Feijóo acusa a Sánchez de intentar cambiar "el criterio de la Fiscalía" y avisa: "Usted caerá"

La amnistía, los ataques a los jueces, la convivencia en Cataluña… y el campo. En la primera sesión de control al Gobierno del año, Alberto Núñez Feijóo ha acusado a Pedro Sánchez de estar "demasiado centrado" en intentar cambiar "el criterio de la Fiscalía", en alusión a la rebelión de los fiscales del Supremo contra García Ortiz por "maniobrar para salvar al Gobierno" y blindar, de paso, la amnistía de Carles Puigdemont. La ministra portavoz advirtió este martes, de hecho, que la última palabra respecto a la acusación de terrorismo contra el expresidente de la Generalitat la tiene el fiscal general, Álvaro García Ortiz.

El líder de la oposición ha aprovechado el cara a cara para espetar al jefe del Ejecutivo que "sin Puigdemont no es nadie". Feijóo ha recordado que "de los cuatro grandes asuntos" que el Ejecutivo ha traído al Congreso, "dos fueron tumbados por sus socios". Y ha metido el dedo en la llaga sobre los presupuestos generales del Estado, que ni siquiera "están a la vista". La extensión de la tramitación de la ley de amnistía en el Congreso por el primer portazo de Junts y el veto que el PP ejecutará este mismo miércoles en el Senado a la senda de déficit complica las cosas a Sánchez. "Esa es su realidad", incidía Feijóo. "Cualquier Gobierno europeo caería por esto, y usted también caerá", vaticinaba.

Sánchez, por su parte, ha sacado a colación en la sesión de control el error que cometió Feijóo durante un mitin en la campaña gallega, cuando confundió el metano con el metanol para culpar al Gobierno de la "estigmatización" de la ganadería. "Se ha descubierto como un experto en química orgánica. Le recordaré que uno de los principales usos del metanol es el disolvente, y quizá le venga de ahí la falta de argumentos", lanzaba. El presidente del Gobierno ha insistido en que la realidad de su Ejecutivo es distinta a la que dibuja el primer partido de la oposición.

"Dejen de utilizar el metanol para hacer oposición. Es incoloro, como su proyecto político; es inflamable, como su afán por el insulto, y es tóxico, como su catastrofismo económico", zanjaba el presidente del Gobierno. Censuró, además, que el único proyecto del PP con Cataluña haya sido avivar "el fuego" de 2017, y ha sacado pecho de que este territorio esté ahora "mucho mejor" que durante el Gobierno de Mariano Rajoy. "O se entiende el pluralismo político y la diversidad territorial de España, o no se entiende a España, que es lo que le pasa a ustedes".

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La andanada del PP por la amnistía y a favor de la acusación de terrorismo contra Puigdemont avalada por los fiscales continuó también con las preguntas de hasta cinco portavoces de los populares contra Félix Bolaños, contra el que Génova ha centrado todo el peso del primer control al Ejecutivo. A una primera intervención de Cuca Gamarra sobre las cesiones al independentismo le siguió una durísima interpelación de Miguel Tellado, portavoz parlamentario de los populares. "En una democracia normal, a los delincuentes no se les trata mejor que a los policías", lanzaba, para hilar a continuación las cesiones a Junts con los tratos con EH Bildu. "Paren de blanquear al terrorismo, porque gobiernan con los herederos".

El toma y daca prosiguió con la defensa del parlamentario popular de que es el Gobierno quien "o traga con el independentismo o cae" y acusaciones mutuas de espionaje. No solo por la relación del entorno del expresident con Rusia, también por el que el Gobierno de Mariano Rajoy hizo al independentismo, recordó el ministro, y el CNI, con Pedro Sánchez ya en la Moncloa, a Pere Aragonès, que esgrimió también el diputado Rafael Hernando. El dirigente cogió el relevo de su compañero para poner el foco en la trama rusa del procés y la inquietud de Bruselas por la conexión con Vladímir Putin. "El Kremlin ha estado utilizando la guerra híbrida para atacar la soberanía nacional y ponerse al lado de aquellos que pretendían destruir nuestra integridad territorial", advertía.

Tras Tellado y Hernando, también otros diputados del PP, Sergio Sayas y Elías Bendodo, han centrado en Félix Bolaños sus ataques. "Desde que ustedes están al frente del Gobierno, quienes viven mejor son los que han dado un golpe a la Constitución en Cataluña porque reciben impunidad a cambio de poder", clamaba Sayas, mientras Bendodo ponía la puntilla señalando también a Francina Armengol. "Están mirando hacia otro lado con la connivencia de la Presidencia del Congreso. ¿Cuándo se van a levantar a pedirle a sus socios que dejen las injerencias contra los jueces?", cuestionaba.

El ministro replicó uno a uno, con rotundidad y sin dejar entrever la más mínima pizca de desgaste pese a la ofensiva de los populares. Bolaños acusó al primer partido de la oposición de "banalizar el terrorismo" para hacer política, lo que a su parecer es una "desgracia para España". "Si son traidores a la patria, si son terroristas, ¿por qué se sentaron ustedes con ellos en verano para lograr la investidura de Feijóo?", cuestionó el ministro, en alusión a los contactos privados y reconocidos del PP con Junts.

La rabia del campo llega al Congreso

El otro debate de la jornada es el relacionado con las protestas de los agricultores, que se ha colado en las tres preguntas al presidente en la sesión de control. Feijóo también le ha reclamado a Sánchez que escuche a la agricultura, en contraposición del “dogmatismo ambiental” que el líder del PP detecta en las bancadas del Gobierno, en un dardo a Teresa Ribera, la ministra de Transición Ecológica. “Acusan a los agricultores de desperdiciar el agua, aseguran que la PAC es una maravilla y que el lobo requiere más protección que las cabezas de ganado”, ha criticado Feijóo.

Mucho más insistente ha sido el líder de Vox, Santiago Abascal, que ha asegurado que la “rebelión de los tractores” detendrá la “traición” de Sánchez al campo español. Pero el político vasco ha aprovechado para darle también una colleja al PP por sus pactos en Europa con los socialistas y los verdes. “Votan en comandita el 89% de las veces en favor de ese dogmatismo ambiental”, ha dicho Abascal, que ha utilizado el mismo concepto que Feijóo. “Ustedes no quieren una España de ganaderos y agricultores, quieren una España de borregos”, ha espetado el dirigente de Vox.

“Ha estado usted muy ocupado en las pugnas internas y no ha estado pendiente de lo que hemos aprobado en favor del sector primario”, le ha contestado el presidente del Gobierno, que ha defendido medidas como los 4.000 millones de euros en ayudas y los 6.800 millones de euros de la PAC, y le ha afeado al jefe de Vox su combinación entre el “negacionismo climático y el antieuropeísmo”.