Es noticia
El PSOE pasa al ataque para sofocar el caso Koldo: "Ábalos ya les molesta"
  1. España
CAMBIO DE ESTRATEGIA

El PSOE pasa al ataque para sofocar el caso Koldo: "Ábalos ya les molesta"

Ferraz pasa en 24 horas de asegurar que no debe abandonar su escaño a invitarle a irse. Fuentes del partido sostienen que Sánchez está muy incómodo con el escándalo.

Foto:  José Luis Ábalos a su llegada al Congreso de los Diputados. (EFE/Kiko Huesca)
José Luis Ábalos a su llegada al Congreso de los Diputados. (EFE/Kiko Huesca)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

José Luis Ábalos se ha convertido en un problema para el PSOE. Le dejaron solo nada más se conoció el miércoles la detención de su exasesor y persona de su máxima confianza, Koldo García, por el presunto cobro de comisiones en contratos para el suministro de mascarillas durante la pandemia. Pero durante ese día y el siguiente, la postura oficial de la cúpula socialista es que no había razones para que renunciara a su escaño en el Congreso. La investigación judicial no le señalaba y pedir su sacrificio era casi presentarle como culpable.

Esta tesis no ha durado ni 24 horas. Aunque en la querella de la Fiscalía Anticorrupción, el exministro de Transportes y exsecretario de Organización del PSOE no aparece entre los acusados ni se le atribuye nada delictivo, la posición del PSOE viró totalmente este viernes, después de que en la noche del jueves se levantara el secreto del sumario.

Ante todo el menudeo de informaciones que se han difundido, fuentes del partido revelan que a Pedro Sánchez "Ábalos ya le molesta". Porque estos temas, inciden, "nunca se sabe dónde acaban". Y mientras la actuación judicial permanezca abierta "va a ser un no parar". Al margen de que él acabe o no salpicado. Porque, destacan, "en política lo judicial es secundario".

Y este es el punto en que parece estar ahora la dirección socialista. En un encuentro informativo del Grupo Joly en Cádiz, la vicepresidenta primera y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, le enseñó la puerta de salida de forma muy poco disimulada: "No puedo decir lo que el señor Ábalos quiere hacer o va a dejar de hacer, yo sé lo que yo haría". Y ante la repregunta del moderador de si ella "dejaría el escaño", repitió que, "usted sabe lo que yo haría".

Foto: Ábalos, en el último pleno del Congreso. (EFE/JP Gandul)

La propia Montero admitió que "parece que no hay ningún tipo de reproche penal o de delito", lo que deja claro que no se le reclaman responsabilidades por su presunta implicación, pero sí de carácter político, por todo lo que ha sucedido alrededor suyo. "Le corresponde a él tomar cualquier decisión", subrayó, sobre la renuncia a su acta de diputado.

Por el momento, Ábalos no se da por aludido y fuentes cercanas confirman que no valora abandonar el Congreso. Tampoco se lo han pedido de manera directa. El exministro entiende que no aparece en la querella que propició la detención de su asesor y otras personas y que, además, la actuación de esta trama prosiguió incluso después de que él abandonara el Ministerio, en el verano de 2021.

Foto: El exministro de Transportes y diputado del PSOE José Luis Ábalos, este jueves en el Congreso. (Europa Press/Eduardo Parra)

Pero su relación de absoluta confianza con Koldo García, que empezó como su chófer y acabó como su asesor, y los detalles que se empiezan a conocer de la investigación sobre contrataciones por importe de 54 millones de euros con la empresa Soluciones de Gestión, que afectan a su Ministerio o se recomendaron desde él, han llevado a la cúpula del PSOE a exhibir una lejanía aún mayor con el exministro y secretario de Organización de PSOE.

Ferraz no ofreció ninguna explicación ayer de las razones de este cambio de criterio, tras apuntar Montero, la voz más autorizada del Gobierno y del partido después del presidente, a la salida de Ábalos de la vida pública. Pero internamente se entendió con claridad que la dirección le demanda que deje el acta para que, con él fuera de juego, el PP no se cebe con el Ejecutivo.

Foto: Koldo García (i) y José Luis Ábalos, en una imagen de archivo. (Europa Press/Jesús Hellín)

"El apretón ya ha empezado", admiten en la organización. Nadie ha salido a defender al exnúmero tres del PSOE y la sensación en los territorios es que este asunto tiene muy "mala pinta". La ministra de Defensa, Margarita Robles, expuso en RNE el sentir de muchas personas en el partido. Es "absolutamente inaceptable" que un "asesor dentro de un Ministerio", como Koldo García, "pueda realizar estas actuaciones", en referencia a sus gestiones para las adjudicaciones a la empresa que derivaron, según la investigación judicial, en el cobro de 10 millones de euros en mordidas.

Robles aludió así a una responsabilidad de Ábalos vigilando. Aunque sus declaraciones se produjeron como una reflexión personal y no de manera concertada con Montero o fruto de un argumentario enviado por Moncloa, denotan la incomodidad del Gobierno y también del partido. Ella también dijo que "cada uno tiene que saber lo que tiene que hacer en cada momento".

Las manifestaciones de la vicepresidenta primera y vicesecretaria general acabaron por colocar al exministro al borde del precipicio. Ahora la duda es saber cuánto tiempo puede aguantar. Los partidos suelen preferir los accidentes a las muertes políticas. Van dando empujones hasta que, de repente, alguien se cae él solito por la ventana, sin comprender incluso en qué momento se estrelló contra el suelo.

José Luis Ábalos se ha convertido en un problema para el PSOE. Le dejaron solo nada más se conoció el miércoles la detención de su exasesor y persona de su máxima confianza, Koldo García, por el presunto cobro de comisiones en contratos para el suministro de mascarillas durante la pandemia. Pero durante ese día y el siguiente, la postura oficial de la cúpula socialista es que no había razones para que renunciara a su escaño en el Congreso. La investigación judicial no le señalaba y pedir su sacrificio era casi presentarle como culpable.

Koldo García José Luis Ábalos PSOE
El redactor recomienda