Prueba de fuego para Ciudadanos: afronta su primer caso de corrupción

La operación Enredadera, la trama que presuntamente amañó adjudicaciones públicas en decenas de ayuntamientos españoles favoreciendo a una filial de la constructora Sacyr, ha puesto a Ciudadanos frente al espejo. Se trata del primer caso de corrupción que ha afectado a las filas naranjas y, por ende, la gran prueba de fuego que se ve obligado a enfrentar en lo que es su gran bandera y uno de los pilares de su ideario: regenerar la vida pública y luchar contra la corrupción de la llamada vieja política. Como adelantó este diario, entre las detenciones que llevó a cabo la UDEF de la Policía Municipal, se encuentran las del alcalde de Arroyomolinos (Madrid), Carlos Ruipérez; el concejal de San Andrés de Rabanedo (León) y diputado provincial, Juan Carlos Fernández, y un asesor del partido en la Diputación de León, Sadat Maraña, que lleva desde 2012 muy vinculado a la formación de Albert Rivera. Tres detenidos vinculados a Ciudadanos. Según ha podido saber este diario, los agentes también investigan al primer teniente de alcalde de Arroyomolinos, Juan José González Arroyo.

La reacción dentro de la formación, eso sí, fue inmediata tras conocerse la operación. Desde el partido insisten en que no quieren dejar dudas de que "no les temblará el pulso" para combatir cualquier caso de corrupción. La primera medida disciplinaria tomada fue la de suspender cautelarmente de militancia a los detenidos. Si se confirma una imputación, serían expulsados directamente de sus filas. Fuentes del partido reconocen que han optado por ponerse "en el peor escenario" hasta que el juez se pronuncie. Si después hay que rectificar, lo harán. Pero entienden que en esta batalla no pueden dar ni un solo paso atrás y que la actitud debe ser la de prevención en lugar de "arrastrar los pies", como "siempre hacen PP y PSOE". En la operación Enredadera, la mayoría de casos afectan a estos dos partidos.

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Cristina Suárez

Fue el número dos de Rivera, José Manuel Villegas, el primer dirigente que se pronunció este martes sobre el caso públicamente en un desayuno. Aunque evitó mencionar expresamente a las personas del partido implicadas, sí insistió en que Ciudadanos mantendrá siempre una postura firme contra la corrupción y agradeció la labor de las fuerzas de seguridad, jueces y fiscales por permitir "limpiar las instituciones". El líder del partido afirmaba después que a nadie le puede quedar ninguna duda de que su formación tomará esas medidas, aunque también optó por no hablar del asunto horas más tarde durante la reunión del grupo parlamentario en el Congreso, pese a que se acababa de conocer la detención del alcalde de Arroyomolinos, de Ciudadanos.

Más allá de las medidas disciplinarias, desde el partido esperarán el pronuncionamiento del juzgado y los detalles de la operación para iniciar otros trámites, valorar si es necesario endurecer sus códigos o tomar otras decisiones. Entienden que en este momento y a la vista de lo sucedido han hecho lo que debían: suspender automáticamente de militancia a los implicados y, si se confirma la imputación, expulsarlos por completo.

En el caso de Maraña, en 2015 renunció a encabezar en León la lista de Ciudadanos a las elecciones generales de ese año por la polémica surgida por supuestos datos falsos en su currículo. En concreto, una licenciatura en Dirección y Administración de Empresas que no habría finalizado. Al año siguiente, dimitió como coordinador y miembro de la junta directiva del partido en esa provincia después de que salieran a la luz unos tuits en los que negaba que la violencia de un hombre contra una mujer fuese violencia machista y aseguraba que la mayoría de las denuncias por violencia de género eran falsas.

En cuanto a la implicación de Arroyomolinos en la trama, es un golpe importante al partido teniendo en cuenta que se trata del municipio más poblado en el que gobierna Ciudadanos. No es, en todo caso, el único municipio de la comunidad en manos de los naranjas que ha protagonizado una polémica. Tras las elecciones municipales de 2015, el partido de Rivera se hizo con cuatro alcaldías. Una, la de Valdemoro, la perdió en 2017 tras una moción de censura liderada por PSOE, Ganemos y otros dos partidos, poniendo fin al gobierno de Guillermo Gross. También en El Molar —gobernado por Cs— una de sus concejalas, María José González, está condenada por ocupar de forma irregular unos terrenos del Canal de Isabel II. Por último, el cuarto municipio en el que los naranjas ostentan una alcaldía en la región madrileña es Villanueva del Pardillo.

A pesar de que Ciudadanos solo ocupa 76 alcaldías desde los comicios de 2015, son dos de los madrileños (Arroyomolinos y Villanueva) los más grandes, junto a Mijas (Málaga), donde se vieron obligados a cambiar de socios para no perder el Gobierno, Espartinas (Sevilla), Villanueva de Gállego (Zaragoza) y Moixent (Valencia), algunos de los más grandes.

El PSOE suspende de militancia a todos los cargos implicados

Juanma Romero | Madrid

En el código ético del PSOE, aprobado en 2014, se decía que los cargos implicados en casos de corrupción serían apartados con el arranque del juicio oral. Pero esa pauta de comportamiento se ha endurecido, mucho más tras la llegada de Pedro Sánchez al Gobierno. Ocurrió tras la detención del ya expresidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, y ahora con el caso Enredadera. 

El secretario ejecutivo de Coordinación Territorial, Santos Cerdán, confirmó este martes en un comunicado que la dirección federal actuará "con rapidez y contundencia" ante el arresto de ediles del partido en el marco de la operación desarrollada por la Policía Nacional y la Fiscalía contra ayuntamientos del PP, del PSOE y de Ciudadanos. 

“La ejecutiva federal suspenderá cautelarmente de militancia a todos los que sean detenidos hasta que se resuelva el procedimiento procesal”, subrayó el dirigente navarro en la nota oficial. Cerdán incidió en el compromiso de la cúpula de Pedro Sánchez de "no tolerancia contra ningún tipo de corrupción".