Junts recula y acepta las enmiendas del PSOE a la ley de amnistía

Junts per Catalunya ha reculado en solo 48 horas y ha apoyado finalmente las enmiendas presentadas por el PSOE a la ley de amnistía. Los de Carles Puigdemont han votado a favor de las ocho modificaciones técnicas que los socialistas habían negociado con sus socios, incluidos los neocovergentes, y de las que se descolgaron a última hora el pasado martes, cuando finalizaba el plazo de presentación de las enmiendas. Junts mantiene vivas las propuestas encaminadas a ampliar el alcance de la amnistía e incluir a los delitos relacionados con Tsunami Democratic y los CDR, que se debatirán en las próximas semanas hasta que se celebre una nueva reunión de la Comisión de Justicia, el próximo 30 de enero.

La formación independentista ha salvado incluso la inclusión de una de las enmiendas acordadas previamente por todos los grupos. Esto es así porque ERC y EH Bildu se han abstenido en una modificación relacionada con el derecho europeo porque, explican fuentes de la comisión, los republicanos no estaban de acuerdo con la redacción de la misma. La enmienda en cuestión busca "clarificar" que son los órganos judiciales que conocen las causas los que deben aplicar el levantamiento de las medidas cautelares y las órdenes de detención.

Esta enmienda alude a las penas de inhabilitación, que es la que afecta a Oriol Junqueras, líder de ERC, que no puede volver a la política institucional a pesar de su indulto, igual que otros líderes del procés. Se entienden así las reservas de los republicanos con su redacción, aunque finalmente ha entrado en el texto de la ley.

El PSOE no logró convencer a Junts inicialmente, a pesar de que las negociaciones, de marcado perfil técnico, la llevaron los equipos jurídicos de Junts, ERC y los designados por los partidos del Ejecutivo de coalición. Los socialistas intentaron atraerse a Junts con un matiz para evitar cualquier posibilidad de que un arresto ordenado por el Supremo pudiera sortear la ley, pero no fue suficiente. La duda está en saber qué parte de la posición de Junts es sobreactuación y qué parte un desacuerdo real. Los mensajes que salían de los partidos involucrados en las últimas fechas aludían a una buena disposición y al buen tono de las negociaciones porque había un convencimiento en que el trámite de la amnistía debía estar blindado de la bronca política, ya que se prevé un asedio por parte de la derecha.

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Europa Press

Fuentes de la citada comisión han explicado que la sesión ha comenzado con un debate sobre la constitucionalidad de la norma a raíz del informe de los letrados que se hizo público este miércoles. Vox ha levantado la voz, explican estas fuentes, para criticar la filtración del escrito, pero la letrada Piedad García-Escudero ha asegurado que el texto se hizo llegar a todos los portavoces de la comisión al mismo tiempo. Esta discusión responde a la polémica provocada por la acusación del PP sobre el retraso en conocerse este escrito, que se hizo público siete días después de su firma, que se produjo el 10 de enero.

La comisión de Justicia ha aceptado con los votos del PSOE y sus socios de la investidura parte de este informe de los letrados, apuntan estas fuentes. Se trata de las apreciaciones técnicas y formales que aparecían al final del escrito de 13 páginas que ha vuelto a poner en duda el encaje constitucional de la ley de amnistía. El documento de los letrados no es vinculante y, desde que se conoció, los mensajes del Gobierno van encaminados a dejar claro que se trata de un texto jurídico más y que será el Tribunal Constitucional el que dirima esta discusión. Así lo esbozó el miércoles Félix Bolaños y lo ha recalcado este jueves María Jesús Montero en una entrevista en Antena 3.