El crimen de Vidal-Quadras conduce a un balneario: así se planeó su asesinato

Lanjarón (Granada) esconde algunas pistas imprescindibles para tratar de resolver el acertijo del atentado contra Alejo Vidal-Quadras del pasado 9 de noviembre. Los investigadores de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional han descubierto que al menos cuatro de los presuntos implicados en el ataque coincidieron tres semanas antes del crimen en esta localidad de 3.700 habitantes de la Alpujarra.

Dos de los vinculados con este municipio son el español Naraya Gómez Mala y su novia, la británica Sasha Brooks, que residían en Lanjarón desde hacía tiempo junto a otros familiares sin relación con los hechos. Según han explicado a El Confidencial fuentes próximas a las diligencias, Naraya habría desempeñado un papel crucial en la logística del intento de asesinato. Su pareja está acusada de encubrimiento.

Naraya acudió al Hotel Lanjarón, un pequeño negocio familiar, para reservar una habitación, aunque nunca llegó a alojarse. El día del check-in, 17 de octubre, cuando solo faltaban 23 días para que se formara un charco de sangre a la altura del número 40 de la calle Núñez de Balboa de Madrid, Naraya se presentó en la recepción del Hotel Lanjarón con otro individuo que se mostró reacio a facilitar sus datos personales. Solo accedió a hacerlo después de que el hotel le advirtiera de que era obligatorio.

Este individuo resultó ser el francotunecino Mehrez Ayari, presunto autor material del disparo que impactó en el rostro del fundador de Vox y exdirigente del PP de Cataluña en el barrio de Salamanca. La primera reserva en el Hotel Lanjarón fue únicamente de una noche, pero Ayari prorrogó varias veces su estancia hasta completar al menos cuatro pernoctaciones.

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En ese tiempo, el presunto asesino entró y salió del establecimiento acompañado de Naraya en numerosas ocasiones. Los agentes de la lucha antiterrorista creen que se reunieron en una vivienda y un bajo alquilados por Naraya en Lanjarón para terminar de perfilar el ataque.

No lo hicieron solos. El análisis de sus movimientos también ubica en la localidad granadina a otro implicado en el crimen. Se trataría de un individuo de rango superior en la organización del atentado y que se hospedó en esas mismas fechas en el más lujoso Hotel Balneario de Lanjarón, de cuatro estrellas, ubicado a solo 500 metros del Hotel Lanjarón.

Durante esos días y bajo la supuesta dirección de Bekal, se repartieron las últimas tareas para acabar con la vida de Alejo Vidal-Quadras

Ese cuarto investigado sería el marroquí Sami Bekal Bounouare, alias Pacho, presunto autor intelectual del crimen, según las pesquisas de la Policía Nacional, como adelantó este diario la semana pasada. Los registros del Hotel Balneario de Lanjarón indican que Bekal llegó a sus instalaciones el 15 de octubre. Él mismo se encargó de formalizar la reserva y el registro.

Durante esos días, y bajo la supuesta dirección de Bekal, se repartieron las últimas tareas que debía ejecutar cada uno para acabar con la vida de Vidal-Quadras. El cerebro del crimen conocía a un venezolano, Greg Oliver Higuera Marcano, alias Maquia, que a su vez había convencido a un español de 22 años llamado Adrián Ruiz Blanco para que comprara la moto que iban a utilizar en el atentado.

El 6 de noviembre, tres días antes de que Ayari presuntamente encañonara a Vidal-Quadras, Bekal transfirió 250 euros a una cuenta de Naraya en Banco Santander para efectuar compras relacionadas con sus planes. Los agentes encargados del caso han descubierto, por ejemplo, que adquirieron dispositivos electrónicos para vigilar al político catalán en su domicilio.

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Como adelantó El Confidencial este jueves, Bekal no llegó a presenciar el disparo. El supuesto autor intelectual se fugó a Marruecos 24 horas antes. Lanjarón se encuentra a solo 40 kilómetros del puerto de Motril, que tiene conexión marítima directa con territorio marroquí. El 8 de noviembre, Bekal abandonó España rumbo a su país.

Después de los hechos, en torno al 11 de noviembre, Naraya se deshizo de su teléfono y compró otro para contactar con Bekal. Ese día, el primero escribió al segundo un breve mensaje para comprobar la línea: "Test bro". Los dos intercambiaron numerosos mensajes y llamadas en los siguientes días. El 17 de noviembre, Naraya mandó al presunto cabecilla del grupo otro texto. Solo tenía dos palabras en inglés: "Mission complete". En castellano, "misión cumplida".

Naraya Gómez, su pareja sentimental y Adrián Ruiz Blanco fueron detenidos el 21 de noviembre. La semana pasada, la policía de fronteras colombiana arrestó a Greg Oliver Higuera cuando trataba de colarse en su territorio desde Venezuela. Ayari y Bekal se encuentran en paradero desconocido y es probable que no se descubran las verdaderas razones por las que intentaron matar a Vidal-Quadras hasta que no se les detenga.

Hay otras líneas de investigación sobre la mesa. Los sicarios de Teherán no suelen dejar sus trabajos a medias y no se descartan otros motivos

Las diligencias apuntan al régimen iraní, duramente criticado durante años por el fundador de Vox. Teherán lo metió en 2022 en su lista negra por sus vínculos con el movimiento opositor Consejo Nacional de Resistencia Iraní. El propio Vidal-Quadras contó a la Policía en las primeras horas que sospechaba de la inteligencia de Irán.

Sin embargo, hay otras líneas de investigación sobre la mesa. Los sicarios de Teherán no suelen dejar sus trabajos a medias. No se descartan otros motivos, ni otros países. La conexión del autor intelectual con Marruecos obliga a introducir este país en la ecuación. En este acertijo, cada respuesta parece conducir a otra pregunta.