Gobierno y comunidades estudian reducir la cuarentena a 10 días, aun con PCR positivo

Cuarentenas de diez días en lugar de los catorce que actualmente marca el protocolo, tanto para las personas con PCR positivo como negativo, en caso de contactos estrechos. Esta es la propuesta que discuten Gobierno y comunidades autónomas en el seno de la comisión de Salud Pública y sobre la que se ha manifestado un ánimo compartido de adoptarla. Así lo ha ratificado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros celebrado este martes. Si bien no ha podido ofrecer una confirmación definitiva, sí ha asegurado que "parece probable que se adopte este acuerdo". Esta misma tarde.

El protocolo actual se modificaría así para reducir los tiempos de aislamiento de las personas con contactos estrechos con un positivo por coronavirus. Se seguiría así la senda ya decidida por Navarra y a la que se ha sumado Cataluña, con la intención de implantar este nuevo periodo de aislamiento a partir de la próxima semana. Asimismo, en países como Francia se ha acortado el periodo de cuarentena a tan solo una semana.

El ministerio de Sanidad se había opuesto a este cambio hasta que no hubiese "una evidencia científica sólida", aunque se planteó que no hiciesen cuarentena las personas que, con PCR negativo tras estar en contacto con un positivo, realizasen actividades esenciales. "En los protocolos que hay en España se dice que en determinadas circunstancias se puede reducir las cuarentenas a 10 días, si bien cualquier cambio que se haga en los mismos tiene que estar avalados por criterios científicos", concluía el máximo responsable de Sanidad hace una semana. El periodo de 14 días fue propuesto por la OMS durante las primeras semanas de la pandemia,

Sobre la evolución de la pandemia en Madrid y el incremento de las restricciones, Salvador Illa se ha mostrado contrario a recurrir al estado de alarma. "En mi opinión no es momento de activar el estado de alarma", ha avanzado, aun matizando que se trata de una decisión en manos de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Como ya había hecho esta mañana, el ministro de Sanidad ha vuelto a reiterar su recomendación a los habitantes de Madrid de "limitar al máximo" su movilidad, vivan o no en alguna de las 37 áreas básicas de salud en las que se han decretado confinamientos. "La situación lo hace recomendable", concluyó.

El Grupo Covid-19 formado entre el Gobierno y la Comunidad de Madrid para coordinar medidas de cara a atajar la curva de la segunda ola del coronavirus, comenzó este lunes a analizar las restricciones en vigor y la evolución de la pandemia, sin descartar "nuevas medidas adicionales si hiciera falta". Así lo ha trasladado el propio Illa, que forma parte de esta mesa junto al vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, el consejero de Salud, Enrique Ruiz Escudero y la ministra de Política Territorial Carolina Darias.

En los próximos días está previsto elaborar un plan integral de actuación en Madrid con medidas complementarias o modificación de las actuales "en función de cómo evolucione la pandemia". El objetivo pasa también por marcarse un objetivo por fases para doblegar la curva. La creación del grupo de trabajo conjunto entre Gobierno y Comunidad de Madrid, acordado este lunes por el presidente Pedro Sánchez y la presidenta autonómica Isabel Díaz Ayuso, ha sido valorado positivamente por el Gobierno, que pondrá a disposición de la Comunidad de Madrid diferentes recursos, como rastreadores, fondos para contratación de personal de servicios esenciales o respaldo jurídico. "Esta pandemia obliga a todos los servidores públicos a que trabajemos unidos", ha exhortado la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda María Jesús Montero, para concluir que se trata de la mejor forma para "contener el virus y reforzar los servicios públicos y el tejido productivo".

Una tregua que aleja Madrid del campo de batalla político, al menos en lo referente a la pandemia y hasta que se vuelva a doblegar la curva. A cambio, ambas administraciones compartirán el coste social y político de las restricciones, que ya están siendo contestadas con movilizaciones en la calle. De hecho, en los próximos días se nombrará a un único portavoz, de perfil técnico sanitario, que unificará y coordinará los mensajes.