Zalando se hunde un 15% al seguir a Asos y rebajar sus previsiones por la inflación

La inflación está provocando más de un quebradero de cabeza a la mayoría del tejido empresarial. Muchas compañías están viendo como su factura de gastos se incrementa como consecuencia del repunte de los precios y se ven obligadas a trasladarlo a los clientes y, muchas otras, ven que no venderán tanto como tenían previsto con la pérdida de poder adquisitivo de sus clientes. Así, la tienda de moda 'online' alemana Zalando ha seguido los pasos de Asos y ha lanzado un 'profit warning' o recorte de previsiones y se desploma cerca de un 15% en bolsa (llegó a caer hasta un 18,01% en la apertura).

Zalando ha alertado de que prevé unas ganancias de entre 180 y 260 millones de euros para este año. Cifras muy por debajo de las previstas anteriormente, que eran de entre 430 y 510 millones de euros, pese a que "aún queda el segundo cuatrimestre, que será rentable, pero más débil de lo esperado", según ha señalado la propia compañía.

La decisión no ha gustado nada a los inversores. Zalando se sitúa como el peor valor de la bolsa alemana, ya que se desploma cerca de un 15%, hasta los 22,10 euros por acción, marcando mínimos desde 2014 y cerca desde que debutara en el parqué. De hecho, algunos bancos de inversión que siguen a la compañía, como Oddo BHF, han aplicado un fuerte tijeretazo a sus valoraciones, ya que han rebajado su precio objetivo desde los 34 a los 29 euros este viernes y han mantenido su consejo en sobreponderar. Por su parte, otro como Kepler Cheuvreux ha puesto bajo revisión su recomendación, que era de retener con una valoración de 77 euros por título.

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Carlos Rodríguez

La tienda 'online' de moda alemana sigue así los pasos de la británica Asos, que hace semanas lanzó otro 'profit warning' al señalar que, "visto el aumento significativo de devoluciones, esta presión inflacionaria está afectando cada vez más el comportamiento de compra de nuestros clientes", advirtió su director de operaciones, Mat Dunn. En definitiva, en el sector impera una enorme incertidumbre respecto de los hábitos de los consumidores como consecuencia del repunte de la inflación.

El sector, sobre todo el que se dedica a las ventas 'online', está acusando el fin de la pandemia y la vuelta a la normalidad. La aparición de la pandemia hizo que este tipo de compañías ganara un gran número de clientes y disparara su volumen de ventas, pero, a medida que la vuelta a la normalidad se ha impuesto, los patrones de compra de muchos de ellos han priorizado las compras 'in situ'.