PSOE y PP se dan una tregua para aprobar la ley de la carrera militar

Socialistas y populares han sumado sus votos en el Congreso de los Diputados para tramitar la ley de la carrera militar. El texto suprimirá 80 puestos de generales, 200 de coroneles, aumentará los de suboficiales e introducirá los estudios y titulaciones civiles en los centros de formación de suboficiales y en las Academias Militares.

El acuerdo entre el PSOE y el PP para tramitar la ley se produce después de que el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, se comprometiera a asumir gran parte de las 111 enmiendas que ha presentado el PP. Aunque los populares aceptaron la oferta de consenso y retiraron su enmienda a la totalidad, los socios parlamentarios del Gobierno, ERC e IU-ICV mantuvieron las suyas. La portavoz popular en el debate, Asunción Oltra, aprovechó la situación para dudar de la solidez del llamado ‘pacto del Tinel’ con ERC.

Los socios se desmarcan

El portavoz socialista Jesús Cuadrado pidió una y otra vez a sus socios parlamentarios que retiraran las enmiendas de devolución, pero no lo consiguió. Para animar a Gaspar Llamazares dijo que Manuel Azaña apoyaría esta ley. Y para convencer a Joan Puig, de ERC, se comprometió considerar las indemnizaciones a los soldados que fueron enviados al conflicto de Ifni-Sahara y que el tiempo del servicio militar y de la prestación social compute como cotizado a la seguridad social para completar el periodo de carencia de la pensión de jubilación.

Llamazares manifestó su desacuerdo de fondo con la política militar del Gobierno y recordó que “compartimos la retirada de Iraq, pero el Gobierno ha llevado a cabo un retroceso en Afganistán, donde participamos en cada vez más operaciones de combate”. Sobre la ley de la carrera militar dijo que se limita a dar “un alicatado universitario a las Academias militares y no logra un equilibrio entre la igualdad, el mérito y la capacidad en materia de ascensos”. Las enmiendas de devolución obtuvieron 9 votos frente a 284 contrarios (PSOE, PP y CiU) y 11 abstenciones de PNV, Coalición Canaria y parte del Grupo Mixto.

Agentes de la autoridad

La sorpresa saltó en el turno de fijación de posiciones. El portavoz del PNV, Iñaki Chueca, afirmó que a su grupo le parece “correcto” que se dote a los militares de la calificación de “autoridad sobre los elementos civiles” cuando actúen para hacer frente a emergencias. Chueca añadió que su grupo apoya plenamente “el reforzamiento de la imagen social de los ejércitos”. El texto otorga a los miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) las funciones de autoridad civil de modo que, en caso de incendio, por ejemplo, los militares podrán detener a los presuntos pirómanos o podrán ordenar desalojos.