El plan del 'supersindicato' policial: órdago a Marlaska, ley salarial y asalto a Guardia Civil

El nuevo 'supersindicato' que dominará el Consejo de la Policía durante los próximos años, Jupol, tiene una hoja de ruta muy clara para conseguir sus objetivos, entre los que destaca la equiparación salarial definitiva de los funcionarios de la Policía Nacional y de la Guardia Civil con los de las fuerzas de seguridad autonómicas, los Mossos d'Esquadra y la Ertzaintza, que tradicionalmente han ganado más dinero que los primeros.

El primer punto es la declaración de un conflicto colectivo permanente. Los representantes de Jupol han anunciado en diversas ocasiones durante la campaña de las elecciones sindicales que si lograban mayoría en el Consejo de la Policía inmediatamente tomarían esta postura. El propio Natán Espinosa, presidente de la asociación que promovió el sindicato, Jusapol, insistió el miércoles por la noche tras conocer los resultados en que la idea seguía adelante. "Habrá un conflicto colectivo permanente hasta que el Congreso solucione por ley el problema", subrayó Espinosa.

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Jusapol promovió una iniciativa legislativa popular que llegó a las Cortes al final de la pasada legislatura. "Un total de 318 diputados de gran parte de los partidos del arco parlamentario votaron a favor, por lo que esperamos que en la próxima legislatura salga adelante", prevé Espinosa, que hasta entonces mantendrá una postura de cara de perro contra el Ministerio del Interior dirigido todavía en funciones por el magistrado Fernando Grande-Marlaska. El ministro, de momento, no quiere entrar en polémicas. Ayer se limitó a felicitarse por el proceso democrático y a resaltar que "el diálogo es esencial en democracia".

"Llevamos 30 años con promesas y acuerdos que no se cumplen; es necesario blindar la equiparación con una ley que iguale los salarios de todos los policías de España", considera Espinosa, que subraya que Jusapol fue creada para conseguir igualar los salarios y esa es su prioridad absoluta, sin conceder el más mínimo pasteleo con la Administración, como considera que han hecho los sindicatos tradicionales hasta ahora. "Jusapol, que une a la Policía Nacional y a la Guardia Civil, solicitará reuniones con todos los partidos políticos con representación en el Congreso para hablar de la nueva situación", anuncia Espinosa. Además, añade, la asociación "seguirá con movilizaciones como hasta ahora hasta conseguir la igualdad prometida".

Su discurso, además, cuenta con un respaldo hasta el momento desconocido en la corporación. Más de 26.000 funcionarios apoyaron a Jupol tan solo en la escala básica, por los 7.000 que votaron al Sindicato Unificado de la Policía (SUP), mayoritario hasta ahora en la corporación, que ha pasado de siete a dos vocales en el consejo. "No vamos a ocultar que ha sido un mal resultado; entendemos que no hemos sabido trasladar todo el trabajo que hemos hecho y ahora vamos a intentar que llegue mejor", valora el portavoz del SUP, Ramón Cosío.

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En paralelo a este pulso que Jupol prevé mantener con el Ministerio del Interior, el sindicato prevé también 'asaltar' la Guardia Civil. En concreto, el consejo del instituto armado, órgano homólogo al de la Policía Nacional que sirve para que la Administración y las asociaciones profesionales negocien aspectos laborales. El ente está ahora dominado por la Asociación Unificada de Guardias Civiles, una especie de SUP de la benemérita. Jusapol tiene ya una marca para llevar a cabo esta tarea. Jucil (Justicia para la Guardia Civil) pretende hacer las veces de Jupol en el cuerpo hermano.

Aún quedan más de dos años para que el consejo de la Guardia Civil convoque elecciones y hasta entonces pueden pasar muchas cosas, destacan desde las organizaciones profesionales del instituto armado. Jusapol, por su parte, prevé que el resultado sea incluso mejor que en la Policía, dado que en la Guardia Civil apenas está 'sindicado' el 40% de los profesionales.