"Sin riesgo de reincidencia": Sànchez, Rull y Turull buscan el tercer grado para Navidad

Jordi Sànchez, Josep Rull y Jordi Turull confían en obtener el tercer grado antes de Navidad. La Junta de Tratamiento está a punto de emitir un informe en el que recomendará clasificarles en un grado penitenciario y todo apunta a que propondrá el segundo, pero existe la posibilidad, si se cumplen una serie de requisitos, de que accedan directamente al tercero, lo que implica salidas de la cárcel los fines de semana y de lunes a viernes si es para acudir a un puesto de trabajo.

Su abogado, Jordi Pina, ha emitido este martes un comunicado en el que defiende dicha posibilidad y subraya sus circunstancias personales: "Entorno social que los acoge, posibilidad de encontrar trabajo, no peligrosidad en la medida en que no han actuado con violencia (como de hecho ha manifestado el propio Tribunal Supremo no condenándolos por rebelión), sin riesgo de reincidencia (el Tribunal Supremo también ha argumentado que la inhabilitación no les permite "volver a delinquir") y sin ninguna responsabilidad civil subsidiaria impuesta y pendiente de pago (que es el argumento habitual que se utiliza para denegar terceros grados)".

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Europa Press

La ley indica que los presos pueden acceder al tercer grado y a permisos penitenciarios cuando cumplen una cuarta parte de la condena: en el caso de los Jordis, esto sucederá el 14 de enero, mientras que el último en poder beneficiarse de estas salidas sería Junqueras, que tendría que aguardar hasta la Navidad de 2021. Pese a ello, también se contemplan una serie de excepciones para la concesión automática del tercer grado, posibilidad en la que se valoran circunstancias como el hecho de que no existan antecedentes.

En Cataluña, la encargada de proponer esta clasificación es la Junta de Tratamiento Penitenciario, que realiza un informe que resuelve la división de Serveis Penitenciaries, dependiente de la Conselleria de Justicia. Aunque todo apunta a que la Junta recomendará el segundo grado, el propio Pina subraya en su comunicado que dicha propuesta no es definitiva: "La decisión final de la clasificación corresponde a la Secretaría de Medidas Penales del Departamento de Justicia". Ante "las especulaciones" que dan por seguro una clasificación en segundo grado, el abogado dirige así sus esperanzas hacia la propia Generalitat.

El cumplimiento efectivo de la condena preocupa ya a la Fiscalía, hasta el extremo de que los fiscales del 'procés' pidieron expresamente al Tribunal Supremo que retrasara lo máximo posible la concesión del tercer grado. Tras ratificarse en su acusación de rebelión y en su petición de penas de 25 años en la franja más alta, que afecta a Junqueras, reclamaron que se dejara constancia en sentencia de la obligada aplicación del artículo 36.2 del Código Penal. En él, se especifica que cuando la duración de la pena de prisión impuesta sea superior a cinco años, el juez podrá ordenar que la clasificación del condenado en el tercer grado no se efectúe hasta el cumplimiento de la mitad de la pena impuesta. No obstante, el tribunal presidido por Manuel Marchena no recogió este guante, bajo el argumento de que supondría una intromisión gratuita en un terreno ajeno a su competencia.