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CIS | La llegada de la vacuna reduce las dudas: bajan al 28% quienes no se la pondrían
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CIS | La llegada de la vacuna reduce las dudas: bajan al 28% quienes no se la pondrían

El CIS ha preguntado por la disposición para ponerse el fármaco en los últimos sondeos, en los que se había registrado un fuerte escepticismo ante la llegada del mismo

Foto: Una vacuna en una imagen de archivo. (Reuters)
Una vacuna en una imagen de archivo. (Reuters)

Los españoles que aseguran que no se pondrían de primeras la vacuna contra el coronavirus son cada vez menos. Así, al menos, se deduce del último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que recoge un fuerte descenso entre quienes responden que no se la administrarían "inmediatamente". Este grupo pasa del 47% del mes de noviembre al 28% ahora, cuando las primeras dosis llegarán a nuestro país el próximo sábado 26 de diciembre si todo avanza según lo previsto.

La llegada del fármaco que pueda poner freno al covid-19 ha sido sin duda el foco en el que se han puesto las esperanzas de los gobiernos a nivel mundial y de la propia población. Cuando las vacunas comienzan a inyectarse en algunos territorios y a la espera de que comiencen a distribuirse por España, la pregunta que rondaba en las autoridades sanitarias es si las dudas de buena parte de la población iban a disiparse o no en el momento de su aplicación. La encuesta se realizó entre el 1 y el 9 de diciembre.

Foto: Un camarero y varias personas en una terraza del centro de Málaga. (EFE)

El centro lleva preguntando por esta cuestión desde septiembre, cuando el porcentaje de quienes aseguraban que no se la pondrían de primeras ascendía hasta el 40,3%. Esta proporción crecería hasta el 43,8% en octubre y luego tocaría techo con el 47% de noviembre. La tendencia parecía preocupante, ya que mostraba que la porción de ciudadanos escépticos sobre la vacuna era cada vez mayor cuando se acercaba el momento en el que, previsiblemente, tuviera que empezar a administrarse.

Con los nuevos datos de diciembre, esta preocupación parece relajarse, aunque quienes dicen ese 'vacuna: de entrada, no' aún suponen el 28% de los entrevistados. A pesar de que la opción de no vacunarse de primeras deja de ser ahora la mayoritaria, no todos optan por responder que sí se pondrían el fármaco sin matices, sino que el 16,2% de los encuestados señalan que se la aplicarían "si tiene garantías, si está probada, si es fiable", una fórmula que solo eligió el 1,4% en noviembre.

De este modo, quienes dicen que se la pondrían inmediatamente sin añadir nada más son ya el 40,5% de los españoles, por el 36,8 de noviembre y el 40,2 de octubre, pero por debajo del 44,4% de septiembre, cuando esta opción fue también la mayoritaria.

Las autoridades se han mostrado en público confiadas en todo momento en que la población española tendría una buena acogida del fármaco por la tradición de vacunación que existe en nuestro país. El ministro del ramo, Salvador Illa, ha enfatizado en varias ocasiones que no tenía ni la más mínima duda de que los ciudadanos se pondrían en masa las dosis necesarias.

Ante las reticencias de casi la mitad de la población en el barómetro anterior, este medio preguntó a las figuras destacadas en Sanidad de los principales partidos políticos para conocer sus postulados sobre la vacuna. Todos, a excepción de Vox que no quiso participar, mostraron sus esperanzas en el fármaco y su convencimiento de que si eran autorizadas sería porque eran seguras y eficaces, por lo que apostaban por aumentar las labores de concienciación y pedagogía para convencer a la población.

De hecho, según el propio CIS, los votantes de Santiago Abascal son los más escépticos con la llegada del fármaco con el 49,6%. Esta porción también se reduce respecto a noviembre, cuando los votantes de Vox que decían no suponían el 62,6%. También en el no se sitúa en diciembre el 19,2% de los seguidores del PSOE, el 28,9 del PP y el 32,9% de Ciudadanos, mientras que en el caso de Unidas Podemos la encuestadora divide en tres la coalición: su marca catalana, con el 32,8% diciendo que no se la pondría; la confluencia gallega, con el 16,4; y el partido en el resto del territorio, con el 21,6 respondiendo en esta dirección.

Los españoles que aseguran que no se pondrían de primeras la vacuna contra el coronavirus son cada vez menos. Así, al menos, se deduce del último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que recoge un fuerte descenso entre quienes responden que no se la administrarían "inmediatamente". Este grupo pasa del 47% del mes de noviembre al 28% ahora, cuando las primeras dosis llegarán a nuestro país el próximo sábado 26 de diciembre si todo avanza según lo previsto.

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