Sanfermines: Un toro regresa al corral en el quinto encierro, un hecho insólito en 80 años
Este incidente, que tiene ocho precedentes en las primeras décadas del siglo XX, se ha registrado cuando, al inicio de la carrera, el último toro de la manada se ha dado la vuelta y vuelto a los corrales
El toro "Curioso I" ha protagonizado este sábadoun insólito quinto encierro de lossanfermines, al quedarse en los corrales al inicio de la carrera, un hecho que no se daba en Pamplona desde la década de los años 20 del siglo pasado.
El inaudito suceso se ha registrado cuando a los pocos metros de avanzar por la cuesta de Santo Domingo la manada de la ganadería de José Escolar, y antes de llegar a la hornacina que guarda la imagen de San Fermín, el astado que cerraba el grupo se ha dado media vuelta y ha regresado a los corrales.
El resto del ganado ha completado el trayecto del encierro, dejando a su paso cuatro heridos por asta de toro, uno de ellos grave, en la que ha sido la carrera más multitudinaria de lossanferminesde este año.
Ante el desacostumbrado caso de "Curioso I", la Concejalía de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento pamplonés, tras oír la opinión de pastores, ganadero, responsables de seguridad y de la Casa de la Misericordia, propietaria de la plaza de toro, ha acordado dar el encierro por terminado.
También ha decidido devolver el astado a los llamados corrales del Gas por una calle cortada a los viandantes para transportarlo desde allí en camión a los chiqueros de la plaza.
En una conferencia de prensa ofrecida tras el encierro, el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, historiador de formación académica, ha recordado que en la historia ha habido "algún precedente" de lo ocurrido este sábado, pero nada similar ni en las últimas décadas, ha dicho tras recordar como anécdota que a principios del siglo XX un toro quedó suelto en el encierro sin querer seguir la carrera y fue un perro pastor quien finalmente le guió en el recorrido hasta los corrales.
El concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Pamplona, Aritz Romeo, ha valorado la actuación "eficaz, rápida y efectiva" habida en el encierro y la decisión de devolver al toro a los corrales del Gas, en beneficio tanto del propio animal como de los corredores que a esa hora abarrotaban el recorrido del encierro.
Romeo ha indicado que "en ningún momento se ha barajado sacar al toro" para que completara en solitario el encierro una vez que sus hermanos lo habían ya hecho junto a los cabestros.
Los hermanos de "Curioso I", por su parte, han realizado la totalidad de la carrera con momentos de peligro, que se han saldado con cuatro heridos por asta, uno de ellos grave, y otros cinco más trasladados al Complejo Hospitalario de Navarra con diversos traumatismos. Dos corredores han sido operados.
Más de setenta personas han sido atendidas por Cruz Roja en este encierro. La mayoría de los casos (49) han consistido en curas, seguidos de atenciones médicas (9), luxaciones (4), lipotimias (1) y otros motivos que no se precisan (6).
De los nueve heridos, cuatro han sido dados ya de alta, y cinco, dos de ellos estadounidenses, permanecen ingresados.
Los corredores heridos que han podido abandonar el hospital han declarado a los periodistas que la multitud y las aglomeraciones habidas en el encierro han sido factores determinantes en el desarrollo de la carrera.
Manuel Knecht, natural de Irún (Gipuzkoa) de 30 años y con una luxación en el codo, ha señalado que "las consecuencias de correr en sábado se pagan".
Pamplona, que este fin de semana alcanzará el cien por cien de ocupación, vive la sexta jornada de sus fiestas con una tregua de calor, después de que ayer estuviese en alerta por altas temperaturas y con la previsión de que el mercurio se situará en los termómetros entre los 16 y 25 grados.
Con el acomodo que permite esa temperatura, los aficionados y las peñas acudirán esta tarde a la plaza para ver la lidia de los toros del encierro a cargo de los diestros Francisco Marco, Luis Antonio Gaspar "Paulita" y Paco Ureña.
El toro "Curioso I" ha protagonizado este sábadoun insólito quinto encierro de lossanfermines, al quedarse en los corrales al inicio de la carrera, un hecho que no se daba en Pamplona desde la década de los años 20 del siglo pasado.