El Rey entrega los despachos a nuevos jueces en Madrid por la tensión independentista

El Rey entrega este martes sus despachos a los 63 nuevos jueces en un acto que se celebrará en Madrid y no en Barcelona, donde viene celebrándose en los últimos años. A pesar de que la sede la Escuela Judicial se encuentra en la capital catalana, esta es la primera vez en dos décadas que este acto se traslada a Madrid, en concreto en la Real Academia Española.

Según ha explicado el Consejo General del Poder Judicial esta decisión se ciñe estricticamente al 40 aniversario de la Constitución en plena deriva independentista y a solo unas semanas de que comience el juicio contra los líderes soberanistas; algo que no ha sentado nada bien a la judicatura catalana, que consideran un "error" que un acto del Rey que siempre se ha celebrado en Barcelona se haga en Madrid, sobre todo en las circunstancias políticas que vive Catuña.

Para reforzar su explicación, el CGPJ afirma que existe una "estrecha relación" entre la judicatura y la RAE que se ha visto reforzada en los últimos años con la publicación de obras como el Diccionario del español jurídico, el Libro de estilo de la Justicia o el Diccionario panhispánico del español jurídico. Sin embargo, estas explicaciones no son suficientes para el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que ha expresado su "profunda decepción" por el traslado de este acto cuando la Escuela Judicial está en Barcelona. De hecho, en un acuerdo aprobado el pasado mes de diciembre, los jueces catalanes esperan que esta decisión sea "transitoria" y el próximo año regrese a la Ciudad Condal.

El Rey no va a Cataluña desde el 21-S

Este acto llega casi tres semanas después de que el Gobierno celebrara un Consejo de Ministros en Barcelona que fue criticado por la oposición y que contó con varias movilizaciones del sector independentista. Este gesto con Cataluña trajo consigo una segunda reunión entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el 'president' Quim Torra, la segunda desde que el socialista llegó a La Moncloa tras la moción de censura a Mariano Rajoy.

El Rey no visita Cataluña desde el pasado 21 de septiembre cuando asistió a la inauguración del salón gasístico Gastech, a la que no acudió ni un solo miembro de la primera línea del Govern como respuesta a su rechazo a la discurso que pronunció el 3 de octubre de 2017, dos días después del referéndum ilegal de independencia. Fue precisamente por este motivo por el que el pasado año peligró la celebración de los Premios Princesa de Girona, ya que la alcaldesa de Girona, Marta Madremas, rechazó ceder el Palacio de Congreso, lugar en el que estaba previsto que se celebraran. Finalmente el espacio Mas Marroch, propiedad de los hermanos Can Roca, fue el sitio elegido para celebrar unos premios de gran importancia para la Casa Real, los segundos después de los Princesa de Asturias.

Además, la actitud del independentismo con el monarca sigue siendo hostial. De hecho, el Parlamento aprobó por mayoría el pasado mes de octubre la abolición de la monarquía por ser una institución "caduca y antidemocrática" con los votos de los soberanistas y de En Comú-Podem y reprobó a Felipe VI por su discurso tras el 1-O,