La mayor empresa de camiones de España pierde acceso al descuento al carburante

Golpe a la mayor empresa de transportes de España. PrimafrIo, firma líder en Europa del transporte de mercancías con una flota de más de 2.000 camiones, va a perder buena parte del acceso a la ayuda al carburante.

Aunque el Gobierno ha prorrogado la bonificación de 20 céntimos por litro de carburante al colectivo de transportistas profesionales, lo ha limitado a los vehículos que durante los próximos seis meses estén matriculados en España, según ha referido en el Real Decreto-ley 20/2022, aprobado la pasada semana.

Ahí viene el problema para la compañía de la familia Conesa, cuya mayoría de camiones está matriculada en Portugal, pese a que su principal sede está en Murcia, su lugar de origen. La firma compró el 98% del combustible en España en 2021, detalla en sus últimas cuentas, lo que supuso un gasto de más de ocho millones de euros, cuando el combustible aún era un 50% más barato que en la actualidad (alrededor de 50 céntimos menos por litro).

Según fuentes del sector de transportistas, algunas empresas decidieron matricular sus vehículos en otros países para ahorrar costes laborales y fiscales (menos impuestos y menor coste de conductores). Fuentes oficiales de Primafrio se limitan a confirmar que perderán la ayuda al combustible de aquellos camiones matriculados en el país vecino, pero rechazan especificar si casi todos sus camiones llevan matrícula lusa, como apuntan fuentes del sector.

La firma facturó casi 490 millones de euros en 2021 y su previsión era acabar 2022 con unos ingresos de 540 millones. Según sus últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil, obtuvieron un beneficio de 53 millones de euros. Los hermanos Juan Conesa y José Esteban Conesa, administradores de la misma, vendieron el 49% al fondo de capital riesgo Apollo por más de 1.500 millones de euros este mismo 2022, después de intentar sacar la firma a bolsa en el ejercicio anterior.

La empresa factura en España alrededor del 27% del total, frente al 8% de Portugal y el 65% del resto de Europa, fundamentalmente, Alemania, Holanda, Francia y Reino Unido, donde llevan los productos hortofrutícolas de Murcia y otros lugares de la península Ibérica en camiones frigoríficos.

El Gobierno decidió eliminar a partir del 1 de enero de 2023 la ayuda al carburante de 20 céntimos. Sin embargo, sí mantendrá dicha bonificación para el colectivo de transportistas profesionales, ya que considera que son los más perjudicados por los altos precios del petróleo que aún mantienen el gasóleo por encima de los 1,5 euros por cada litro.

En este sentido, cabe destacar que el origen de las ayudas a los combustibles está en las protestas del mes de marzo de este colectivo, que se sentía altamente perjudicado por la coyuntura y logró con sus paros colapsar en parte la logística nacional. Ahora la prórroga de esta ayuda se ha limitado a los transportistas con camión matriculado en España. El Gobierno dará 20 céntimos por litro de diésel hasta el 31 de marzo y lo rebajará a 10 céntimos por litro hasta el 30 de junio.

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Cotizalia

Desde la Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas (Fenadismer) creen que la subvención es más racional limitada a los profesionales españoles. Su director general, Juan José Gil, señala que no tenía sentido beneficiar a todos los transportistas de fuera de España, que operan alrededor del 40% del transporte internacional dentro de nuestras fronteras.

Como paralelismo, el director de Fenadismer sostiene que no se debía dar esta ayuda indiscriminada a todos los turistas extranjeros que repostaron en España este verano, quienes se beneficiaban de un gasto procedente de los presupuestos generales del Estado que se elevó entre abril y diciembre a 6.000 millones de euros.

No todos opinan en ese sentido. La experta en fiscalidad energética y abogada de NH Asesores, Natalia Hidalgo, cree que esta medida va a provocar "mucha polémica y problemas". Según señala, esta restricción es un total sinsentido, ya que más que beneficiar a los transportistas españoles, lo que va a provocar es un perjuicio a las estaciones de servicio en territorio nacional donde repostan muchos transportistas de la UE. Sin embargo, considera que ello supondrá un menor gasto para la Administración.