El plan de Sánchez y su Gabinete para el curso: "Un país más justo e igualitario"

La finca toledana de Quintos de Mora fue el lugar elegido por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para la toma de contacto de todos sus ministros después del verano. Con ropa todavía veraniega y charlando relajadamente, las ministras y ministros fueron entrando en pequeños grupos a la casa para asistir a una reunión informal en la que no ha habido orden del día. La intención de Sánchez era fijar las estrategias del nuevo curso político y reflexionar sobre el proyecto de España para 2030.

Esta reunión informal se produce después de que la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, anunciara este viernes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros los detalles del real decreto ley que posibilita la exhumación de los restos mortales del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos. Tras este anuncio, apareció una pancarta, que fue retirada enseguida, en instalaciones cercanas a los Quintos de Mora en la que se podía leer 'PSOE profanador de tumbas' acompañado por una fotografía de Pedro Sánchez.

'Coaching' para cohesionar

Desde Moncloa aseguraron que Sánchez pretende defender "el impulso transformador del Gobierno para conseguir un país más justo y solidario, igualitario y feminista". Un proyecto, en palabras del presidente, que “aspira a trascender la presente legislatura con una potente agenda de cambio europeísta y sostenible”. Fuentes del Ejecutivo calificaban posteriormente la jornada de trabajo "intensa y fructífera". "Es muy interesante hacer un alto en el camino y poder hablar de los temas más en profundidad", indicaba un miembro del Gabinete a El Confidencial.

No se adelantaron grandes anuncios: se trató más de una puesta al día y de la estrategia para los meses siguientes. El Gobierno está en campaña

Se trató más bien de hacer una revisión de lo que ha hecho hasta ahora el Gabinete y una puesta en común de las tareas a realizar, que siguen tres ejes principales: economía, inmigración y la estrategia para abordar la situación en Cataluña. Fuentes consultadas consideran "fundamental" que los 17 ministros puedan conocerse más y hablar tranquilamente de temas transversales a sus carteras. También se trataba de ponerse las pilas en lo que se vislumbra como una larga campaña electoral permanente, con la incertidumbre de la duración del mandato en el horizonte. "Pero el Gobierno se ve a sí mismo sólido y la impresión que quedó es que intentará aguantar la legislatura", señalaba una ministra.

Sánchez llega en helicóptero

El presidente llegó al encuentro en el helicóptero oficial. Sánchez, que el viernes por la noche asistió a la final del Mundial sub-20 en Vannes, al norte de Francia, completó su viaje hasta la finca en uno de los transportes aéreos de los que dispone Presidencia. Esta llegada hubiese sido casi imposible en el caso de Mariano Rajoy, pues el político gallego tenía miedo a los helicópteros después de un percance sufrido en uno en la plaza de toros de Móstoles. Lo ministros, por su parte, fueron llegando uno por uno en sus respectivos coches oficiales.

El presidente utilizó este medio de transporte para desplazarse a la finca, al igual que hicieran los expresidentes José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero en sus anteriores visitas al complejo, algo que no hizo Rajoy, que cuando acudió al lugar lo hizo montado en el coche oficial.

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La primera en llegar a la finca fue la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y el resto de ministros fueron llegando uno por uno en sus coches oficiales al complejo donde tuvo lugar el encuentro. El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, fue el último en aparecer.

Sánchez, según fuentes del Ejecutivo recogidas por EFE, quiso reunir a los miembros de su Gobierno para abordar los asuntos que están sobre la mesa para el nuevo curso de manera relajada y menos formal que en las habituales citas semanales del Consejo de Ministros. De hecho, no hubo cobertura informativa de la reunión y La Moncloa se limito a distribuir algunas imágenes del encuentro y una breve nota de prensa. Ya por la tarde, facilitó unas declaraciones de la portavoz del Gabinete, Isabel Celaá.

Estrategias "transversales"

Según la también ministra de Educación, el encuentro en Toledo sirvió para tratar los objetivos a corto, medio y largo plazo del Ejecutivo, abrir un escenario "general" y estrategias "transversales" relacionada con la Agenda 2030.

En declaraciones remitidas a los medios, Celáa dio cuenta de una forma genérica de los asuntos que abordaron el presidente del Gobierno y los 17 ministros. Además de abrir un escenario general, el Gabinete pudo particularizar "en algunos puntos concretos" y "acciones conjuntas" que van a interesar a la ciudadanía.

"Queremos un gobierno justo y progresista, un Gobierno feminista y además un gobierno que blinde los servicios públicos. Es ahí donde podemos encontrar la justicia que tiene que ser restaurada a aquellos ciudadanos y ciudadanas a quienes ha sido arrebatada", concluyó Celaá.