La izquierda se lanza a la calle y agita la batalla contra los discursos de odio

Tras cuatro jornadas de batalla partidista incansable, la tensión política alrededor de la homofobia y los delitos de odio amenaza con incrementarse este sábado. Asociaciones del colectivo LGTBI han llamado a la movilización en la Puerta del Sol de la capital y los principales partidos de izquierda desplegarán a sus equipos en el enclave. Fuentes de PSOE, Unidas Podemos y Más Madrid confirman a El Confidencial que allí estarán sus dirigentes y animan a que la ciudadanía les secunde. La manifestación, que está llamada a ser mayor que la del miércoles, se producirá un día después de que Pedro Sánchez presidiera, en un movimiento sin precedentes y de urgencia, la Comisión de Seguimiento del Plan de Acción de Lucha contra los Delitos de Odio y de que las formaciones progresistas hayan vuelto a cargar contra Vox, al que acusan de fomentar las agresiones por su "discurso del odio".

Las siglas de izquierdas han azuzado a la población a que no desista y acuda a clamar contra los delitos LGTBIfóbicos, pese al drástico giro de los acontecimientos en el caso Malasaña, donde lo que apuntaba a ser una agresión homófoba acabó siendo una denuncia falsa, según informó el Ministerio del Interior. Los partidos del espectro se preparan así para elevar el tono tras llevar días apuntando a los de Santiago Abascal de forma directa e indirecta y cargando contra el PP por "blanquear" a esa formación.

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Javier Bocanegra

La gran movilización está programada para las 19:00 horas y ha sido convocada por más de una veintena de organizaciones, entre ellas el Colectivo de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales de Madrid (COGAM). Después de que este miércoles se congregaran frente a la Real Casa de Correos varios centenares de personas, se espera que la afluencia y la intensidad sean mayores en esta ocasión al coincidir en fin de semana y al contar con una destacada presencia de cargos políticos.

PSOE, Unidas Podemos y Más Madrid estarán sobre el terreno y animan a sus simpatizantes a hacer lo propio. Por parte de los socialistas, asistirá una delegación encabezada por Hana Jalloul, portavoz en la Asamblea regional. Isabel Serra será la representante nacional de los morados, si bien estará escoltada por una comitiva de dirigentes regionales, entre ellos su portavoz parlamentaria, Carolina Alonso. De Más Madrid, principal fuerza de la izquierda en la comunidad, será la propia Mónica García quien se desplace hasta la céntrica plaza, aunque también estará Íñigo Errejón. Lo harán tras haberse conjurado este viernes en una mesa convocada para abordar la escalada homófoba y contra los delitos de odio.

La movilización por parte de asociaciones y de los propios partidos, así como el señalamiento de estos últimos a la derecha, ha agitado sobremanera el debate nacional en los últimos días, eclipsando a asuntos como la subida de un precio de la luz en máximos. En el PP, la dirigente más dura con la izquierda ha sido la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que cargó contra el Gobierno por lo que considera "una repugnante utilización de la violencia" y tomar a "los ciudadanos por imbéciles".

"El PP ha elegido defender antes a Vox que a las víctimas", cargó Mónica García

"Cuando la izquierda va viendo el final en las urnas, vuelven a las calles", aseguró la popular desde Toledo, donde también advirtió de que no iba a "permitir" que en Madrid se utilice "el feminismo, el medioambiente o la sexualidad" para "dividir" a los españoles. "Mi Gobierno va a trabajar para que ni homosexuales ni transexuales se dejen colectivizar", aseveró la jefa del Ejecutivo madrileño, que compartía rueda de prensa con el socialista Emiliano García Page. Díaz Ayuso recibió, de hecho, la réplica de Adriana Lastra, portavoz del PSOE, que recordó que "los delitos de odio existen" y pidió a sus seguidores que no se dejen engañar "con absurdos intentos de cambiar el foco".

La presidenta se llevó las críticas de Más Madrid por no haber asistido a la reunión impulsada por ellos para abordar la situación de la homofobia en la región. "El PP ha elegido defender antes a Vox que a las víctimas", cargó Mónica García en declaraciones a los medios.

Las fuerzas progresistas no han dudado en poner el foco en los discursos del odio tras haberse registrado varias agresiones con tintes homófobos, más allá de la de Malasaña. En el caso de MM y UP, se ha incidido específicamente en Vox, mientras que los socialistas han optado por acusaciones veladas, como las hechas por el propio ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien ha negado haber apuntado directamente a los de Abascal aunque sí aseguró que hay una "evidente" relación entre los mensajes que lanzan algunos políticos y este tipo de ataques.

Sánchez, en la primera línea

La actuación del titular de Interior es, de hecho, el principal frente de batalla que ha ocupado la derecha en las últimas horas. PP, Ciudadanos y Vox han pedido su dimisión o su cese y han solicitado la documentación interna que les permita saber si el bilbaíno manejó información privilegiada sobre la denuncia falsa mientras criticaba a estos partidos en público. Tanto PP como Vox han incidido en que los ataques a sus cargos por el simple hecho de serlo son actos que también están amparados como delitos de odio y exigen que se condenen cuando tengan lugar. La oposición se ha volcado contra Grande-Marlaska y todo apunta a que aumentará su asedio durante la próxima semana, cuando vuelve la actividad al pleno del Congreso.

Sin embargo, el ministro fue arropado este viernes por el propio Sánchez, que no rehuyó la foto con él y mantuvo la convocatoria de urgencia de la Comisión contra delitos de odio que él mismo terminó encabezando por primera vez. Un gesto, el del presidente, con el que trató de demostrar liderazgo y encarnar personalmente la acción política en la materia, incluso tras haberse conocido la falsedad de la denuncia que la desencadenó. En el Gobierno entienden que se trata de un problema de primera índole que va más allá del caso citado y que es necesario dar un paso al frente.

Tras la reunión, Interior comunicó que, como parte del Plan de Acción de Lucha contra los Delitos de Odio para el tramo de 2022 a 2024, se crearán equipos específicos para estos delitos dentro de la Comisaría General de Información, de las brigadas provinciales de Información de la Policía Nacional y en la Jefatura de Información de la Guardia Civil y en unidades periféricas. Además, se profundizará en la formación de los cuerpos.