Es noticia
Bárcenas asegura que los ordenadores que destrozó el PP contenían datos de la caja B
  1. España
DESMIENTE A LOS ACUSADOS

Bárcenas asegura que los ordenadores que destrozó el PP contenían datos de la caja B

"Si los ordenadores no contenían información, ¿para qué destruir los discos y formatearlos 33 veces?", lanzó el extesorero del PP con ironía tras comparecer como testigo en el juicio

Foto: El extesorero del PP Luis Bárcenas. (EFE)
El extesorero del PP Luis Bárcenas. (EFE)

Con dos policías a la espalda y su abogado a mano derecha, Bárcenas comenzó a declarar pasadas las dos de la tarde. Lo hizo como testigo, pero mantuvo su habitual tono chulesco a la hora de responder a las partes. "¿No podemos darle un empujoncito ahora a lo mío?", llegó a preguntar cuando el juez ordenó un receso para comer. Su comparecencia arrancó chocando con la Fiscalía, tras lo que lanzó la frase clave a mitad de interrogatorio: los ordenadores que destrozó el PP en 2013 contenían información sobre el funcionamiento de la caja B del partido. "Había datos relacionados con mis cuentas corrientes, presupuestos sobre cómo se financiaban las campañas electorales, las notas que daban continuidad a los papeles y algunos documentos más", afirmó. La fiscal, que solicita el archivo del caso al considerar que la versión del extesorero es "inverosímil", buscó una y otra vez contradicciones en su relato, pero Bárcenas se mantuvo firme: "Completaban eso que se llaman mis papeles".

A diferencia del Ministerio Público, las acusaciones populares de Izquierda Unida, Adade y Observatori Desc sí creen al extesorero. O al menos en parte. El PP se enfrenta entonces a una posible condena por daño informático, delito por el que IU pide una multa de 10,9 millones de euros, Adade una de 109.500 euros y el Observatori Desc la suspensión de sus actividades por un plazo de seis meses, así como la prohibición de recibir donaciones por cinco años. Junto a la formación política, se encuentran también como acusados la extesorera del partido Carmen Navarro, el abogado Alberto Durán y el informático José Manuel Moreno, a los que se les imputa además un delito de encubrimiento que conlleva penas de cárcel. En sus declaraciones ante el tribunal este jueves, todos negaron los hechos y se apoyaron en los mismos dos argumentos: los ordenadores no contenían información sobre la caja B y la destrucción de sus discos duros siguió el procedimiento establecido.

placeholder El juicio de los ordenadores de Bárcenas por el que el PP se sienta en el banquillo. (EFE)
El juicio de los ordenadores de Bárcenas por el que el PP se sienta en el banquillo. (EFE)

Pero tras exponerse esta versión de los hechos, Bárcenas aseguró justo lo contrario. Dijo que los ordenadores eran suyos y no del PP, insistiendo una y otra vez en que recogían información sensible. "Yo sabía que no estaban en las cajas. Me dijeron que no me los daban porque eran del partido", denunció. Evitó referirse de forma directa a la caja B, pero sostuvo que los discos duros contenían recibos que confirmaban algunos de los pagos que se reflejan en los conocidos como papeles de Bárcelas. "Se me ocurre 'Vallas campaña electoral' o 'pago para europarlamentarios' para no sé qué historias", lanzó cuando el abogado de Izquierda Unida, Juan Moreno, le pidió que pusiese un ejemplo. El extesorero, sin embargo, dejó claro que estas dos supuestas partidas que acababa de mencionar eran inventadas, pues en ningún caso ha querido sacar a la luz los datos que contenían los ordenadores.

Una vez finalizado el turno de IU, la abogada de Observatori Desc, Isabel Elbal, arrancó su interrogatorio. Bárcenas solo había hablado hasta entonces de partidas inventadas, pero de pronto puso sobre la mesa uno de los supuestos documentos que guardaba en sus ordenadores: el presunto pago del PP al periódico Libertad Digital con dinero de la contabilidad B. A la vista de que las acusaciones estaban consiguiendo que el extesorero abordara la información sensible, declaración que podía acabar perjudicándole a él, su abogado, Joaquín Ruiz de Infante, le paró los pies y dijo al tribunal que no iba a responder a más cuestiones de ese tipo. A partir de ese momento, el extesorero cargó contra los acusados y el PP, pero sin mencionar más datos sobre la caja B: "Si los ordenadores no contenían información, ¿para qué destruir los discos y formatearlos 33 veces?", denunció. También comentó que para recuperar los ordenadores llegó a hablar "vía Whatsapp" con el exsecretario general del partido, Javier Arenas, y con el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

"En el mismo tiempo se producen un montón de acciones que confluyen en el mismo sentido: hacerse con documentación que me pertenece"

Antes de retirarse como acusación por la destrucción de sus ordenadores, el propio Bárcenas aseguró a los investigadores que uno de los discos duros contenía información sobre el funcionamiento de la caja B: listados de donantes, datos de reuniones, recibos de pagos con la contabilidad paralela, hojas Excel con presupuestos de campañas electorales e incluso detalles de sus cuentas en Suiza. El ex dirigente del PP se ratificó este jueves en esta versión de los hechos, para lo que llegó a relacionar el destrozo de los ordenadores con la conocida como operación Kitchen, el operativo diseñado en 2013 por Interior para sustraer los documentos sensibles que Bárcenas tuviera en su poder. "En el mismo tiempo se producen un montón de acciones que confluyen en el mismo sentido: hacerse con documentación que me pertenece y perjudicarme personalmente para amedrentarme", zanjó el extesorero.

El extesorero explicó también que los documentos sobre la caja B se encontraban en dos dispositivos distintos: en el ordenador de marca Toshiba guardaba "información histórica" que resultaba de interés para la investigación de la Audiencia Nacional sobre el caso Gürtel, así como para la pieza denominada Udef Bla, que estudia la presunta caja b del PP a partir de los denominados 'papeles de Bárcenas'. Por otra parte, en el Apple Macbook almacenaba recibos escaneados que daban "soporte" a sus anotaciones en estos papeles, como listado de donantes, financiación de campañas electorales o datos de las personas que autorizaron la compra de las acciones de Libertad Digital. Una vez expuestas las diferencias entre ambos ordenadores, Bárcelos aseguró que ambos sufrieron el mismo destino: la destrucción a manos del PP.

Las defensas de los acusados, con el abogado Jesús Santos a la cabeza, cargaron a continuación contra la credibilidad del extesorero. Le preguntaron para ello por el número de denuncias que ha puesto en los últimos años contra uno de los imputados en este juicio, el responsable de servicios jurídicos del PP Alberto Durán, tratando así de pintar su versión de los hechos como una venganza contra la formación y sus antiguos compañeros. "El partido es un ente contra el que no se puede uno enemistar", respondió Bárcenas al percatarse de cuál era la estrategia del abogado, subrayando que nunca se propuso "dañar al PP". "¿Ha dicho usted la verdad?, preguntó entonces Santos. Y la respuesta fue tajante: "Absolutamente toda la verdad".

El exresponsable del departamento informático

Tras la declaración de Bárcenas, llegó el turno de Javier Barrero, exresponsable del departamento informático del PP. Confirmó que realizó un traspaso de "las hojas de cálculo y documentos" del ordenador Toshiba a un 'pendrive' para pasarlo a un segundo ordenador, versión que coincide con las palabras del extesorero, que aseguró al juez que entregó este dispositivo "sin manipulación alguna" al Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional.

El informático también sostuvo que varios de los ordenadores pertenecían a Génova y no a Bárcenas, desmintiendo así al exdirigente popular, pero no llegó a concretar si todos ellos eran propiedad del partido. Según explicó, los portátiles se ponían en "cuarentena" cuando su dueño dejaba de necesitarlos hasta decidir qué se hacía con ellos y, si se mostraba interés, se les podía hacer una copia para enviarles los datos. Sobre la posible información sensible que estos tuvieran, Barrera afirmó que no sabe nada al respecto: "No me pagaban por abrir hojas de Excel ajenas". Declaración que terminó además con un dardo al expresidente del Gobierno: "El ordenador de Rajoy se quedó sin pila porque no había sido encendido nunca".

Con dos policías a la espalda y su abogado a mano derecha, Bárcenas comenzó a declarar pasadas las dos de la tarde. Lo hizo como testigo, pero mantuvo su habitual tono chulesco a la hora de responder a las partes. "¿No podemos darle un empujoncito ahora a lo mío?", llegó a preguntar cuando el juez ordenó un receso para comer. Su comparecencia arrancó chocando con la Fiscalía, tras lo que lanzó la frase clave a mitad de interrogatorio: los ordenadores que destrozó el PP en 2013 contenían información sobre el funcionamiento de la caja B del partido. "Había datos relacionados con mis cuentas corrientes, presupuestos sobre cómo se financiaban las campañas electorales, las notas que daban continuidad a los papeles y algunos documentos más", afirmó. La fiscal, que solicita el archivo del caso al considerar que la versión del extesorero es "inverosímil", buscó una y otra vez contradicciones en su relato, pero Bárcenas se mantuvo firme: "Completaban eso que se llaman mis papeles".

Luis Bárcenas
El redactor recomienda