Los Pujol, el 'procés', Gürtel: Villarejo intentó vender datos para frustar causas judiciales

La pieza 28 del caso Tándem estalló en la noche de este viernes. Agentes de Asuntos Internos de la Policía Nacional detenían a la mujer del comisario José Manuel Villarejo, Gemma Alcalá, un preso de la confianza del excomisario y otras tres personas en el marco de una nueva operación del Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional y la Fiscalía Anticorrupción. Los arrestos se produjeron después de que se comprobara que en las últimas semanas el recluso que había compartido prisión con el policía retirado y disfrutaba de permisos, había contactado con personas del entorno de los Pujol, próximas a los políticos del 'procés' o a acusados de la trama Gürtel para vender información sensible de las causas judiciales que podía interesar a distintos condenados para desmontar los procedimientos, informan fuentes cercanas al caso.

Los investigadores sospechan que el preso, un abogado, actuaba siguiendo instrucciones directas del excomisario y su mujer. El recluso Alfonso Pazos había sido trasladado a una nueva prisión y aprovechaba las salidas de fin de semana para mantener citas o conversaciones telefónicas en las que trató de cerrar esta venta de material. También ha sido detenida la esposa del preso y una de sus hijas. Se acusa a todos ellos la comisión de delitos de organización criminal, infidelidad en la custodia de documentos y revelación de secretos. Los detenidos pasarán a disposición judicial el próximo lunes.

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La operación se lanzó después de que la intervención de comunicaciones y los seguimientos realizados demostraran que el 'emisario' de Villarejo ya habían iniciado contactos para ejecutar ese traspaso de audios, expedientes policiales y documentación. Se había acercado a personas relacionadas con despachos de abogados, periodistas y empresarios, los datos se ofertaban a precios millonarios. La venta de material detectada iba en esta ocasión más allá de las conversaciones que el excomisario fue grabando hasta su detención por el Tándem. El paquete ofertado incluía en este caso expedientes íntegros de las investigaciones policiales.

Registros

Según las fuentes consultadas una comitiva judicial registró la celda del comisario de forma paralela a los arrestos e incautó de documentación, principalmente apuntes que ha ido tomando durante su encierro. También se produjeron otras entradas y registros como la llevada a cabo en el domicilio que Alcalá compartía con Villarejo antes de su detención en 2017, situado en la localidad madrileña de Boadilla del Monte.

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No es la primera vez que Gemma Alcalá aparece vinculada a hechos delictivos de su marido. Se encuentra ya imputada en otras de las piezas de la operación Tándem, entre ellas la número 2, 'Iron', en la que la Fiscalía Anticorrupción solicita para ella más de 46 años de cárcel. En otra de las piezas de las que se ha concluido la instrucción, 'Land', en la que se investiga la intervención del excomisario en la disputa por la herencia del fundador de la urbanización de lujo 'La Finca', los fiscales reclaman para Alcalá otros 36 años.