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EiDF se desploma un 70% y dice adiós a 1.200 millones tras ver Deloitte irregularidades
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Sus acciones se pagan a 8,93 euros

EiDF se desploma un 70% y dice adiós a 1.200 millones tras ver Deloitte irregularidades

No ha sido capaz de casar las órdenes de venta y compra durante la sesión, por lo que ha habido que esperar a la subasta final para confirmar el batacazo de sus acciones

Foto: Fernando Romero, CEO de EiDF. (BME)
Fernando Romero, CEO de EiDF. (BME)

Batacazo de EiDF. La compañía de energía renovable presidida por Fernando Romero ha regresado este lunes al parqué del BME Growth tras permanecer cuatro meses suspendida por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). ¿El motivo? No presentar sus cuentas auditadas en plazo tras no firmarlas su auditor. Durante la sesión no ha sido capaz de casar las órdenes de compra y venta, dada la avalancha de estas últimas (que en todo momento han más que duplicado las ofertas de compra), por lo que ha habido que esperar a la subasta final para confirmar un desplome del 69,9%, que sitúa a sus acciones en los 8,93 euros, lejos de los 29,76 euros a los que cotizaba.

Este batacazo supone una losa en términos de capitalización para EiDF, el gran baluarte del BME Growth tras General de Galerías Comercial. La compañía tenía un tamaño de 1.721 millones de euros, pero ahora deja su valor bursátil en 516 millones de euros. Es decir, en un solo día ha perdido en torno a 1.200 millones, viéndose superada por tamaño por varias socimis y Proeduca Altus, la dueña de la Universidad Internacional de La Rioja.

El batacazo de EiDF se produce ante las dudas que suscitan las cuentas y el modelo de negocio de la cotizada. PWC se negó a firmar las cuentas auditadas, lo que obligó a la compañía dedicada a instalaciones de energía solar fotovoltaica a contratar otro auditor para solventar las discrepancias con la big four y lo hizo con los servicios de Deloitte, que ha alertado de graves deficiencias contables por parte de la compañía.

Unos problemas, plasmados en el informe forensic, en los que se evidencia un posible falseamiento de documentos por parte de EiDF, tras constatar que, "en algunas de las actividades y operaciones con terceros analizadas, se han identificado situaciones en las que se habían creado, modificado o falseado documentos. Algunos ejemplos de estas prácticas harían referencia a la relación de la sociedad con sus clientes, deudores y socios".

Foto: Fernando Romero, CEO de EiDF, en su debut bursátil. (BME)

El auditor también señalaba que "hay evidencias de posible falsificación de contratos y documentos elaborados por parte de los responsables de la sociedad, con el objeto de justificar la falta de control sobre las SPV". Además, recalcaban que "todos los deudores incluidos en el alcance del forensic presentan una vinculación directa o indirecta con Fernando Romero, por lo que se identifican numerosas incidencias relativas a facturas y pagos por servicios que podrían no haberse prestado o no estar justificados".

Un análisis, crítico con la compañía, que ha levantado un continuo enfrentamiento entre los ejecutivos de EiDF y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Hasta tal punto que el supervisor de la bolsa española tuvo que advertir a la compañía que hiciera públicas las grandes conclusiones del forensic sin ningún tipo de interpretación y al pie de la letra, ya que, en caso de no haberlo hecho, hubiera publicado ella misma el contenido íntegro del resumen ejecutivo del forensic, en virtud de los artículos 234 y 243 de la Ley de los Mercados de Valores y de los Servicios de Inversión (LMVSI).

Batacazo de EiDF. La compañía de energía renovable presidida por Fernando Romero ha regresado este lunes al parqué del BME Growth tras permanecer cuatro meses suspendida por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). ¿El motivo? No presentar sus cuentas auditadas en plazo tras no firmarlas su auditor. Durante la sesión no ha sido capaz de casar las órdenes de compra y venta, dada la avalancha de estas últimas (que en todo momento han más que duplicado las ofertas de compra), por lo que ha habido que esperar a la subasta final para confirmar un desplome del 69,9%, que sitúa a sus acciones en los 8,93 euros, lejos de los 29,76 euros a los que cotizaba.

CNMV Bolsas Bolsas y Mercados Españoles (BME)
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