Blanco elude explicar la relación de Moncloa con ‘Gürtel’ y echa la culpa a Cascos

Los contratos del Gobierno central con la empresa Teconsa, implicada en el caso Gürtel, irrumpieron ayer en el Pleno del Congreso de los Diputados. José Blanco despachó la interpelación del diputado popular Rafael Hernando sobre la relación del Ejecutivo con esta constructora asegurando de forma lacónica que es “igual que con otras empresas que contratan en el sector público”.

Sin embargo, a diferencia de otras empresas, y según consta en el sumario de Gürtel, el responsable de Teconsa, José Luis Martínez Parra, contó con la posibilidad de acudir a La Moncloa para pedir un trato de favor a Angélica Rubio, asesora personal de José Luis Rodríguez Zapatero. Tras esa visita, Teconsa obtuvo al menos 45 millones en contratos con los ministerios de Fomento y Medio Ambiente.

Hernando preguntó a Blanco si en Moncloa existe “un despacho de influencias para favorecer a las empresas amigas”, y le exigió que “dé explicaciones” por haber adjudicado a Teconsa un contrato nada más aterrizar en el Ministerio. Pero en su respuesta, el vicesecretario socialista eludió aclarar cómo ha influido en las contrataciones del Gobierno la amistad que une a Rubio con Martínez Parra, así como la orden que Zapatero dio para favorecer a José Luis Ulibarri, otro empresario leonés imputado en Gürtel.

En cambio, Blanco culpó al ex ministro Francisco Álvarez Cascos de permitir en 2001 la entrada de la constructora leonesa en Fomento, adjudicándole entre el 0,5 y el 0,6% de la obra pública “todos los años”. “Por cierto, antes de esos contratos hubo otros por valor de 338 millones de euros, no se trataba de una excepción”, añadió. Además, Blanco trató de exculpar a la asesora de Zapatero con el argumento de que la obra para la que Martínez Parra le pidió ayuda no fue finalmente adjudicada a Teconsa.

A la espera de los contratos

Se trata de las cocheras del AVE en Valladolid, motivo de una conversación pinchada entre el responsable de Teconsa y Francisco Correa en el que aparece el nombre de Angélica Rubio. “Es mi amiga desde hace muchos años, y al final fui [a Moncloa] a contarle mis penas y me dijo que me iba a echar una mano”, explicó el constructor a Correa. Teconsa no logró esta adjudicación, pero sí otras del Gobierno, que el PP cifra en 52 millones de euros.

Sin embargo, para Blanco, los citados 52 millones corresponden a dos ampliaciones para una obra adjudicada por Cascos cuando el 25 de marzo de 2004, cuando el Gobierno de Zapatero estaba en funciones. “Desde que soy ministro de Fomento no hubo licitación alguna que tuviera una resolución con contratos de Teconsa, acaba de mentir”, espetó con dureza al diputado popular. Y es que el breve duelo parlamentario estuvo cargado de tensión, y marcado por las amenazas de Blanco para que no se llegara a producir, según denunciaron fuentes de Génova. Ahora, el PP está a la espera de que Fomento le remita todos los contratos con Teconsa para poder estudiar posibles irregularidades.