Los ex alcaldes Yagüe y Muñoz coinciden en los juzgados tras ser denunciados por maltrato

Marisol Yagüe y Julián Muñoz coincidieron ayer en la planta segunda de los juzgados de Marbella tras haber sido denunciados en diferentes causas por maltrato. Yagüe acudía por abofetear supuestamente a un menor y Julián Muñoz por arrancar el coche temerariamente y atropellar a un periodista, así como por impedirles realizar a él y a su compañera sus tareas periodísticas. Casualmente, el juez que llevó las dos causas fue Oscar Pérez, el magistrado del caso Malaya.

Los exteriores de los juzgados eran ayer un auténtico hervidero de cámaras. Como si de una película de Berlanga se tratase, Julián Muñoz, alcalde destronado en 2003 por una moción de censura de la corporación municipal de Marbella, se acercó al banco del pasillo del juzgado para saludar efusivamente a Marisol Yagüe, la regidora que le usurpó su sillón de edil por orden de Juan Antonio Roca. Yagüe estaba allí por un altercado ocurrido el día anterior con un menor a la salida de clase.

Según ella misma relata a El Confidencial en los pasillos de los juzgados, todo sucedió inesperadamente cuando ella salía de su casa al medio día y pasaba por El Amanecer, el Instituto de Enseñanza que está cerca de su domicilio. En ese momento era la hora de la salida de clase de los alumnos. Cuando Yagüe pasaba al lado con el coche escuchó un grito de un chico que le decía: “Ladrona, alcaldesa, choriza”. Los nervios la traicionaron y entonces ella le contestó: “Eso se lo dices a tu madre, que yo no soy nada de eso”. El niño entonces la llamó “Hija de…”. Fue en ese momento cuando, según reza la denuncia que interpusieron en la comisaría los padres del niño, ella se bajó del coche y le dio una “bofetada en la mejilla”. La ex alcaldesa, sin embargo, sólo reconoce que hubo un “enganchón”.

Según otros alumnos del centro, “se montó tal gresca que hasta salieron los profesores para poner orden en la calle”. Posteriormente, los padres tomaron cartas en el asunto y, tras llevar al niño a un centro médico, fueron a comisaría para denunciar a la regidora por supuesta agresión.

Durante la vista en la que estuvo presente el niño y sus padres, se presentó como prueba el parte medico. Las televisiones quieren hacer su agosto y una cadena privada ya ha hecho una suculenta oferta a los padres del niño para que narren el relato ante las cámaras.

Detenido 'Nono' Yagüe

Se da el caso de que mientras la ex alcaldesa prestaba declaración por estos hechos, la policía detenía en Madrid a su hermano Juan Antonio Yagüe, Nono, sobre el que pesaba desde noviembre de 2006 una orden de busca y captura por una condena firme de un año de cárcel por delito urbanístico. Como ya informó El Confidencial, Nono se encontraba en Venezuela regentando un negocio familiar de taxis en la ciudad de Valencia.

El acusado espera a que el Juzgado número 5 de Málaga que llevó el caso Proinsa envíe un exhorto al juzgado del que depende la prisión de Soto del Real para que el detenido sea trasladado a Málaga.

Julián Muñoz, denunciado por periodistas

Todo esto ocurría en los juzgados de Marbella ante la mirada de asombro del juez Oscar Pérez, el magistrado que ayer se ocupaba de los juicios rápidos de los miércoles debido a que el juzgado número 5 se ha quedado sin juez de apoyo y, de momento, sin ningún viso de sustituto por una decisión del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Aunque el tema de las comparecencias de los ex alcaldes nada tenían que ver con la operación Malaya, dio la coincidencia de que el mismo magistrado que instruye la causa fue el que tuvo que verse las caras con dos de los imputados que más asiduamente visitan las dependencias judiciales.

En el caso de Julián Muñoz, la vista por coacciones y maltrato fue rápida. Prestaron declaración los periodistas denunciantes auspiciándose en su derecho a la libertad de expresión. Ambos relataron cómo el ex edil “les impidió seguir haciendo su trabajo tras la retención en la vía publica por parte de la policía municipal, a la que llamó Julián Muñoz para que no siguieran grabando”. En esta declaración ante el juez, J.C.O., el cámara que filmaba la investigación, se ratificó en la denuncia que había presentado en comisaría y le ofreció el material gráfico que había filmado al juez Pérez.

También precisó en su relato que “el chófer de Julián Muñoz arrancó el coche temerariamente y salió a toda prisa golpeándole el pie sin ni siquiera parar para prestarle asistencia”. Los hechos ocurrieron cuando los dos periodistas seguían una investigación en un restaurante llamado Flamingo Beach, del que ahora Muñoz es director gerente, y el ex alcalde le impidió seguir realizando su trabajo.