participación que publicó la Generalitat revelaba también que esos valores se invertían en las generaciones más mayores, siendo mayoritaria la predilección por la independencia de Cataluña. Y esa tendencia se ha mantenido estable con el paso de los meses, a las puertas ahora de las elecciones del próximo 12 de mayo. Según la primera oleada del Barómetro del CEO de 2024, publicada a finales de marzo, el 39,4% de los jóvenes catalanes de entre 18 y 24 años apuesta por la actual Cataluña autonómica frente al 25,6% que aboga por la creación de un estado independiente.

Foto: Una estelada en un acto de Puigdemont. (Reuters/Albert Gea)

Ese valor se mantiene estable en la siguiente capa poblacional que refleja la encuesta, y el 37,6% de los encuestados de entre 25 y 34 años se inclina por la unidad de España frente al 25,3% que prefiere la vía soberanista. Las cifras cambian cuando se adentra en las siguientes capas generacionales: desde los 35 años hasta los mayores de 65, gana la opción de una Cataluña independiente, que supera el 30%.

Otro dato importante que arroja el Barómetro es la intención de voto por franja de edad de cara a las próximas autonómicas. Tanto PP como Vox cosechan el mayor porcentaje de posibles papeletas en la franja de votantes que acude por primera o segunda vez a las urnas —6,7% en el caso de los azules y 7,6% en el de los ultraconservadores—. En la capa de entre 18 y 25 años, no obstante, el PSC les lleva mucha ventaja y se sitúa como primer partido preferido entre los jóvenes catalanes (17,4%), seguido, de lejos, por Junts (9,3%) y ERC (8,7%).

Los jóvenes catalanes se alejan del procés en mayor medida que el resto de generaciones. Y ese dato, avalado por varios estudios del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat, obliga a los partidos situados a la derecha del tablero a echar el resto para evitar que una parte importante de ese pastel electoral en el que ya no cala la independencia termine fagocitado, bien por el PSC o bien por la abstención. PP y Vox han entrado en una batalla soterrada para atraer al electorado más joven y opuesto al separatismo, que en Cataluña canaliza de forma mayoritaria la asociación juvenil S'ha Acabat, fundada en 2018 como una suerte de antídoto al activismo soberanista.

Partido Popular (PP) Vox
El redactor recomienda