El PSOE pide a Rivera que "salga de su laberinto", "oiga a su alrededor" y se abstenga

PP y Ciudadanos no piensan en absoluto facilitar la investidura de Pedro Sánchez. Ya lo han dicho en privado y en público, en incontables ocasiones. Pero esa negativa no va a hacer desistir al PSOE demandar a ambas formaciones su abstención. Para que sientan la presión que los socialistas sintieron en 2016 para hacer presidente a Mariano Rajoy —que al final cundió, a costa de reventar al partido— y también porque la reelección del jefe del Ejecutivo se está torciendo sobremanera por la exigencia de Unidas Podemos de entrar en el Consejo de Ministros y porque no quiere depender de las formaciones soberanistas.

Justo este lunes, el día en que Ciudadanos sufre la mayor crisis interna en su corta historia, trascendió la reunión secreta en la Moncloa, esta misma mañana, entre Sánchez y Pablo Casado. También el día en que se conoció que el presidente pidió a Albert Rivera otro encuentro privado hace una semana pero que este rechazó porque ya le había manifestado que no habría abstención en ningún caso. Pero Cs, y más concretamente su líder, ha de "salir de su laberinto", en opinión del PSOE, y "escuchar" más las voces de aquellos que tiene a su alrededor y que le dicen que rectifique su trayectoria.

Este lunes se reunió la ejecutiva federal del PSOE por la tarde, y sin la presencia de Sánchez, pero tampoco sirvió para dar nuevas pistas acerca de la investidura. Los mensajes y las advertencias se repitieron. Pero poco más. El número tres, José Luis Ábalos, aprovechó no obstante para subir un punto más la presión hacia los tres partidos que pueden facilitar que Sánchez repita, porque provocar el bloqueo supone "boicotear los resultados" expresados en las urnas el 28 de abril, y que se vieron reforzados a favor de los socialistas en las autonómicas, municipales y europeas del 26-M. Así que, como "no hay otra alternativa" y "los papeles han sido repartidos" por los españoles, el PSOE asume la "máxima responsabilidad" a la hora de intentar formar gobierno, y lo hace con "espíritu constructivo y voluntad de entendimiento" porque quiere que la encomienda del Rey se haga posible "cuanto antes". Pero esa "responsabilidad" es compartida por otras fuerzas.

Ábalos demanda al PP que sea "congruente consigo mismo" y con su historia: "No puede jugar a ser un partido antisistema", por la "estabilidad" del país

Ábalos pidió al PP que sea "congruente consigo mismo", con su historia, con sus antecedentes, con su "papel hegemónico" en la oposición. El partido de Pablo Casado "no puede jugar a ser un partido antisistema", porque está "en juego" la estabilidad de la nación". A Podemos le insistió en que acepte su oferta de Gobierno de cooperación, que no incluye a ministros de la formación de Pablo Iglesias. De inmediato disparó toda la artillería contra Rivera justo en su día más difícil. Su portavoz económico en el Congreso, Toni Roldán, dejó este lunes el partido y su escaño y su eurodiputado Javier Nart abandonó su puesto en la ejecutiva. Dos portazos que se suman al debate ya abierto en canal en el seno de la formación naranja en torno a la investidura: hasta cuatro miembros de la dirección de Rivera pidieron negociar con Sánchez, posición que salió derrotada.

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Veto "incomprensible"

El dirigente socialista pidió entonces a Rivera que "salga de su laberinto", que deje de jugar al "cuanto peor mejor", que aparque su "huida hacia adelante" o que no suba por "el monte más escarpado a su derecha", porque todos esos gestos no le convertirán, como "por ensalmo", en líder de la oposición. "No es bueno para nadie y menos para ellos". "El veto al PSOE es incomprensible —prosiguió—. Le pedimos que escuche a su partido y se abstenga en la investidura del candidato Pedro Sánchez, que escuche a su alrededor, que recapacite. Le pedimos también que escuche a su alrededor: se lo han dicho fundadores de su partido, algunos de sus grandes fichajes, miembros de su ejecutiva y correligionarios liberales en el extranjero".

Cuántos Valls, cuántos Roldán, cuántos Nart, cuántos desmentidos de Macron hacen falta para que recapacite y rectifique?

Porque, a fin de cuentas, "la realidad es tozuda", y no va a cambiar por mucho que Cs se lo proponga, dijo. "Nadie apoya su giro estratégico en España ni en Europa" y "nadie quiere que pacte con Vox acuerdos secretos como el de Palencia, ni que imite a la extrema derecha ni que boicotee la legislatura". Y enseguida enlazó con una frase muy dura contra Rivera: "¿Cuántos Manuel Valls, cuántos Toni Roldán, cuántos Javier Nart, cuántos desmentidos de [Emmanuel] Macron hacen falta para que recapacite, para que rectifique? ¿Cuántos diputados de Cs tienen que dimitir para que Cs sea lo que se esperaba de ellos?".

"Estabilidad" y que arranque la legislatura

Los socialistas demandan una abstención no negociada a PP y Cs. Ofrecen, en primer lugar, que el país se instale en la "estabilidad" y arranque la legislatura. Porque solo se puede ser oposición, como quieren ambos, si hay un Gobierno. También el PSOE lograría una "mayor autonomía política", ya que, tal y como quieren las derechas, la gobernabilidad no dependería de otras fuerzas nacionalistas e independentistas.

"Ahora nos tienen que concretar ellos qué es lo que les motiva a participar en un acuerdo nacional, qué es lo que les haría sentirse corresponsables", dice

Pero además el presidente quiere hablar con populares y naranjas de "Presupuestos, pensiones, infraestructuras, movilidad, agua...", políticas que requieren un consenso. Claro que con Cs es más complicado siquiera entenderse, dada su negativa "incluso a sentarse a hablar". "Están instalados en el negacionismo", denunció.

El presidente del Gobierno, siguió Ábalos, ofreció a Casado la "disposición a llegar a grandes acuerdos". "Ahora nos tienen que concretar ellos qué es lo que les motiva a participar en un acuerdo nacional, qué es lo que les haría sentirse corresponsables. Estamos esperando a que nos digan qué hace falta para que colaboren en la puesta en marcha de la legislatura", sostuvo.

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Tanto Génova como Ferraz confirmaron la reunión entre Sánchez y Casado de este lunes por la mañana, adelantada por 'Antena 3 Noticias 1'. La dirección socialista señaló que estuvieron conversando sobre la renovación de los puestos institucionalies de la UE, las futuras citas europeas, el G-20 y sobre la sesión de investidura. En este punto, indicaron fuentes del PP, Casado reiteró su no por las mismas razones que había expresado en público: Navarra —Ábalos insistió en que no hay pacto alguno con Bildu y la prueba está en que la alcaldía de Pamplona, y de otras localidades de la comunidad, fue a parar el pasado 15 de junio a la coalición de derechas Navarra Suma— o Cataluña. El jefe de los populares acudió a la llamada de Moncloa, dicen en su entorno, por lealtad institucional.

Rivera, a diferencia de Casado, rechazó un encuentro con Sánchez, con el argumento de que Cs ya ha expresado su negativa a la abstención

Para sorpresa de los socialistas, en cambio, Rivera rechazó el encuentro pedido por la Moncloa. El jefe de Cs, dijeron fuentes de la cúpula naranja, ya le ha dicho a Sánchez "en dos ocasiones y en persona, y otra en la reunión con el jefe del Estado, que los electores han querido que Cs haga una oposición serie, firme y constructiva y que la dirección del partido ha respaldado no apoyar la investidura, ni por activa ni por pasiva" del líder socialista.