Feijóo ya ha contactado con Ortuzar y Abascal para intentar formar gobierno

Alberto Núñez Feijóo no ha tardado ni 24 horas desde el cierre de las urnas para intentar formar gobierno a pesar de las dificultades que presenta la aritmética que salió de las elecciones de este domingo. El presidente del PP ha desvelado en su intervención en la Junta Directiva Nacional del partido, reunida este lunes en la sede Génova, que ya ha contactado con los dos partidos que son claves en su hipotética investidura. El líder popular ha contactado con el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, así como con Santiago Abascal, el líder de Vox, en busca de una mayoría.

El gallego ha hecho público el intercambio de mensajes con Ortuzar horas después de que el partido jeltzale haya tendido la mano a Pedro Sánchez para intentar reeditar la mayoría del bloque de la investidura con nuevas metas para Euskadi y Cataluña. Fuentes del PNV recuerdan que su postura con el PP es clara después de haber dado paso a Vox en las instituciones. "Feijóo ha cruzado una línea roja", zanjan desde Vitoria. Esta postura no ha desanimado a Núñez Feijóo, que tiene intención de avanzar en estas conversaciones, igual que con Santiago Abascal, con quien llegó a mantener contacto telefónico. Hay que tener en cuenta que la combinación del PNV y Vox en una aritmética para hacer presidente al líder del PP es prácticamente una quimera, ya que los nacionalistas vascos no contemplan una negociación en la que estén los de Abascal.

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Feijóo cuenta ya con el apoyo de UPN, según ha explicado el dirigente popular, por lo que su posible investidura cuenta ya con los 136 escaños que logró el PP en la noche del 23-J y el diputado navarro. Esos 137 son insuficientes para cualquier aspiración del gallego, pero también ha hablado ya con el líder de Coalición Canaria, Fernando Clavijo, que es presidente de las islas tras un acuerdo con los populares para desalojar al PSOE del Ejecutivo regional. Sería el diputado número 137. Pero la clave está en lo que haga el PNV con sus 5 congresistas y, sobre todo, la posición que tome Santiago Abascal respecto a sus 33 diputados.Los jeltzales y la formación ultra son como el agua y el aceite. Abascal, en la mañana de este lunes, ha advertido que no habrá un “voto patriotico” si el PP pretende contar con el PNV.

Ante este escenario, Feijóo ha planteado tres posibilidades. La primera pasa por que frucitiquen algunas de estas gestiones para evitar un "Gobierno sanchista", a pesar de que el líder del PP y Pedro Sánchez mantuvieron ayer una conversación y según ha desvelado el gallego se han emplazado en volver a hablar el viernes una vez que se haya incluido en el recuento el voto exterior. Durante la noche electoral, tanto PP como PSOE airearon la posibilidad de que el voto del CERA (Censo de Españoles Residentes Ausentes) cambiase a su favor el reparto de escaños, aunque de forma limitada. Pero esta posibilidad ha quedado prácticamente descartada a lo largo del lunes en el PSOE, no así en el PP, que todavía mantiene cierta esperanza sobre todo en Madrid.

Bloqueo o nuevo gobierno de Sánchez

Las otras dos opciones planteadas por Alberto Núñez Feijóo ante la plana mayor de su partido son el bloqueo "indeseable" o la reedición de la actual mayoría de gobierno. "Un escenario implanteable", ha espetado el presidente nacional del PP, que prevé ha criticado que Sánchez se plantee "dar más poder y capacidad de decisión" a las fuerzas independentistas para repetir la suma que lo hizo presidente en 2019. Hay que tener en cuenta que el actual escenario está mucho más ajustado que hace cuatro años y que además de PNV, Bildu, ERC y el BNG, el PSOE y Sumar necesitan el apoyo, al menos tácito, de Junts, el partido de Carles Puigdemont. "El concurso de un partido liderado por un prófugo de la Justicia española no es lógico", ha zanjado Feijóo.

"Mi deber y responsabilidad histórica es liderar las conversaciones para formar un Gobierno en España sin apriorismos ideológicos", ha planteado el líder popular, que ha reconocido que su partido no ha cumplido las "expectativas" con las que llegó a la noche electoral. El dirigente gallego ha explicado que no se arrepiente de haber hablado de esas mayorías "suficientes" y de ponerse como objetivo acercarse al logro de Juanma Moreno y su mayoría absoluta en Andalucía. Según el jefe del PP, hay datos "irrefutables" sobre la victoria de su partido, el crecimiento de 3 millones de votos y 47 escaños, la "amplia mayoría absoluta en el Senado" y el mayor crecimiento en votos del PP en unas elecciones respecto a las anteriores.

Con esos mimbres, el planteamiento del PP pasa por intentar convencer a Sánchez. "No seremos rehenes de la voluntad de nadie, incluido el candidato del PSOE", ha dicho. Esa posibilidad es casi nula, dado que Sánchez también tiene intención de presentarse a la investidura. A partir de ahí, Feijóo abrirá "todas las vías". Y su intención es contar primero con Vox como tercera fuerza y seguir con el resto de socios potenciales a pesar de la dificultad. "España no puede permitirse bloqueos, las urnas nos han dicho que hemos de romper los bloques políticos con acuerdos", ha señalado antes de alertar contra el peligro de "balcanización" del país.