Jorge Verstrynge: "Yo no me muevo, fueron los policías los que vinieron a por mí"

El exdirigente de Alianza Popular y profesor titular de la Universidad Complutense de Madrid Jorge Verstrynge ha dicho hoy que él nunca dijo "yo paso por mis cojones" durante la concentración en protesta por la proclamación de Felipe VI, que él estaba con su hijo y que en ningún momento se dirigió a la Policía. Ha asegurado que los agentes les impidieron abandonar la zona y que no le dieron explicaciones. Ha negado que él empujara a ningún funcionario, sino que fueron los policías los que le empujaron a él.

"Le dije 'no me empuje', porque no veía motivos por los que me tenía que empujar", ha relatado antes de decir que, tras dirigirse así al policía, varios agentes le cogieron y le sacaron del cordón de seguridad. "Yo es que no me muevo, son ellos los que vienen a por mí, porque se estaba armando jaleo detrás, no lo sé, o porque era yo", ha contado Verstrynge, que se ha negado a responder a la Fiscalía, sino únicamente a las preguntas de su abogado Endika Zulueta.

El jefe de uno de los subgrupos de la UIP ha explicado que, desde que montó el cordón, hay muchos gritos y que uno de los protagonistas es Verstrynge. En un momento dado, ha indicado, el profesor universitario reclamó que quería irse a casa entre gritos y malas formas. "Cuando él dice 'me voy', los policías extienden las manos para pararle y él, en el forcejeo, golpea a uno de los funcionarios, que pierde el equilibrio aunque no cae al suelo por su pericia, porque sabe que si cae puede tener más problemas", ha relatado. La agresión, ha dicho, "puede ser un acto reflejo para zafarse, pero le da en el cuerpo al policía, aunque no sé si en el pecho o en otro sitio".

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Otro de los antidisturbios que conformaba el cordón policial ha relatado que Verstrynge estaba "alentando a las masas", pero que en un momento dado se dirigió a él y le dijo que quería marcharse ya, que tenía que irse a su casa, que le dejara pasar, petición que el funcionario rechazó. "Luego él concretamente dijo 'yo paso por mis cojones' y se volvió a meter entre la masa; yo voy a por él, él se revuelve, lanza el brazo contra mi compañero y mi compañero pierde el equilibrio; entonces se le detiene", ha expuesto el agente.

El policía que se cayó tras el manotazo de Verstrynge ha descrito cómo se produjo la agresión. Ha narrado que, tras el forcejeo, el profesor universitario le golpeó y provocó que perdiera el equilibrio. "Yo apoyé la mano y me incorporé rápido", ha reseñado el agente, quien ha dicho que lo hizo así porque sabía que si se quedaba en el suelo todo podía ser peor. La semicaída, ha añadido, le provocó "un esguince en la mano" que le tuvo un mes de baja.

Todos los agentes han expuesto que tenían orden de hacer un cordón policial alrededor de los manifestantes para que no saliera ni entrara nadie en el grupo, que cumplieron y "embolsaron" a la gente, pero que este cercamiento duró poco tiempo porque, como ha referido el policía al que agredió Verstrynge, en seguida se produjeron los hechos y se disolvió el dispositivo.

El juicio se está celebrando hoy en el Juzgado de lo Penal número 13 de Madrid después de que el juez Francisco Manuel Bruñen Barbera decidiera suspenderlo el pasado 17 de noviembre antes incluso de que esta comenzara, al constatar que faltaban dos de los testigos más importantes, un policía propuesto por la Fiscalía que se encuentra en el extranjero y un periodista que supuestamente grabó las imágenes de los hechos. La suspensión se produjo fundamentalmente por la ausencia del agente, que el ministerio público considera pieza clave para reconstruir los hechos.

El tribunal, que tiene que escuchar a más de 20 testigos, juzga hoy a Verstrynge y a otras dos personas -Iván Torrico y Manuel Prada- por los incidentes ocurridos durante la concentración no autorizada que tuvo lugar en la madrileña Puerta del Sol el 19 de junio de 2014, día de la proclamación de Felipe VI. La Fiscalía solicita tres años y medio de cárcel para el profesor universitario por los delitos de atentado a la autoridad y lesiones: dos por el primero y año y medio por el segundo. El ministerio público también reclama una indemnización de 3.000 euros para un policía que resultó lesionado.

Según la Fiscalía, Verstrynge y unas 120 personas más se concentraron sin haber solicitado ninguna autorización y esto provocó que agentes de la Policía Nacional establecieran un cordón de seguridad. A las 20:45, explica el ministerio público, el profesor intentó saltarse el cordón al grito de "yo paso por mis cojones". Los funcionarios trataron de frenarle y fue cuando Verstrynge, según el fiscal, "propinó un fuerte empujón" a uno de los policías, que cayó al suelo.

Las otras agresiones

La Fiscalía en su escrito de acusación explica que, cuando un agente comenzó a detener a Verstrynge, otro de los manifestantes, Torrico, se dio cuenta y "propinó una patada en el abdomen" y varios "puñetazos" al policía. Luego forcejeó "fuertemente" con los que intentaron detenerle a él, lo que provocó lesiones a varios agentes. El tercer acusado, Prada, intervino en la disputa "forcejeando" también con otros dos agentes que también sufrieron lesiones leves. Torrico se enfrenta a dos años y Prada, a ocho meses de prision.

El jefe del grupo de la Unidad de Intervención Policial (UIP) -antidisturbios- que controlaba el cordón de seguridad que fijaba la posición de los manifestantes ha relatado hoy que él presenció cómo una persona pegaba una patada "bastante fuerte" a un compañero que provocó que el agente cayera al suelo, que fue entonces cuando se lanzó a por el agresor, que en el forcejeo éste le dio una patada y que necesitó de la ayuda de otro funcionario para sacar a esta persona de entre la masa. "Pude ver sin ningún género de dudas cómo el detenido propinó la patada al policía", ha dicho tajantemente el jefe del grupo a preguntas de la defensa. "Se le detiene colocándome encima de él, ahí es cuando me da la patada en la cara y el otro policía le agarra", ha relatado el funcionario.

El policía que fue agredido por Torrico ha corroborado el testimonio de su jefe de grupo y ha relatado durante la vista cómo el acusado le propinó una patada y un puñetazo en el abdomen. Ha dicho que tras la detención de Verstrynge los ánimos se calentaron y que fue entonces cuando se produjo el ataque por parte de Torrico contra él, que acabó en la detención del manifestante. Este testimonio ha sido confirmado por otro funcionario, quien ha dicho que además de a su compañero los manifestantes agredieron al menos a otro par de agentes, ya que se propagó el nerviosismo.

Torrico, por su parte, ha negado que acudiera a la zona para protestar, sino que en ese momento estaba paseando con su madre. "Cuando llegamos, la plaza estaba cerrada, lo estaban cercando justo cuando llegamos nosotros", ha relatado Torrico, que asegura que de repente se vio envuelto en el jaleo y que le agredieron a él, que él no agredió en ningún momento a nadie.

El policía que detuvo al tercer acusado (Prada), por otro lado, ha señalado al procesado por dar empujones a funcionarios "para entorpecer una detención". El acusado, sin embargo, ha afirmado que él iba a manifestarse de forma pacífica, pero que de pronto vio cómo golpearon a Torrico y trató de evitarlo. Ha asegurado que pasó toda la tarde por el centro de Madrid y que los policías estaban "violentos y nerviosos", agrediendo a gente que iba normalmente por la calle con banderas republicanas. Tanto Verstrynge como Prada han contado cómo sus detenciones fueron presenciadas por su familia.

"Nos tenían atrincherados y no sabía por qué hacían eso con nosotros; a un chico le aporrearon y le arrastraron como a un perro"

Uno de los miembros de la plataforma contra la impunidad del franquismo, Julián Robollo, ha dicho que su asociación -a la que pertenece el padre de Torrico- organiza todos los jueves una concentración en la Puerta del Sol y que ese día tenía también permiso para reunirse allí. Ha afirmado que hasta el momento había asistido a 250 manifestaciones y que nunca ha habido altercados, que en todas ellas apenas había un par de policías. El día de la proclamación, sin embargo, ha dicho, había cientos de policías, "más que nosotros". En un momento dado, "nos acorraló la Policía".

"No nos dejaban salir del cordón e incluso nos empujaban; le dije a uno de ellos que no me violentara, que si me quería detener que lo hiciera pero que no me empujara", ha asegurado. "Nos tenían atrincherados y no sabía por qué hacían eso con nosotros". "A Verstrynge le cogieron del cuello y la gente fue a defender a Verstrynge, entonces los policías atacaron; a un compañero mío también mayor también le tiraron al suelo", ha expuesto Rebollo, quien ha negado que el profesor universitario levantara la mano en ningún momento. "A Torrico le pegaron un golpe en la cabeza, el chico se cayó al suelo y ahí le aporrearon todo el tiempo, luego le arrastraron como un auténtico perro hasta llevarlo al furgón", ha agregado.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, que acudió el pasado 17 de noviembre, no ha asistido en esta ocasión para apoyar a Verstrynge. "Para mí es un honor estar aquí con la libertad de expresión", dijo entonces a las puertas de los juzgados de lo penal. Sí ha hecho acto de presencia en la sede judicial, sin embargo, Juan Carlos Monedero, que ha mostrado su respaldo al exdirigente de Alianza Popular con un vistoso abrazo.