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Si sales a la calle y te caes, la Administración no te indemnizará: Filomena es fuerza mayor
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Resbalones por el hielo

Si sales a la calle y te caes, la Administración no te indemnizará: Filomena es fuerza mayor

Las permanentes recomendaciones para no salir de casa salvo en casos de urgencia o necesidad colocan la carga de la culpa en caso de accidente sobre la víctima

Foto: Vista de la Calle Montera durante la nevada de la borrasca Filomena en Madrid. (Sergio Beleña)
Vista de la Calle Montera durante la nevada de la borrasca Filomena en Madrid. (Sergio Beleña)

Filomena y el hielo se han combinado para convertir las calles de media España en una pista de patinaje. La caída de las temperatura ha provocado que las aceras cubiertas con la nieve se conviertan en placas deslizantes y, desde este domingo, comenzaron los resbalones y caídas en aceras, carreteras y accesos. En otra situación, el mal estado de estas superficies y los accidentes que puedan provocar se considerarían responsabilidad de las administraciones por un defiente funcionamiento de los servicios públicos. Pero no ahora. Si resbala y se cae, se considerará que su comportamiento es imprudente, aseguran juristas consultados.

Son cientos las indemnizaciones a ayuntamientos y comunidades por accidentes con rotura de huesos. Se considera, en la mayoría de los casos, que las roturas del pavimento o la colocación errónea de mobiliario urbano, árboles o bolardos que provocan choques son responsabilidad de las administraciones bien por una mala señalización bien por su colocación errónea. Sin embargo, el temporal no es asimilable a estas circunstancias.

Foto: Operarios trabajan para retirar nieve y mejorar la circulación en la Puerta del Sol en Madrid. (EFE)

Abogados y jueces consultados destacan que la fuerza mayor del desastre natural excluye la responsabilidad de la Administración. "Se avisó con tiempo y en principio se tomaron medidas", señala uno de los letrados consultados, que añade que las permanentes recomendaciones para no salir de casa salvo en casos de urgencia o necesidad colocan la carga de la culpa en caso de accidente sobre la víctima.

Más allá de las caídas, lo mismo sucede con los vehículos. Se entenderá que aquellos que se queden bloqueados se arriesgan a la situación por su cuenta y riesgo. La actuación imprudente y los planes para despejar las vías con quitanieves y limpiar la calzada eximen a las administraciones de responsabilidad. "Por ahora, no hay base ninguna para reclamar indemnizaciones", destaca otro de los juristas consultados.

La jurisprudencia

De este modo, Filomena dinamita el criterio común sobre la actuación anormal de la actuación administrativa. La responsabilidad patriomonial pivota habitualmente sobre la comprobación de que una actuación poco eficaz de esta desemboque en un daño concreto y que se pueda evaluar económicamente. Existe numerosa jurisprudencia sobre el criterio para aplicarla, sentada a través de las sucesivas sentencias del Tribunal Supremo. "La antijuridicidad de la lesión producida tiene lugar por no concurrir en la persona afectada el deber jurídico de soportar el perjuicio patrimonial producido", indica otro de los expertos.

Las caídas en el hielo se han convertido en una constante en los últimos dos días. Hasta tal punto es así que las autoridades han advertido de un colapso de los servicios de urgencia de los hospitales por fracturas o traumatismos. Tanto la ministra de Defensa, Margarita Robles, como los titulares de Transportes, José Luis Ábalos, y de Interior, Fernando Grande-Marlaska, han puesto el acento en la preocupación por la avanlancha de casos que requieren, incluso, intervención quirúrgica.

Filomena y el hielo se han combinado para convertir las calles de media España en una pista de patinaje. La caída de las temperatura ha provocado que las aceras cubiertas con la nieve se conviertan en placas deslizantes y, desde este domingo, comenzaron los resbalones y caídas en aceras, carreteras y accesos. En otra situación, el mal estado de estas superficies y los accidentes que puedan provocar se considerarían responsabilidad de las administraciones por un defiente funcionamiento de los servicios públicos. Pero no ahora. Si resbala y se cae, se considerará que su comportamiento es imprudente, aseguran juristas consultados.

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