El botín del barco hundido: narcos de Vizcaya intentaron robar el alijo de cocaína del Nehir

En febrero de 2021, el buque Nehir fue abordado a 90 millas de A Mariña. La tripulación hundió el barco y con él un alijo millonario. Los agentes priorizaron las vidas de los ocho ocupantes y la incautación de la cocaína que iban encontrando: 1.800 kilos. Una vez en tierra, el capitán confesó que, a bordo, se habían quedado otras dos toneladas más. Por este motivo, el Juzgado Central número 1 de la Audiencia Nacional, meses después, ordenó el desguace de este barco nodriza de 52 metros de eslora y bandera de la República de Palau, amarrado desde entonces en el muelle norte del Puerto de Gijón.

El 27 de enero del 2022 trascendió que se iba a comprobar si el buque escondía 60 millones de euros más en cocaína. Un suculento botín que sus propietarios no estaban dispuestos a perder. Contactaron con varias organizaciones de narcotraficantes en España que estuvieran dispuestas a sumergirse y llevarse consigo hasta el último fardo. Unos días después, según se hace eco La Voz de Asturias, no muy lejos de la playa de Llumeres (municipio de Gozón), se identificó a 11 vecinos vizcaínos.

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Lo tenían todo bien atado. Contaban con una lancha de tres metros de eslora, equipos de buceo y propulsores marítimos con hélice a motor para moverse con soltura bajo el agua. Fueron identificados por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil: los investigaban por integrar una trama internacional de blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico.

Se dieron media vuelta

Las autoridades seguían la pista, especialmente del presunto cabecilla, Ibón A.M., de 38 años, alias ‘El Cristalero’. En 2011 fue detenido por las autoridades de Rumanía y la DEA, la agencia antidroga de los EE.UU., por un alijo de 150 kilos de cocaína enviado desde Bolivia en un cargamento de madera. En el 2020 cayó con 200 kilos de marihuana, valorada en casi medio millón de euros. Según la tesis policial, colideraba una trama que exportaba marihuana a Holanda a cambio de heroína y speed para vender en el País Vasco y Valladolid.

Lo que sucedió realmente aquel día en la playa de Llumeres, solo lo saben los implicados. Ya con la lancha en el agua, los trajes de buceo, equipos de respiración y propulsores con hélice a motor desplegados sobre el arenal, de repente se dieron media vuelta, regresaron a los coches y emprendieron el viaje de regreso a Vizcaya. Algo o alguien les alertó de que no estaban solos y dejaron abandonadas la lancha y las herramientas, y por supuesto, el ansiado botín.

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EFE

Ibón A.M. y el resto de arrestados están acusados de lavar dinero procedente del narcotráfico en Vizcaya, Valencia e Islas Baleares mediante un entramado criminal que recibía dinero en metálico para invertir en criptomoneda. El siguiente paso relacionado con este narcobuque consistirá en reflotarlo y achicar el agua del interior. Entonces se sabrá si hay cocaína, tal y como aseguró su capitán hace dos años.