Casado recurre a la cantera de FAES para controlar Génova y el Grupo Popular
Los últimos dirigentes y profesionales nombrados o ascendidos en el aparato del partido y en el Congreso tienen en común haber pasado por la fundación de Aznar
Pablo Casado ha recurrido de nuevo a la cantera de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (desde exdirectivos, colaboradores y asesores a antiguos becarios) para completar sus últimos nombramientos y ascensos en la sede del partido y en los grupos parlamentarios. De la FAES creada por José María Aznar proceden o han pasado en alguna etapa el nuevo jefe de gabinete del presidente del partido, Pablo Hispán; el recién designado coordinador de la asesoría parlamentaria, Gabriel Elorriaga, y el equipo de confianza nombrado por Cayetana Álvarez de Toledo en el Congreso. Y los tres han tenido puestos ejecutivos o de representación en el patronato de la fundación, como el propio Casado.
Los dirigentes de la vieja Alianza Popular decían de la refundación del PP de 1990 que en la primera dirección resultante había todo un Consejo de Ministros de Adolfo Suárez, dado el desembarco masivo de exministros y ex altos cargos de UCD. Los veteranos de la etapa de Mariano Rajoy señalan ahora que los hombres y mujeres de confianza de Aznar en La Moncloa y en FAES controlan todos los puestos clave de decisión en Génova y el Grupo Popular.
En el Grupo Popular, Álvarez de Toledo se ha rodeado de antiguos compañeros formados en FAES para nombrar a su equipo de confianza
Javier Zarzalejos, el actual secretario general de la fundación que fue secretario general de la Presidencia del Gobierno entre 1996 y 2004, entró en listas europeas del PP en mayo pasado y ahora ocupa escaño en Bruselas. Pero el máximo hombre de confianza de Aznar en las últimas décadas es el menos próximo a Casado y son sus antiguos jefes, compañeros, subordinados y colaboradores en FAES los que están en primera línea.
Javier Fernández-Lasquetty, exsecretario general de la fundación y jefe de gabinete del presidente del PP dejó hace dos semanas ese último cargo para dirigir la consejería de Hacienda de la Comunidad de Madrid y el presidente del PP acaba de llamar de nuevo a Pablo Hispán para cubrir la vacante. En la larga carrera de Hispán como asesor destaca el periodo que estuvo en la Moncloa con Rajoy, pero también pasó entre 2001 y 2003 para FAES, donde se ocupó de los programas para Estados Unidos y México.
Pese a las reticencias de algunos sectores del PP, Casado impuso este mes de julio el nombramiento de Cayetana Álvarez de Toledo, antigua directora de internacional de FAES, como portavoz del Grupo Popular en el Congreso. Es a todos los efectos la 'número dos' del presidente del partido ante la opinión pública. En agosto recuperó además al otro dirigente del partido más crítico con Rajoy, Gabriel Elorriaga, para coordinar todo el trabajo de asesoría parlamentaria. Es otro colaborador fijo de la fundación de Aznar y 'gabinetero' de la Moncloa en los primeros gobiernos del PP.
En el Grupo Popular, Álvarez de Toledo se ha rodeado también de antiguos compañeros y profesionales formados en FAES para nombrar a su equipo de confianza, desde su propia jefa de gabinete, Pilar Marcos, a responsables de comunicación. Marcos fue diputada en la anterior legislatura y apoyó en primera instancia la candidatura de Soraya Sáenz de Santamaría para la sucesión de Rajoy.
Pablo Casado ha recurrido de nuevo a la cantera de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (desde exdirectivos, colaboradores y asesores a antiguos becarios) para completar sus últimos nombramientos y ascensos en la sede del partido y en los grupos parlamentarios. De la FAES creada por José María Aznar proceden o han pasado en alguna etapa el nuevo jefe de gabinete del presidente del partido, Pablo Hispán; el recién designado coordinador de la asesoría parlamentaria, Gabriel Elorriaga, y el equipo de confianza nombrado por Cayetana Álvarez de Toledo en el Congreso. Y los tres han tenido puestos ejecutivos o de representación en el patronato de la fundación, como el propio Casado.