El Supremo asegura que "Blanco debe su casa en Madrid a su amigo Orozco"

El Tribunal Supremo ha desestimado dos recursos planteados por la defensa del ex ministro de Fomento José Blanco para tratar de desmontar los indicios que le vinculan con el caso Campeón, la presunta trama de corrupción por la que el dirigente socialista se encuentra en estos momentos imputado por los delitos de tráfico de influencias y prevaricación. En su resolución, el Alto Tribunal concluye que existen elementos suficientes como para sostener que la vivienda en Madrid del ex vicesecretario general del PSOE fue supuestamente sufragada con sobornos. 

Blanco había pedido al Supremo que anulara las escuchas telefónicas practicadas por la Policía en las que se escucha a dos implicados en la causa asegurando el dirigente socialista intermedió para lograr que la empresa gallega Azkar, propiedad de su amigo José Antonio Orozco, consiguiera una licencia para construir una nave industrial en el municipio catalán de Sant Boi de Llobregat, próximo al aeropuerto de El Prat. Para Blanco, las escuchas deberían ser eliminadas del sumario porque fueron efectuadas sin autorización y el instructor del caso, el magistrado José Ramón Soriano, accedió a ellas sin el permiso necesario.

La defensa del ex ministro socialista también había recurrido la decisión del Supremo de autorizar a la UDEF a ampliar sus investigaciones sobre la situación patrimonial de las sociedades presuntamente implicadas en la trama. Las diligencias en cuestión incluyen la investigación de las cuentas personales de Blanco y de su mujer, Ana María Mourenza García.

El ex vicesecretario general del PSOE alega que la decisión del instructor de la causa le provoca indefensión por acordar en la recta final del proceso la práctica de nuevas investigaciones y denuncia que supone implicar en el procedimiento a su  esposa, que según el ex ministro, no guarda ninguna relación con los hechos investigados. Además, afirma que esta petición no está suficientemente motivada y que estas nuevas averiguaciones “son inútiles para los fines de la instrucción”.

La investigación ha respetado sus derechos

Pero el magistrado instructor ha tumbado punto por punto los dos recursos planteados por Blanco. El juez considera que las escuchas fueron realizadas respetando escrupulosamente la legislación y que, por tanto, "son diligencias válidas amparadas por la resoluciones citadas por el instuctor y no vulnera derecho fundamental alguno". Para el magistrado, en ningún momento se ha producido indefensión en el imputado.  

Y en cuanto a la providencia que autorizaba a la UDEF a profundizar en sus pesquisas, el órgano judicial no sólo señala que no se acordó la práctica de nuevas diligencias “sino las precisas y complementarias para la conclusión y presentación de los informes ordenados” con anterioridad, sino que también rechaza que se haya incurrido en errores formales y afirma con rotundidad que la investigación de las cuentas de Blanco y su mujer es “incontestable” por su decisiva relación con los hechos investigados.

El Tribunal Supremo también le recuerda a Blanco que “una cosa es que existan datos en la causa que apunten en la dirección exculpatoria y otra muy distinta despejar la existencia de todo elemento inculpatorio”. En este sentido, el Supremo asegura que las imprecisiones que ha evidenciado a lo largo de sus diferentes comparecencias el empresario Jorge Dorribo -una pieza clave en el proceso que sitúa al ex ministro en el epicentro de la trama- no implican necesariamente “que todo lo declarado por éste sea falso”.

Suficientes elementos acusatorios

En una de las dos resoluciones que ha dictado hoy para desestimar sendos recursos planteados por la defensa del político gallego, el juez del Alto Tribunal llega a afirmar que “en la causa existen datos para entender que la casa de Madrid del aforado [José Blanco] en alguna medida se la debía a su amigo Orozco, según conversaciones telefónicas, atribuidas a éste último, no negadas”. Esta incriminación no es firme pero complica la situación procesal del mandatario socialista.

También jugará en su contra la decisión del magistrado de permitir la continuidad en el proceso de las escuchas telefónicas y la investigación de cinco cuentas bancarias de las que son cotitulares Blanco y su mujer, dos elementos que refuerzan la acusación contra el ex ministro. Su defensa contaba con su anulación. Y el propio Blanco había manifestado recientemente su confianza en que ambos recursos se resolverían a su favor.